25.- Haseul corre, Haseul se ¿reconcilió?

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Aire, eso era lo que llevaba necesitando tanto tiempo, por mucho tiempo, desde que llego a ese lugar. Haseul sabía que ese aire, no iba a durar mucho, por eso lo aprovechaba lo más que podía

Sí ha llegado a pensar en mudarse de nuevo, lo único que le hacía pensar que era mejor quedarse, eran los problemas que cambiarse de hogar después de poco tiempo de haberlo hecho y también porque por más que sea impresionante saberlo, Kahei y Yeojin se sentían felices. Tal vez Haseul tenía que buscar la felicidad en ese lugar y en la gente que la rodeaba, aunque sea muy difícil encontrarla

—¡La vecina hueca!—

Sí, muy díficil

—¿Cómo estás?, ¿Qué te trae por aquí un día lunes?, ¿Y tu trabajo?— Heejin llegó haciendo muchas preguntas, se sentó a un lado suyo en la banca

—Pensar que ustedes no existen— respondió con sus ojos cerrados y un volumen bajo de voz

—¿Ah?—

—Eso...— Haseul abrió los ojos, se encontró con Heejin mirándola curiosa y a lo lejos veía a Hyejoo correr de Hyunjin, luego los papeles se cambiaban y Hyejoo perseguía a Hyunjin por todo el césped, no sabía si era un juego o estaban peleando como si las dos fueran niñas pequeñas

—¿Estás pensando en que las dos parecen unas niñas, no?— Heejin preguntó descubriendo por completo a Haseul y esta última se tensó en su lugar por la repentina pregunta —Sí, lo son, pero te recuerdo que alguien se asustó de la misma forma que su hija lo hizo cuando la luz se apagó—

—Uff— exageró la onomatopeya y movió su mano —¿Quién habrá sido esa que yo no la recuerdo?—

—¿Se llamará Jo Haseul?— comenzó a hablar sarcástica también —No lo recuerdo, pero que idiota será esa, me pregunto cómo sigue viva—

—Ya, dejando de lado eso...—

—Uy, alguien se ardió— Heejin se burló y Haseul inmediatamente le dio una fugaz mirada de odio —Continua, no me gusta esa violencia—

—Ja, ja. La violencia decía— se burló notablemente sarcástica y miró hacia Hyejoo que al parecer estaba practicando sus golpes junto a Hyunjin de forma amistosa y "pacífica" —Espero que estés bromeando, porque si no, creo que necesitas clases—

—Sí, estoy bromeando— Heejin admitió y sonrió sarcástica —Ya, dime de qué querías hablar—

Haseul se preguntó si de verdad Heejin quería hablar con ella, por lo que la miró curiosa e intrigante

—¿Tú trabajas?, ¿O tu novia molestosa  e irritante?— preguntó Haseul, Heejin no se esperaba esa pregunta y la miró con sorpresa, con bastante sorpresa

—¿Tú hablando como una persona consciente e inteligente?— Haseul pensaba que era la conversación más sarcástica que nunca ha tenido —Yo... Hablando en serio, ninguna está trabajando, perdimos el trabajo por la pandemia, ya sabes...— habló ahora con sinceridad

—Ah...— Haseul no sabía mucho qué podía decirle, por primera vez en su vida sentía pena por las personas que llamaba las cosas más irritantes que les tocó —¿Cómo lo hacen para poder sobrevivir o alguien ayuda...?—

—Hyunjin piensa ir limpiando autos... A nada...—

—Pero si la otra vez casi raya su auto en vez de limpiarlo— Haseul hizo una mueca de disgusto

—La práctica hace el maestro— levantó sus ambos brazos

—Sí, que buena maestra...— Haseul hablaba con su mirada fija en Hyunjin que solo jugaba —¿Y el resto de vecinas?, ¿Todas esas locas?—

¡Vecina, Su Hija! /LOONA/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora