¿Dónde están tus bellos cabellos?
Están envueltos en el abrigo de la noche,
Tu corazón quisiera llenar de lo que es bueno,
Pero tú ímpetu y desenfreno no te dejan escucharme,
Alabo tu belleza muy adentro dónde es debido;
Porque tu corazón lleno de capricho se ha convertido,
Estoy mirándote y no reconozco;
El camino qué debo seguir para salvarte,
Necesito más paz y más aliento de vida,
Necesito tener de tus problemas la salida,
Pero nada más que tristezas te provocas y ahondas en problemas,
Ahora entiendo entre pesares lo que es amar y querer proteger a alguien,
De la forma más inútil en la que sin importar lo que diga,
Tus oídos cierras dejando así la verdad escondida,
Te molestan y te irritan mis consejos llenos de sabiduría de un viejo;
Que aprendió rápido y se añejo pronto en lacrimosa,
La belleza que te cubre te aprisiona y delata la fragilidad que se guarda en lo profundo de tu alma,
Hoy y siempre cuando no quieras escucharme,
Debes saber que con total desapego daría sin dudarlo mil veces mi vida si con ello te bastará,
Guárdate y ten calma;
Porque las aguas bravas a atraparte aguardan.
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Diálogos nocturnos que hago llamar poemas [Nuevos capítulos]
Poesía∞ Poemas, monólogos, prosa sombría y pensamientos existenciales ∞