Libro 1 - Los Elementales - ♨El reino secreto❄

Capítulo 13

Ya casi amanecía y yo no había podido pegar un ojo en toda la noche.  Se oían horribles rugidos y siempre sentía que algo me observaba, había levantado muros de hielo, no muy altos pero me mantenían segura de lo que fuese que estuviese fuera, ya solo me quedaba un día para que el guerrero de fuego viniese a ayudarme.  

En ese momento solo podía pensar en Marcus ¿Qué pensará él de mi al darse cuenta de qué lo deje? No sabía si seria capaz de seguirme o simplemente abandonarme, aunque deseaba con todo el corazón que no se diera por vencido, que realmente lograra la forma de cruzar por el portal, yo lo estaba esperando.

***Marcus***

Abrí los ojos con dudas, no quería aun levantarme. 

¿Qué hora es? 

- Diablos las 9:15 am.  Alka me matara si llego tarde a su casa.

Me levante y vestí, tome algo de ropa y baje, debía despedirme de las monjas, después de todo no sabía si volvería.

- Por favor cuídate, los aviones en ocasiones fallan, por favor se prudente, oraremos por ti - Me dijo Carmen, abrazándome y besando mi mejilla. 

Carmen era la monja con la que mas había congeniado, ella me crió prácticamente.

Les había dicho que viajaría en avión hacia España, que allí habían pistas de mis padres, que allí los buscaría.  Una mentira piadosa no hacia daño, después de todo lo hacia para no preocuparlas demasiado.

Alka era una chica algo obstinada pero su pasión por saber la verdad me encantaba, ella era diferente, pero no solo por ser elemental, realmente había algo hermoso y especial en ella, no podía evitar no hipnotizarme  al oírla hablar.

- Pero no estoy enamorado, eso creo, no jajaja, eso no podría pasar ¿O si? de igual modo ella no me haría caso < mejor sigo caminando> - Pensaba mientras me dirigía a su casa.

Al llegar a su casa estaba algo nervioso, no solo por verla sino por la aventura que nos estaba aguardando. 

Toque a la puerta y me pare derecho con las manos hacia atrás, era extraño pero quería causar una buena impresión.

- Si ¿A quién buscas? - Preguntó el padre adoptivo de Alka, Forto creo haber oído. 

- Hola señor, busco a Alka, soy su compañero de curso.    

El entrecerró los ojos y miro hacia las escaleras.

- Ahora que lo mencionas, creo que aun no se a levantado, eso es muy extraño, pasa y espera aquí - Dijo mientras subía las escaleras con cierto miedo.

Luego de unos minutos bajo desesperado e inquieto.

- ¡No esta! - Dijo a penas con algo de voz.

- ¡¿Qué?! - Respondí igual de sorprendido.

Un silencio desgarrador nos invadió a ambos, estábamos preocupados, de eso estaba seguro ¿Dónde rayos se había metió? 

En ese momento Forto pareció saber donde estaba, salio corriendo y yo mas atrás lo seguía.

- ¿Qué sucede, sabe dónde esta? - Pregunté desesperado. 

El no me respondía.  Entro a una enorme biblioteca y corrió al centro, yo solo lo podía observar.  Había un hermoso libro dorado en el centro, él levanto el cristal y tomo el libro, lo observaba con deleite, miedo y ansias, todo al mismo tiempo. 

- ¿Me va a decir qué sucede? - Pregunte algo molesto, quería saber donde estaba ella. 

Forto me observo y puso el libro a un lado.

- Márchate, esto se ha salido de todo tu entendimiento - Me ordenó.

- Explíqueme, necesito saber - Insistí.

- Esto no pertenece a tu mundo - Me replicó. 

En ese momento entendí, el no sabe que soy un elemental.  Bueno se lo haría saber.

Camine unos pasos hacia atrás y comencé una ventisca helada en la biblioteca, Forto se petrifico y observo las paredes que se congelaban poco a poco, luego giro para verme a los ojos.  Su mirada era de sorpresa y sus ojos no parecían tener un objetivo, iban y venían a todos lados, estaba realmente nervioso y confundido. 

Luego de eso me permitió acercarme y continuo con lo que hacia.  Tomo un frasco pequeño con liquido dentro, era de color rojo intenso ¿Era sangre? 

Tomo con extrema delicadeza el pequeño frasco y vertió una gota muy precisa sobre la portada del libro.  De repente grabados dorados y una luz tenue emergían del hermoso libro. 

- ¿Qué es este libro? - Pregunte totalmente admirado. 

Forto me miro con una expresion fría y continuo.

Abrió el libro y salto a una página especifica, y comenzó a leer.  Intentaba ver algo pero no alcanzaba a leer, Forto estaba casi encima del libro. 

Se enderezo de un brinco y parecía haber encontrado lo que necesitaba. 

- Pudo cambiar su destino ¿Cómo lo hizo? Esto no es posible - Dijo poniendo sus manos sobre una mesa.

Ahora si necesitaba una explicación.

- Ahora dígame usted ¿Qué rayos ocurre? -Le exigí enfurecido. 

El me miro algo incomodo, pero sabia que debía explicarme que sucedía. 

- ¿Ves ésto? Es un libro que escribe la vida de la persona para el que fue creado, en este caso Alka.  Pero leí algo que antes no estaba ahí - Me respondió por fin.

Estaba realmente sorprendido y confundido ¿Por qué Alka tiene un libro así? ¿Qué significa todo esto?

- ¿Y eso qué quiere decir? - Pregunte.

Forto guardo silencio unos segundos antes de decirlo, para él era algo importante, eso se percibía.

- Eso quiere decir que ella es capaz de cambiar su destino, ella puede escribirlo, puede cambiar lo que este libro maldito a escrito por ella, debemos encontrarla - Dijo muy entusiasmado.

- ¿Sabe a dónde fue? - Pregunte.

- Telca - Respondió con expresión indescifrable. 

Estaba algo confundido, no lo creía, se fue sin mi ¿Ya lo tenía planeado? ¿a caso jugo conmigo? Estaba decepcionado.   Quería entender así que sin preguntar abrí el libro y busque en sus páginas. 

- ¡Hey! ¡Hey! ¡¿Qué crees qué haces niño?! - Dijo empujándome lejos del libro. 

Yo estaba muy enojado, o tal vez me sentía abandonado de nuevo.  Mis padres me dejaron y ahora ella, yo confié en ella ¿Qué rayos es esto que cae de mis ojos? Yo no lloro, cálmate, me decía una y otra vez.  ¡Deja de llorar idiota! 

- ¿Qué tienes? ¿Hay algo qué necesite saber? - Preguntó acercándose con prudencia. 

- Ella no debió irse sin mi ¿Entiende? Era algo que planeamos los dos - Le dije sin verlo a los ojos. 

El puso sus manos sobre su cabeza, pero no parecía enojado, solo algo impotente. 

- Bien, vamos a buscarla, puedes venir conmigo, solo necesito que estés de mi lado ¿Ok? - Preguntó dejándome estupefacto. 

Ahora todos los planes que había hecho habían tomado un giro inesperado, el primero era que ya no seria Alka la que me acompañara, la segunda era que iría con Forto, el mismo Guardián en persona.  

Forto comenzó a revolver la biblioteca en busca de algo.  Subía y bajaba las escaleras y yo estaba sentado a un lado tratando de entender.  Tanto me importaba ella para que en este momento este desgarrado de esta manera, yo no era así, era un tipo frío y sin compromisos, no sentía dolor, y nadie podía lastimarme, ahora tengo que volver a levantar mis muros de hielo, no permitiré que vuelvan a abandonarme.