Cómo lidiar con este hombre

Epílogo

Seis meses después.... 

A seis  meses de vivir junto a Nicolás y debo admitir ha sido mejor de lo que suponía,  los primeros días fueron ¿extraños?  Si, quizás.  ¿hemos tenido altibajos?, por supuesto;  pero hemos sabido como llevar la situación y como vivir sin agobiarnos el uno al otro,  hasta ahora todo va bien.  El único problema,  o no,  no debería llamarlo problema o percance...  Digamos que,  la única situación es que, estoy embarazada...

Y ya se que eso no es nada del otro mundo,  pero Nicolás y yo habíamos hablado en un principio, que tomaríamos un tiempo para ambos,  es decir,  tendríamos hijos quizás un año o año y medio después,  el tiene nuevos proyectos importantes y yo estoy en mi mejor momento en el trabajo,  además, nos dedicamos tiempo el uno al otro,  sin agobiarnos, Claro. Pero,  constantemente tenemos sexo sin protección y que podemos esperar de eso ¿una lavadora?, ¿ Un carro?  No,  claro que no. Por eso es importante usar protección.

¿Estoy triste? No,  ¿decepcionada?  Tampoco, ya de por si había tenido la ilusión de ser mamá aquella vez que perdí un hijo, y hoy la naturaleza me ha dado ese privilegio una vez más y eso me hace feliz,  muy feliz.  La cuestión es,  que no se como se lo voy a contar a Nicolás por alguna razón estoy nerviosa,  bueno,  solo un poco nerviosa.  Ya se que el no dirá nada porque la última vez el reacciono de una forma que no le lo esperaba y también le hacía ilusión ser papá; pero como les mencioné antes,  ya habíamos hablando de eso.  No me voy a torturar imaginando que el se lo tome a mal, me tranquilizaré,  el es un buen hombre y sabrá que lidiar con esto junto a mi.

Saco de mi mente todas esas barbaridades que estoy pensando y me concentro en Sophie que está sentada junto a mi tomando sol en el jardín de la casa.

- Isabelle, ¿me estas prestando atención?  - arruga su cara mientras me escanea con la mirada.

- ¿decías...?

- Te decía que,  Mike me ha dicho que quiere tener un hijo.  - da un trago de lo que sea que tiene un su copa.

- ¿Y eso que tiene de malo?

- No tiene nada de malo pero,  estoy en mi mejor momento, no llevamos mucho tiempo de casados; no se si recuerdas que te conté que se nos hacía complicado dedicarnos tiempo el uno al otro,  ahora imagina con un bebé.  Aunque... Te confieso que muero por tener uno o hasta dos. - no se como responder a eso,  si es cierto que ella a tenido ciertas dificultades con Mike pero las relaciones son así,  siempre hay altas y bajas,  y no siempre se está preparado para un bebé.

Un poco preocupada por su situación le respondo lo siguiente :

- Entonces tómate un tiempo más,  habla con el,  estoy segura que lo entenderá. Dense al menos seis meses más y disfruten un poco más eso de poder dormir por las noches,  porque cuando se tiene un hijo,  no se duerme por unos años - digo con una sonrisa porque me resulta irónica la respuesta que acabo de dar,  si yo en algunos meses tendré que experimentar esas noches sin dormir. 

- Lo hablaré con el en la semana. 

- La miro con reproche,  no siempre me cuenta sus cosas,  pero a veces necesita mis consejos,  y ella desde que se casó,  adquirió la costumbre de evadir ciertos temas con Mike,  y eso no es del todo bueno.

- Habla con el desde que vayas a tu casa,  no tienes que evadir el tema. Ya te dije que aunque el quiera tener un hijo ahora mismo,  entenderá que hay que llevar las cosas a su propio ritmo y que estas brillando en tu trabajo ahora mismo.

- Eres tan tierna...  Tu siempre sabes que decir y que hacer. 

- No siempre se que hacer - aparato la mirada mientras juego con el sorbete de mi jugo.