La historia de Steve

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"Amor". La RAE dice (en su definición más exacta para este asunto): 'Sentimiento de afecto, inclinación y entrega a alguien o algo'

El amor nos lleva a hacer locuras . Y pese a las intenciones, a veces no es sano.
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—¡DIANA, HACETE A LA ORILLA LA PUTA QUE TE PARIO! —Cole gritó con gran desesperación, tomando el volante y haciendo un brusco movimiento.

—¡ME OLVIDÉ! ¡PERDÓN!

—¿¡POR QUÉ MIERDA ARRANCASTE SI NO SABES NI ABRIR LA PUERTA!?

—¡PORQUE VOS VENIAS CORRIENDO DESESPERADO!

—¡TENÍA MIEDITO!

—BUENO, NO ME GRITES

—ENTONCES NO SEAS PELOTUDA

—Bueno, basta, ¿lo hiciste?

Cole negó y Diana se quiso pegar un tiro.

—Lo re hice —le mostró su mochila, donde, además de tener las cosas que Diana le pidió para no dejar rastros, también poseía una bolsa de plástico con las huellas de Gilbert.

—Dios, si me gustaran los pibes te comería la boca —bromeó Diana con gran felicidad.

—¡Al fin lo admitís! —se rió Cole. Siempre la jodía diciendo que le veía bisexual vibes

—Te ilusiono nomas —le guiñó un ojo y salió del auto para cambiar de lugar. Ya se hacía tarde y los resultados de Gilbert iban a estar al día siguiente recién.

Cuando Cole subió de chofer la duda volvió a él.

—Va a salir, ¿no? —Diana asintió mirando a su amigo, observó la otra mochila que estaba en el asiento trasero y Cole entendió esa referencia.

—Última parada, allá vamos —lanzó un suspiro y arrancó de nuevo el auto, eso todavía no había acabado.

Pero no viene muy al caso en esta historia, ya después sabrán. Lo bueno es que siguen vivos.
———

Gilbert, por su parte, no pudo dormir. Necesitaba las respuestas de Diana y de las pruebas. Necesitaba saber qué pasaba en el exterior.

Lo "positivo" fue que un hombre también estaba en la misma "celda" que él, y se mantuvieron hablando un rato.

—¿Tu novia? —se sorprendió el hombre de unos cincuenta años, con apariencia desaliñada y voz gruesa— Pero si vos no matas ni a una mosca, nene. Pongo las manos en el fuego porque ella te dominaba a vos.

A la mente de Gilbert se le vinieron muchos recuerdo que provocaron una sonrisa.

—Ayyyyy tooonto —el hombre afinó la voz como burla.

Gilbert se ruborizó y se obligó a hacer a un lado esos pensamientos para cambiarlos por otros.

—El año pasado me avisaron que iba a ser escolta de la bandera Argentina en la escuela —contó jugando con aquella pulsera naranja, y el hombre que se hacía llamar Steve no entendió—. Mi novia me ganó en promedio. Ella tiene 9,98 y yo 9,95. Siempre estuvo adelante de mí en todo y eso me vuelve loco. ¿Sabes algo? A veces teníamos mucha tarea y no podíamos vernos, así que nos juntábamos a estudiar, así teníamos aunque sea un poco de contacto. Y yo la veía mientras ella escribía los resúmenes y no paraba de pensar en lo hermosa que es, posta. Es tan hermosa que no me canso de verla, tanto que todavía cierro los ojos para acordarme de su cara, lo que es graciosos porque todo el tiempo tengo su cara en mi mente. Y no te preocupa que sea más inteligente que vos, porque sabes que lo es...

DESAPARECIDA; SHIRBERT (completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora