34.- Chuu arregló, Chuu cerró

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—Aquí tengo miedo— Jinsoul confesó, tomando un largo suspiro sonoro

—¿Por qué tendrías que tener miedo ahora, mami?— Yerim miró confundida a la mayor

—Porque... Es la casa de Sooyoung— Así como Jinsoul decía, hoy era el día en que Yerim se quedaría con Jiwoo en su casa, jugando con Chaewon más que nada, o eso creían

—Ay, que maldita desconfiada— Sooyoung estaba en el marco de la puerta escuchando cómo Jinsoul seguía diciendo que desconfiaba de Chaewon y Jiwoo —Aunque yo también lo haría, pero solo yo lo puedo hacer, ¿Me entiendes?—

—No, no te entiendo y nunca lo haré, muchas gracias por el anuncio— le respondió sarcástica y arregló lo último en el poleron que llevaba Yerim en esos momentos —¿No dejaste ninguna tarea sin hacer?— se dirigió a la pequeña

—Hay una, pero es para muchos días más desde hoy— le hizo un mohín, adornando su rostro de forma tierna

—Nunca dejes para mañana lo que puedes hacer hoy— le dio un consejo, aunque ella no era la más indicada para dárselo

—Y tú nunca llegues tarde al trabajo que te echan— Sooyoung le dio una amistosa patada por la espalda, más específicamente en el trasero, haciendo que tenga que apoyarse en el piso para no caer

—¡Me vuelves a tocar un solo pelo y no ves a tu hija nunca más!— Jinsoul le advirtió enojada

—¿Eres capaz de matar a mi hija?—

—No, me la voy a robar y será mi hija desde entonces—

—Sí, sí, apresurate si no quieres que vuelva a pegarte, y esta vez te voy tirar por tu propia ventana— Sooyoung advirtió —Y tampoco te dejo abrazar a Chaewon, nunca más, a menos que yo muera—

—Uy, ya sé a quién voy a matar primero. Será buena opción si quiero estar con la única persona que me soporta en este edificio— hizo como si se limpiara las manos

—¿Qué clases de cosas les enseñas a Yerim hoy en día?— cuestionó con desagrado, miró a Yerim esperando una cara de espanto y eso no fue así

—¿Matar a la vecina Yves...?— movió sus manos también —Tal vez así tengo todos sus diarios para mí sola y puedo burlarme de...—

—¡Yerim!— se quejó la cuestionada después de escucharla —Por favor no te dejes llevar por Jinsoul, por favor. Lo que nadie quiere es que seas como Jinsoul, por favor, Yerim. Sé como tu mami Lip, ella... No, tampoco...—

—¡Yerim~!— Chaewon llegó hacia ellas, a diferencia de Yerim, esta salió de clases un poco más tarde, aunque ella nunca entraba, lo aprendió de Jiwoo

—¡Chaewonnie!— Yerim extendió sus manos para que la rubia pequeña le diera un abrazo

—¿Qué jugamos hoy?— dijo en medio del abrazo

—Lo que sea— respondió y se separaron de ese abrazo

—Bueno... Nos vamos...— Sooyoung lo intentó, ya era pan de cada día que tenga que apurar a Jinsoul

—¡Gowon!— ahora Jinsoul abrazó también a Chaewon, dándole el mismo abrazo cálido que Yerim anteriormente le había brindado, algo heredable se podría llamar así

—¡Hey!— se quejó Sooyoung otra vez

—Ya, ya vamos— lastimosamente, Jinsoul se tuvo que alejar de Chaewon

Apenas se separaron, las que se iban a trabajar salieron caminando rápido y las niñas entraron a la casa, Yerim cuando entró fue recibida con un abrazo por parte de Jiwoo y cerró la puerta detrás de ellas

—¿Quieren jugar con Molly?— Jiwoo lo dijo muy normal, mientras Yerim buscaba un lugar para sentarte y Chaewon parecía desaparecer camino al baño

—¿¡Era cierto lo de la vaca!?— Yerim exclamó sorprendida, seguido de eso escucha un "mu" y abre más los ojos

—Pues claro— Jiwoo respondió y el animal comenzó a caminar por el pasillo —Nos dijeron que teníamos que devolverla mañana, es una pena, casi no estuvo aquí— se acercó hacia la vaca y acarició su cabeza

—Ah...— quedó sin palabras, literalmente no tenía nada que decirle y menos a una vaca en frente suyo

—¿Sabías que la leche de vaca es mejor cuando la sacas directamente de ella?— Jiwoo hablaba y Yerim simplemente la iba a dejar hablar, ¿Por qué Haseul se tenía que ir de turno justo ese día? —Yo no lo probé hasta hoy y es cierto, creo que me queda un poco, sino puedes venir mañana también—

—Mami... Pasa algo— Chaewon llegó interrumpiendo a Jiwoo, había preocupación en su voz y también miedo

—¿Qué pasó?, ¿Una araña?— se acercó hasta su hija que se posicionó frente a ella y se tomó su pantalón desconfiada

—El baño se tapó de nuevo— terminó por confesar

—Chaewon, eres muy pequeña como para hacer esas atrocidades—

—¡No~!— negó rápidamente con su cabeza y tiró nuevamente de su pantalón, esta vez más fuerte —Se puso así apenas entré, yo no hice nada malo, lo juro—

—Rayos, en estos momentos es cuando Jinsoul es útil con un sopapo en sus manos— dijo divertida, tal vez no era momento para divertirse, pero ahí estaba Jiwoo —¿Entonces cómo rayos?, ¿No viste algo?—

—Puede que se tapó por culpa de la comida de la vaca, toma pasto de afuera y los bota aquí— no hay que cuestionarse mucho eso, simplemente la casa de esa familia era así

—¡Oh!— exclamó soprendida, subió su cabeza y se dio cuenta que el agua comenzaba a salir —Yerim, ¿Te dijeron que a esta casa uno viene a trabajar a la comunidad?—

—¿Ah?—

—Bueno... Ahora te lo anuncio—

Una hora, eso se demoraron en recién secar un poco del piso que estaba todo mojada. Otra hora en revisar cómo es que está tapado y si en verdad fue la vaca la culpable. Y la última para dar por terminado y arreglado ese baño que solo sufrió un inconveniente más de los que ya tenía

—¿Ustedes saben que toda mi vida he luchado con suciedad?— se limpió las manos Jiwoo, como si fuera una heroína de película —No literalmente, pero creo que me entienden— No, no la entendía, pero prefirieron quedarse calladas, si Jiwoo dice algo, simplemente hay que dejarla ser porque no cambia sus ideas

—Hoy conocí un poco más a quién es tu madre— Yerim le dijo a Chaewon que jugaba con ella a las damas

—Nunca la terminas de conocer, eso me dice mami Yves— Chaewon tenía un punto muy cierto

—Bueno, ahora Molly tiene que...— Jiwoo fue interrumpida por el sonido del timbre —¡Oh!, ¡Debe ser una de las idiotas!— fue dando pasos rápidos que parecían saltos hacia la puerta

Sin dudarlo mucho, abrió la puerta de su casa con ánimo y fuerza, ahí estaba Jungeun con la gallina del otro día entre sus brazos como si fuera la otra hija

—Vengo por...— fue interrumpida por la misma Jiwoo

—Con una gallina fea no entras a mi casa, ni en sueños— cerró abruptamente la puerta lo más rápido que pudo

—No voy a entrar, ¡Yo solo quiero a mi hija!—

—No voy a entrar, ¡Yo solo quiero a mi hija!—

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¡Vecina, Su Hija! /LOONA/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora