24.-Choerry cae, Choerry gana

917 162 34
                                    

—¿Sueño?—

—No, idiota—

—Ay perdón, estoy tratando de ser cariñosa— Jinsoul hizo un puchero, ella y Jungeun estaban sentadas juntas en el sillón —Estoy tratando de subir un poco tu ánimo... Que nunca a sido muy alto, pero...— fue callada con un beso, más que nada porque probablemente diría otra idiotez

Jinsoul con las manos alrededor de la cintura de Jungeun, se separó del beso solo para mirarla a la cara confundida. Sus pierna que estaba debajo de las de Jungeun, la movió hacia arriba molestándola

—Eres muy cambiante—

—Tú igual— típico juego solo de ellas, por lo que terminó en un abrazo tímido por parte de Jungeun que de esa forma acomoda mejor su cuerpo para apegarlo mejor al de Jinsoul y por último esconde la cabeza en su pecho

—¿Dónde está Yerim?— preguntó Jinsoul mirando hacia los lados

—¿En su cuarto?— Jungeun no sabía la respuesta, por lo que también comenzó a buscarla con la mirada

—¿Deberíamos ir a buscarla y ver qué está haciendo en estos momentos?—

Cuando Jungeun estuvo apunto de responderle, incluso llegó a separarse un poco del abrazo, Yerim apareció por el pasillo saliendo de su cuarto, cuando llegó a la sala, ignoró a las dos y se fue a una parte de la mesa donde tenía un juguete que se le había olvidado llevar a su cuarto

—Oh... Ahí está ella, está bien— Jungeun volvió a relajarse, dejándose caer nuevamente en los brazos de Jinsoul. Aunque tal vez Kim cantó victoria muy luego

Yerim en el momento en el que se bajó de la silla que usó para acercarse mejor de la mesa, pisa mal en el suelo por un doblado de su pie y cae al piso golpeando su rostro. Tanto a Jinsoul como a Jungeun le dio un retorcido en el estómago por el dolor mutuo que sintieron con la pequeña, llegaron a sentir ese dolor

—¡Yerim!— Jungeun fue la primera en despegarse para tomar a la pobre niña tendida en el suelo que comenzó a llorar de inmediato —¿Estás bien?— No, Jungeun, es obvio que no está bien

—¡Mamá~!— comenzó a lloriquear, aferrándose a los brazos de Jungeun, Jinsoul que tenía sus manos libres, intentó tomar el rostro de Yerim que se veía comenzar a sangrar desde su boquita —¡No!— gritó ahogada, no quería que su herida o lo que sea que tenga se viera

—Dejame verte— Yerim no protestó más y abrió su boca, pero muy poco, casi no la podía ver —llevala al baño, yo... Eh... Traeré cosas para ayudarla a sanar— propuso Jinsoul y Jungeun rápidamente fue al baño con la niña en sus brazos

Jinsoul en realidad no sabía qué hacer, fue al baño con un poco de hielo, después dijo que era imposible que eso la ayude, por lo que se arrepintió. Luego fue hasta con papel de periódico, fue el doble de estúpido por lo que se arrepintió también. Todo el tiempo que llegaba con algo estúpido y después se devolvió con lo mismo, Jungeun la miraba discriminando

—¿Habrá que llevarla a qué la revisen al hospital?— Jinsoul preguntó ya sin ideas de en qué poder ayudar

—¿Estás loca?— Jungeun le respondió con otra pregunta mientras limpiaba restos de sangre

—Yo solo quiero ayudar...— se cruzó de brazos con un puchero

—Bueno... El sangrado aún no se detiene...— Jungeun consideraba la idea de llevarla a algún lado y qué tal vez pudieran ayudarla mejor, no solo ella que limpiaba rastros de sangre que seguían saliendo

—Mami, me duele— Yerim continuó llorando

—Creo que no estás tan loca con esa idea...— Jungeun también limpió las lágrimas

¡Vecina, Su Hija! /LOONA/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora