Siempre a tu lado (parte 14)

787 58 4
                                    

—¡¿Dónde está Hinata?! —Naruto solo preguntaba una cosa, a simple vista se podía notar la impotencia que este sentía.

—Tienen que venir con nosotros.

La marioneta había llegado en el mismo objeto en el que Toneri llegó por Hinata esa noche. Los chicos se subieron sin cuestionar nada más y la plataforma los llevó directamente al castillo de Toneri dentro del sol artificial.

Al ver esa plataforma, Naruto había recordado lo que había sentido cuando estaba con Hinata, cuando le dijo: "te amo" y cuando el problema seguía siendo que la Luna destruyera a la Tierra. Recordó que en ese momento lo único que quería era más tiempo para estar con ella, no queria que las cosas acabaran así. Recordó el alivio que sintió cuando todo acabó y regresó a la Aldea junto a Hinata con sus manos entrelazadas y la sonrisa dichosa en sus rostros.

Ahora... a lo que le tenía miedo, era no poder volver a verla.

Llegaron al castillo, Toneri los recibió en la sala principal, él estaba sentado en un sillón rojo dándoles la espalda mientras miraba la chimenea. Su calor y sus colores vivos parecían serle reconfortante.

—Bienvenidos. ¿Qué los trae por aquí?

—No venimos a jugar... Lo sabes bien. —Sin darse cuenta contestó de la forma más grosera posible.

—Toneri... —Sakura habló. —¿Recibiste a Hinata como lo acordado?

Toneri se levantó de su asiento y se acercó a la chimenea aún dándoles la espalda.

—No. No la encontramos en esta superficie.

—Ella tiene que estar aquí, no salió con nosotros ese día.

—Ya te dije que ella no está aquí... —En su voz se notó el remordimiento que sentía.

Sakura apretó su puño y fue hacia él, lo tomó con una mano mientras se preparaba para darle un golpe en el rostro. Sin duda, se desconcertó cuando el rubio la detuvo.

—¿Naruto...?

—Ella no está aquí... —Paso de tener la mirada clavada en el suelo, a mirar el rostro de Sakura.

—¿El modo sabio...? —Sakura suavizó su mano y la bajó con delicadeza. —Lo siento mucho, Toneri.

Los pasos de Naruto saliendo del castillo rompieron el silencio que abundaba. Se marchó del lugar dejando a Sasuke y a Sakura con Toneri.

— ¿Saben...? No pensaba ayudar a Naruto. —Toneri se río.

—¿Qué te hizo cambiar de opinión...? —Sasuke con su tono de voz relajado preguntó, limpiándose el polvo de los hombros.

—Yo realmente quiero a Hinata... —Suspiro. —Creí que podría hacer que ella se fijara en mí después de ayudarla. 《Cosa que claramente no iba a pasar.》 Pero hable con Naruto una vez...

Toneri se acercó a ellos una gran esfera amarilla se formó sobre ellos.

Los dos shinobis de la hoja apreciaron desconcertados. No habían tenido la mínima interacción con Toneri en el pasado. No sabían de lo que era capaz.

Aquella esfera les mostraba a Naruto.

[...]

Cuando el rubio se había quedado de guardia vigilando la cueva, había sentido ardor en sus ojos, los cerro y comenzó a rascarlos fuertemente, al abrirlos ya no estaba fuera de la cueva, sino estaba en un genjutsu.

—Naruto.

—¡Toneri! Otra vez tú. —Naruto salto hacia él queriendo golpearlo, pero su puño solamente lo atravesó. —¿Qué quieres?

—Tu sabes lo que quiero...

Naruto había entendido, subio presión arterial y se aceleró su ritmo cardíaco. Quería golpearlo.

—Estas loco. —Fue lo único que su furia dejó salir.

—Hace mucho tiempo baje a la tierra con mi padre, estabamos escondidos en los arbustos. Señaló a una niña y cuando gire era ella, él me dijo: "Algún día vendremos y la haremos tu esposa", yo quedé fascinado. Baje varias veces a verla pero me di cuenta de algo. Ella ya estaba mirando a alguien más, pero ese alguien nunca la miro a ella. Y, apesar de eso, ella siguio amándote. Siempre te tuvo en sus pensamientos, incluso la noche en la que te dejo para venir conmigo.

 Siempre te tuvo en sus pensamientos, incluso la noche en la que te dejo para venir conmigo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

—Entonces dime, ¿de verdad te mereces su amor?

Todas las palabras de Toneri realmente provocaron un sentimiento de dolor demasiado fuerte en él. El nudo en su garganta no lo dejaba hablar, su rostro ya no reflejaba enojo, si no tristeza.

Siempre a tu lado [NaruHina]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora