No me dejes. (Ushijima Wakatoshi)

27.

Hoy era el día, hoy Izumi decidió dar un paso más hacia Wakatoshi, lo corromperá lentamente, en las relaciones sexuales que tuvo a lo largo de su corta vida, casi nunca tomaba el papel dominante, siempre era la sometida, por lo que sentía algo de adrenalina correr por sus venas al saber que ella sería la que daría el "siguiente paso", y aquel torneo de Volleyball que tendría Schweiden Adlers de visitante en otra ciudad era la oportunidad perfecta, aprovechó que era un fin de semana, pidió con antelación en su trabajo un dia libre y viajó en el tren bala hacia Miyagi, la ciudad dónde sería el partido, tenía una entrada gratis que le otorgó su -aún no- pareja, y Ushijima se ofreció a pagar un hospedaje en un hotel para ambos, Izumi sintió que la suerte estaba de su lado por lo que accedió de inmediato sin siquiera pensarlo, ante los ojos puros de su hombre, que no sabía lo que la morena se traía entre manos.

En estos momentos, Izumi apreciaba la habitación que compartiría con Ushijima durante dos noches, imaginando que tantas cosas pervertidas podrían hacer, aunque descartó esos pensamientos al recordar que irían despacio ¿Qué mierda me prometí? Frustrada se tira en la cama decorada con un fino acolchado blanco, tenía que dejar rápidamente su mini bolso, y dirigirse al estadio donde se jugaría el partido, cambia su blusa por la camiseta que le regaló Wakatoshi, toma la entrada y emprende camino al establecimiento. 

Ya en el estadio, se impresiona al ver la cantidad de personas que estaban allí para apoyar a su equipo favorito, Izumi se dirige a su asiento, que se encontraba cerca del sector "popular" donde estarían la banda de animadores, reposa sus brazos sobre el barandal para inclinarse a observar en el letrero digital gigante cuánto tiempo restaba para que comience el partido: 10 minutos. Tocan su hombro y al dar la vuelta dos pompones de papel plástico aparecen frente a sus ojos, los sostiene en sus manos y mira extrañada a la chica desconocida que se los extiende con una sonrisa gigante, vestia una falda y una musculosa blancas que enseñaba su abdomen, una porrista. 

—¡No puedes estar en el sector de animadores y no animar! ¡Utiliza estos pompones! ¡Espero oir tus gritos y aplausos!—Izumi se quedó estupefacta ante la actitud hiperactiva de aquella muchacha, y luego soltó una carcajada comenzando a sacudir aquellos pompones de colores blancos y dorados mientras observa que los animadores empezaron a gritar al unísono un par de frases. Extrañaba taaanto esto.

Siente su celular vibrar, sostiene los pompones entre sus piernas, lee y relee atentamente el mensaje que envió Wakatoshi, y finalmente decide responder:

[Luego del partido, ve hacia los hombres de traje que se encuentran detrás de las barras, pregunta por Frank, y en cuanto puedas contactarte con él, dile que yo te envié, y cuando te pregunté por una clave dile xxxx]

Izumi se sonroja fuertemente, controla su respiración y teclea una breve pero directa respuesta

[Bien, estaré animándote. Anota muchos puntos por mi. Te quiero.]

No recibe una respuesta inmediata por lo que supone que Ushijima había enviado ese mensaje fugaz y se preparó para salir a la cancha, y como si lo hubiese invocado, comenzaron a presentar a los jugadores del equipo local, Black Jaguars, y después al equipo visitante, gritos se oían de aquí por allá, y ella no fue de menos, también vociferó y saltó junto a las demás personas que se encontraban en su sector, luego de la formación y un saludo formal por parte de ambos contrincantes, cada uno fue a sus respectivos espacios. Izumi notó una cara nueva en el equipo y le resultó conocida, ¿en qué momento Kageyama Tobio se sumó al equipo?  No lo pensó demasiado, pero ya quería burlarse de Wakatoshi por tener que rematar las colocaciones del ex miembro de Karasuno, el único equipo que pudo vencer a Shiratorizawa durante su período en preparatoria. 

Antes de que suene el timbre que da inicio al partido, el rematador dirigió su vista al sector popular, buscando a Izumi, ella observó esa acción y agitó con entusiasmo sus pompones, aunque era en vano ya que toda la grada estaba haciendo lo mismo, pero en cuanto la vió, Ushijima gira la cara avergonzado y mira sus pies, desde su punto de vista, agitando sus manos y sonriendo, sus sentidos vacilaron, Izumi tenía su brillo propio. De repente, se sintió motivado para rematar todas las colaciones que estuvieran a su disposición, infló su pecho y se preparó para realizar el primer servicio as del día. 

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.Gracias por las +3000 lecturas, cada vez son mas personas :)

Este es un capitulo corto, solo porque se me hace tedioso relatar un partido :) el proximo capitulo será prometedor.