22.

2K 143 10
                                    

Se podía sentir en el aire la ansiedad de los que comenzaba su primer año en la Academia Shiratorizawa, y la emoción de los de tercero por su último año de preparatoria, donde los de mayor nivel tenían el gran dilema, o por lo menos, de Izumi: "¿A que universidad aplicaras?" . Podía jurar que en las seis semanas que llevaban de clases, le habían hecho esa pregunta cuatro personas diferentes, entre ellas sus profesores y Shirabu, y siempre respondía lo mismo: "No se que haré en las próximas horas, menos voy a saber que haré el año que viene.", de lo único que estaba segura era de que se iría de su casa si o si.

Por un lado, sentía que se estaba quedando atrás, que no progresaba, la mayoría de sus compañeros pudieron responder fácilmente, incluso Shirabu había aplicado para una beca en una prestigiosa Universidad de Medicina, la cual estaba segura que obtendría, ya que hace meses estudiaba para el Examen de Ingreso, el cual estaba lejos de la fecha pero aun asi, lo estaba dando todo de sí.

Su "-no- relación amorosa, -no- novios, solo nos gustamos mutuamente pero no somos nada formal" como lo habían definido después de aquella noche en Kodaira,  no avanzó mucho, por no decir nada, ya que el problema era la distancia que los separaba, las tres horas en metro que los mantenía alejados, aunque, sentía un peso menos encima al haber hablado de sus sentimientos, tenía otros problemas con los que cargar: su cumpleaños número 18.
A tres días de su cumpleaños, Izumi quería reunirse con Wakatoshi, más los horarios de ellos no coincidían y mucho menos los días de descanso, por lo que se les complicaba hablar más allá de mensajes de textos, y su -no novio- evitaba enviarle mensajes durante sus clases para no distraerla, los domingos son los días en los que hacen una videollamada que duraba mucho tiempo, horas de Izumi hablando de cosas al azar, mientras Ushijima solo la observaba con un semblante relajado asintiendo en silencio, y en momentos de distracción la morena tomaba capturas de pantallas de su cara, y las guardaba en una carpeta como si de tesoros se tratase.

Izumi amaba sentirse escuchada, que le prestaran la atención que siempre sintió que no tenía y le agradaba que mostrara interés en ella con cada mensaje, llamada o videollamada que compartían. Más allá de que Ushijima era una persona de pocas palabras, siempre fue directo respecto a ella, respondiendo con monosílabos precisos y oraciones cortas pero que significaban mucho para ella. 

—¿Que dices?

Se percató que el ruido que sentía hace unos quince minutos era la voz de su amigo hablando de trivialidades y ahora le había preguntado algo de lo que ella no tenía ni la mas minima idea.

—¿Sobre qué?

—Sobre salir este fin de semana luego del juego, a un bar por tu cumpleaños 18, con Semi y Tendou.—repite fastidiado de que su amiga viva en la luna.

Lo piensa durante unos segundos. 

—Esta bien, pero yo nunca he bebido alcohol antes ¿y Tendou y Semi no estarán muy ocupados con la universidad? No quiero molestarlos por una estupidez.

Nunca le habían propuesto hacer algo por su cumpleaños, no desde que era una niña pequeña, por lo que de alguna manera, se sentía insegura ante la insistencia de hacer algo por ese dia que ella lo consideraba como "uno más", ni siquiera en los años que conoció a Ushijima lo festejó o algo por el estilo, solo la saludaba con un "Feliz cumpleaños"  y después seguían con su vida, eso era lo más cómodo para ambos, pero parece que ahora tiene personas con las que puede contar para celebrar el día de su nacimiento. 

—¿Pero qué dices? Ellos propusieron la idea de llevarte a beber, ya que los demás aun son menores de edad. Además, tu cumpleaños no es una estupidez, por lo menos para nosotros no lo es. 

No me dejes. (Ushijima Wakatoshi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora