Por y para siempre

Festival ✨

Narración normal

Después de que Yaten pasara la noche en casa de las chicas, tanto él como Seiya volvieron a hablar más, pero ambos estuvieron muy ocupados con sus proyectos como para visitar a las muchachas.

Las chicas también estaban trabajando mucho fuera de la preparatoria, pero también dentro de ella, pues el festival escolar se acercaba y su salón haría una cafetería. Todo el mundo estaba arrimando el hombro para conseguir que tanto la temática como lo ofrecido fuera perfecto. Las gemelas se encargaban de la decoración, mientras que Lita se encargaba de los trajes con ayuda de Rei y Hanon. Pero el día del festival sería Lita quien brillaría puesto que haría los pasteles que su salón vendería y todo el mundo parecía emocionado por ello.

Seiya estaba bastante frustrado y una de las noches decidió salir del apartamento después de ser regañado por Taiki y Yaten por no parar de tocar la batería con demasiada intensidad. Realmente se sentía muy frustrado de que su música fuera escuchada en todos sitios, pero su princesa pareciera no oírla a pesar de poder sentirla cerca.

Seiya Pov's

Caminé con la cabeza sumida en mis propios pensamientos y sin darme cuenta acabe haciendo el recorrido que iba a casa de las chicas, aún tenía las llaves... pero sería un poco rudo aparecerme de noche en su casa sin avisar, ¿no?

Cuando llegué pude ver que la luz de la habitación de mi Bombón seguía encendida, tal vez fuera una señal y las llaves picaban en mis manos, pero no me atrevía a cruzar ese umbral, estaba de un humor raro y tenía miedo de que hacer algo que complicase mi relación con ella aún más.

Gina Pov's

Estaba encantada con participar en el festival escolar y los trajes que Lita había hecho eran increíbles, aunque tuviera que estar arreglando la cintura por que Hanon era más ancha que yo. Mi hermana también estaba ilusionada y, de hecho, ella quería haber hecho de modelo para los trajes, pero nuestro trabajo nos estaba consumiendo más tiempo del normal pues nos habían llamado para un proyecto muy importante, así que en lo que quedaba hasta el festival ellas ya no podrían ayudar. Era una pena, pero sabía que el siguiente domingo todo iría perfecto.

Estaba tan concentrada, que se sorprendió cuando una mariposa roja brillo en la habitación y desapareció justo donde su ventana. Cuando se asomó vio a Seiya que justo parecía a punto de irse.

- ¡Seiya! - exclamé con alegría, hacía tiempo que no le veía y estaba feliz de verle.

- Hola, Bombón - saludó con una sonrisa suave, mientras me miraba. - ¿Qué haces despierta?

- Arreglando unas cosas del traje del festival. - respondí con una sonrisa. - Espera que bajo a verte un rato.

- No, Bombón. - comentó Seiya con suavidad. - Me conformo con ver tu linda cara.

- Espera por favor, te enseñaré el vestido - añadí, quería que se quedará, pero... parecía que no lo haría - ¡Mira!

- Es muy bonito - comenté con suavidad, pero luego pareció intrigado o algo, así que no me sorprendió mucho su siguiente pregunta. – Pero, ¿qué hará nuestro salón para que llevéis esos trajes?

- Seremos una cafetería - comenté con diversión, y luego le miré con algo de súplica. - Seiya, vendrás, ¿no?

- Claro, Bombón - aseguró él con una sonrisa. - Allí estaré. Nos vemos, Bombón

Se puso a caminar y yo cerré la ventana pues Chibi Chibi había aparecido detrás de mí quejándose por qué la despertara. Una vez que apague las luces, sin embargo, cambie de idea y salí corriendo de casa intentando hacer el menor ruido posible.