Por y para siempre

El concierto: Alianza, o ¿no?✨

Narración normal

El estadio estaba hasta los topes de gente reunida para ver el concierto que tendría lugar en apenas minutos, de hecho, había gente que había formado cola muchas horas antes de la actuación solo por ver a sus ídolos en directo. Quizás este concierto tuviera aún más espectadores de lo normal, pues todas las personas querían ver la actuación conjunta de los Three Lights junto a Michiru Kaio y la orquesta puesto que prometía ser una actuación única.

Seiya Pov's

Miraba al reloj de la pared del camerino donde estaban esperando a que les dieran la señal para salir al escenario, y sin poder evitarlo una sensación de tristeza me rodeo sin poder evitarlo, sabía que estaba trabajando, pero aun así había tenido la esperanza de que pudiera llegar.

- Ya Seiya - comentó Yaten algo molesto, o eso parecía. - Deja de mirar el reloj a cada minuto. Las chicas estaban trabajando, es imposible que lleguen a tiempo.

Miré hacia mi hermano con curiosidad, aunque no estaba seguro de qué me dio más curiosidad, si el tono de su voz o lo que había dicho.

- ¿Cómo sabes el motivo por el que miro el reloj...? ¡Espera has hablado en plural...! - pregunté y exclamé casi de manera seguida mientras las ruedecitas de mi cerebro se activaban y miraba hacia mi hermano de una forma curiosa que causó que él se sonrojara. - ¡No me lo puedo creer! Invitaste a Mai a venir, ¿cierto?

- ¡Basta, Seiya! - exclamó Yaten aún sonrojado, pero molesto. - Sí lo hice y me dijo que no podía por qué trabajaría...

- Ustedes dos se están complicando la vida... - murmuró Taiki mirando a sus hermanos. - Les entiendo de verdad que lo hago, pero ¿Han pensado en qué harán cuando aparezca nuestra princesa...? ¿O si no la encontramos...?

- Si no la encontramos, no habrá nada que pensar Tai - comentó Yaten con tristeza. - Seremos destruidos junto con este mundo...

- Y cuando la princesa aparezca... deberemos de volver a nuestro destino y misión - añadí a pesar del pinchazo de dolor que sentí en mi corazón, pues solo pensarlo dolía muchísimo. - Posiblemente nos duela, o no... si conseguimos encontrar alguna manera de hacerlo funcionar...

- ¡No seas estúpido, Seiya! - exclamo Taiki sin suavidad ahora, por qué sinceramente le parecía una idiotez lo que acababa de decir su hermano. - ¿Qué crees que digan esas chicas cuando les digas que eres una Sailor de un sistema solar lejano? Lo más seguro es que no te crean, pero, aunque lo hagan... Ellas no podrían ir y tú no podrías venir. No es posible, son humanas corrientes.

- ¡Lo sé! - Grite con lágrimas que no pude contener, por qué sinceramente era plenamente de lo que decía Taiki, pero quería soñar, soñar con que sería posible. - ¡Lo sé, demasiado bien! Pero no pienso no disfrutar de mis sentimientos cuando sé que son correspondidos. - añadí con seguridad, sin importarme la mueca que hizo mi hermano. - Es mejor haber amado y haber perdido el amor que no haber amado nunca.

- Espero que tengas razón Seiya - murmuró Taiki con pesar, mientras apartaba la mirada. - Por tú bien y el de Yaten, pero sobre todo por el de esas muchachas que también quedarán con el corazón roto.

Eso hizo que mi corazón se estrujase un poco... yo sabía en lo que me estaba metiendo, pero mi Bombón no lo sabía... ¿Era justo?

- Deja de comerte el coco, Seiya - comentó Yaten mirándome, mientras ponía una mano en el hombro, como si supiera lo que pensaba. - No puedes arrepentirte ahora, pues ya está hecho.

Y era cierto, no era momento para arrepentimientos disfrutaré al máximo y haría que cada recuerdo fuera único para que cuando tuviera que irme ella me recordase con una sonrisa en su cara. No pude pensar más por qué vinieron a por nosotros, pues era hora de que el espectáculo comenzara.