When The Lights Turn Off

Sunshine

Juniors había sido la mejor experiencia que había tenido a su corta vida, cuando se le presentó la oportunidad de entrar a la categoría Senior, no lo dudo. Tenía 15 años, aún era joven. Su madre había decidido sentarlo en la mesa de la cocina y hablar con él.

-Tienes que tomar una decisión- murmuró- acerca de si decirles a todos tu categoría o no.

Yuzuru no había podido dormir. Él había visto como muchos de los patinadores quedaron rezagados o bien los jueces (que muchas veces estaban inclinados a los alfas y las viejas costumbres) hacían hasta lo imposible para que un Omega no pudiera llegar al podio.

Sin embargo, negar que era un omega era negarse a sí mismo. Por lo que a pesar del miedo por su carrera, él decidió dejar al descubierto su esencia y quitarse la pulsera que escondía su signo omega en las competiciones, mientras que en los entrenamientos él la mantenía consigo, era una forma de sentirse más seguro.

La primera vez que compitió en la categoría Senior fué... Horrible, su equipo lo trataba bien pero los demás competidores eran un caso aparte.

Su cuerpo se tensó la primera vez que lo escuchó.

-Ah... Eres Yuzuru ¿No? El Omega- como si formar parte de los omegas fuera algo desfavorable.

-Si lo soy- contestó tajante antes de seguir su camino.

Todos lo trataban tan delicadamente, incluso dentro de la pista hubo varios alfas que en su afán de agradarle, le hicieron sentir tan pequeño que evitaba el contacto con cualquier Alfa, menos con los de su equipo.

Al menos hasta que lo conoció a él. Estaban calificando para poder entrar al podio del Grand Prix, Yuzuru se había tomado un momento en los baños para tragar esa bola de nervios en su garganta. Al final la bola de nervios había sido expulsada por medio de un vómito nada agradable.

Se levantó y tiró de la cadena, salió y se limpió lo mejor que pudo, el reflejo en el espejo era de un joven pálido y pequeño, la inseguridad aún estaba en sus ojos. Sacudió la cabeza un par de veces, se echó agua en el rostro y respiró profundo.

La puerta del baño se abre inesperadamente, haciéndolo saltar de la sorpresa. El hombre no le hace mucho caso simplemente va al lavabo de al lado y abre la llave.

-¿Nervios de novato?- pregunta casual, no se ve que tenga malas intenciones.

-No lo llamaría así- suspira mirándose al espejo nuevamente, su inglés ligeramente marcado por su acento- sólo... Nervios.

Él hombre a su lado se ríe.

- Yuzuru ¿No?- iba tan bien piensa Hanyu esperando que señale su categoría, en cambio recibe un: - mi entrenador dice que serás una gran competencia a futuro.

- ¿A futuro? ¿Por qué no ahora?.

Su compañero se recarga contra el lavabo mirándolo.

- Bueno, sigues teniendo nervios de novato -sonríe burlón-.

-Ya veremos señor...

-Fernandez, Javier Fernández- extiende la mano y Yuzuru la estrecha.

Él no califica para sus primeros Grand Prix. Queda estancado en la copa de Rusia, no obstante, en el Cuatro continentes logra salir victorioso con una medalla de plata.

• _ _

Javier era un Alfa intimidante, los que compartían pista con él lo sabían. Era alto y tenía esa mirada que al momento de enojarse hacía que quisieras esconderte en la esquina más alejada y quedarte ahí hasta que se fuera, él había hecho uso de una pulsera como mero afán de protección y para evitar preguntas incómodas acerca de su aroma.