El bello y la bestia (Giorno x Jolyne)

No sé que me sucede

Como el proyecto empezaba a tomar forma Rohan había decido que se mudaría para no ser una molestia a un hotel. También notaron que era para no estar cerca del resto del grupo, no es que fuese demasiado discreto con eso. La misma noche que Jolyne había dado su aprobación había empezado a dar los primeros pasos con el diseño y al día siguiente tenía un montón de material que enseñar.

Habían dejado a Josuke y Okuyasu estaban al cuidado de Koichi y Yukako, por lo que le habían dado la mañana libre a Jolyne. Al día siguiente Rohan se iría al hotel, pero quería aprovechar el día para enseñarle a su nueva musa todo lo que había hecho. Se había instalado en la biblioteca, incluso al difícil Fugo le daba reparo interrumpir su trabajo.

Ese día Jolyne había dormido más de la cuenta, cuidar de su tio la había dejado agotada y no había acudido al yoga matutino, pero después de desayunar pasó prepararse para ver que le había preparado el mangaka. Tenía curiosidad, no podía negarlo, se había criado leyendo sus obras y saber que esta iba a ser para adultos hacía que no supiera que iba a encontrarse.

-Buenos días Rohan... Y Giorno -se los encontró a los dos comodamente sentados entre bocetos.

-Buenos días Jolyne, he conseguido a la otra parte -Jolyne miró a Giorno con la mirada cargada de dudas, Rohan siguió hablando- Tenemos a la hermosa cazavampiros. Necesitamos al temible vampiro.

La mujer miró al mangaka como si hubiera perdido la cabeza y sobre todo cualquier atisbo de sensibilidad. El padre de Giorno había sido un vampiro y estaba casi segura de que Rohan sensei lo sabía.

-¿Listos para conocer la trama? -ambos asintieron, entre curiosos y temerosos- Es la historia de Johana Jolenstar, una chica noble con una vida despreocupada que vive en Inglaterra -enseñó el primer boceto, era una variante de un boceto que él mismo había sacado de ella cuando tenía unos 6 años pero vestida como en la época eduardiana- Un hombre le hizo un enorme favor al padre de la niña y cuando muere, este acoge como su protegido a la edad de doce años al hijo del deudor. Ambos tienen la misma edad y aunque ella intente ser amable él intenta destruir su vida en un principio, aunque sus sentimientos van variando según crecen. En mitad de esto una misteriosa mascara sigue en la mansión, esta tiene unos poderes misteriosos. Después de que siendo ya adultos Johana descubra que el chico, Gio, estuviera intentando envenenar a su padre y verse acorralado se pone la máscara y se convierte en un vampiro, pero esto es solamente el principio...

-Es la historia de Jonathan y Dio -le cortó Jolyne- Solamente les has cambiado el nombre y el género a Jonathan.

-Como me gusta decir, señorita, no hay mejor material que la realidad. Además, me parece una forma preciosa de homenajear a tu descendiente. 

-Pero... Giorno, no puedes estar de acuerdo en esto. Joder, son tus... ¿Padres? Los dos, creo. Esto es un lio, la verdad.

-Estoy reconciliado con la idea de que mi padre era un monstruo chupasangre, si se le va a retratar con justica... -se encogió de hombros, realmente no le importaba nada Dio Brando, había aprendido a pensar en él como un mal necesario para su existencia.

-Pero... ¿por que Johana y no Jonathan? -cuestionó la chica- Si vas a contar su historia...

-Bueno, eso tiene una fácil explicación, cuando me contaron la historia tenía absolutamente claro que el tal Dio estaba obsesivamente enamorado, si es que se puede llamar así, de Jonathan y mi editor me pondría demasiadas trabas si lo hiciese con un hombre. La historia va a ser para publico adulto, va a tener escenas de marcado corte sexual...

-¡¿Tu también ves claro que Dio estaba por Jonathan?! -la confirmación por alguien más de lo que había pensado Jolyne la hizo olvidar momentáneamente de lo que estaban hablando, aunque se alegraba de no ser la única que veía que entre Dio y Speedwagon su tatarabuelo había tenido una buena cantidad de hombres a su alrededor de haberlos querido- Si el bisabuelo está de acuerdo no tengo problemas, pero... ¿Seguro que estás bien con esto, Giorno?

-No encuentro la razón para no estarlo, si de algo me sirve ser el hijo de padre en expresiones o en apariencia adelante, que sirva para algo haber sido engendrado del mal.

Jolyne lo miró con sospecha unos segundos y lo hizo mirarla directamente a los ojos, eran un poco melancólicos, pero se dio cuenta de algo. 

-Te han hablado de Dio y te han enseñado imagenes de él, pero nunca de Jonathan, ¿verdad? -la expresión de él se lo confirmó- Rohan sensei, si nos disculpa un momento, tengo algo que enseñarle.

Jolyne se levantó llevandose a Giorno con ella de la mano, casi tirando emocionada. Lo llevó directamente a su habitación sin importarle tener ropa tirada o la cama sin hacer, fue derecha al ordenador. Invitó a Giorno a sentarse en la silla del escritorio mientras ella seguía de pie, si Giorno aceptó fue porque notó que no se podía esta quieta. Fue derecha a una carpeta que ponía "Joestar" y abrió una subcarpeta (dentro había otras como "jijijoseph", "los cruzados de la abuela" o "morioh"). La primera imagen fue de una fotografía muy antigua de un señor aristocrático y un niño.

-Te presento a Jonathan Joestar, más conocido como JoJo, con unos diez años. Mira la cantidad de rizos, debes reconocer que aunque no se vea el color algo has sacado de ahí -Giorno sonrió al ver al niño con una expresión estoica que no podía ocultar del todo la gentileza, lo siguiente era un retrato, nunca lo había visto- JoJo con 12 años, mira sus ojos Giorno, son iguales que los tuyos -fue pasando imágenes y contándole todo lo que sabía de cada una de ellas, la última pertenecía a su boda con Erina Pendelton- Y ese era Jonathan Joestar, un hombre que se sacrificó por salvar a su familia y a un bebé que continuaron su linaje. Te han hablando cosas terribles de Dio Brando y estoy segura de que eran todas ciertas, pero no eres solamente fruto de él. Tienes los ojos de Jonathan, su serenidad y su aplomo, eso es pura cabezonería familiar. Giorno, Jonathan era un hombre que hacía a otros seguirle y mejorar con su presencia. Que nadie te diga que eres el heredero de un vampiro homicida, he conocido a sus otros hijos y créeme, ninguno tenía nada de eso. Quizás no eres un JoJo, pero eres GioGio, que suena casi igual. Y no quiero que pienses en ti como nada horrible, porque aunque el clan Joestar se haya convertido en un puñado de liantes, venimos todos de un buen lugar.

Las historias de su otro padre habían calado en Giorno que se encontraba francamente emocionado. Sabía la historia del cuerpo y que decían que era de un buen hombre, pero no lo había asimilado nunca como su padre. La sombra de Dio borrosa en su hombro se fue diluyendo un poco. Sin poder contenerse agarró la mano de Jolyne y la besó con gratitud.

-No sabes lo que significa para mi poder descargar un poco la sombra de ese horrible hombre de mi vida, mi farfalla.

Jolyne se separó de él ligeramente, seguía sentado en la mesa del escritorio. Ella se inclinó para abrazarlo por la espalda, pasando sus manos alrededor de su cuello.

-Estoy feliz de que te sirva. Y bueno, Dio Brando pudo hacer muchas cosas horribles, pero te trajo al mundo, osea que al menos yo por ello le doy las gracias. Oh mierda.

Se giró tan rápido que casi no le dio tiempo a Giorno a ver que era lo que había pasado, pero se lo dio. Jolyne había intentado esconder unas braguitas que había en el suelo debajo de la cama. Ambos se miraron, ella francamente sonrojada, antes de comenzar a reír. 

Bueno, si Rohan siempre ha sido un self insert de Araki que haga JoJos