Hugo y Eva aún no lo sabían pero estaban viviendo su última semana juntos antes de que la pandemia mundial estallase en sus propias narices.
El repaso de gala del 8 de marzo es devastador. Como todos los repasos de gala, pero cada vez hay menos hombros sobre los que apoyarse.
Por suerte para Eva, los hombros de su persona favorita en esa academia seguían allí. Aunque no sabía por cuanto tiempo, y eso le daba vértigo y miedo. Pero el cordobés parecía tranquilo.
-¿Estás bien?- Le preguntaba por decima vez esa noche Eva. El chico suspira y se revuelve entre las sabanas de Eva. Tras el chat se encuentra extremadamente cansado.
-Sí.- Admite Hugo. La chica emite un ruido de no demasiada conformidad. Empieza a estar cansada de la hierática postura de Hugo frente a todas y cada una de las adversidades. Como si no enfrentarse a ellas fuese a esfumarlas por arte da magia o como si asumirlas fuese a convertirle en objetos de miradas de pena y compasión.
La morena lo mira una última vez y se da media vuelta en la cama para quedar de espaldas a él. Está claro que no va a sacarle ninguna confesión esa noche. La morena siente como un cuerpo se acomoda a su lado y unos dedos le rozan la cintura amenazando con rodearla pero que se arrepienten en el último momento.
-No he elegido aún la canción que voy a cantar en la próxima gala.- Confiesa el chico.
Eva se gira para quedar de cara a él que está tumbado a su lado con los ojos aún muy abiertos.
-¿Qué opciones tienes en mente?- Pregunta la gallega.
El chico se rasca la barbilla pensativo.
-He pensado en algo con la guitarra. "Nadie" de Pol Granch a lo mejor.- Exterioriza Hugo.- Por cambiar y eso...-
Eva siente la indecisión en su voz.
-¿Y la otra opción?- Pregunta ella.
Hugo lo sopesa un par de segundos antes de volver a hablar.
-Heroes de Mans Zelmerlow.- Confiesa él. Eva se ríe ante la desastrosa pronunciación del apellido del cantante sueco.- ¿Sabes cuál te digo?- Pregunta Hugo por si ella no le ha entendido.
-Sí.- Asiente Eva.
-¿Y qué copinas?- Pregunta curioso.
-No sé...Cántame un trozo.- Pide ella.
-¿Ahora?- Pregunta Hugo levantando la cabeza para comprobar si sus amigos ya duermen.
-En bajito.- Aclara ella.
El chico obedece y canta los estribillos de ambas canciones.
-La segunda.- Dictamina Eva.
-¿Heroes?-
-Sí.-
-Pero ese estilo ya canté en Genius.- Dice él.
- Por eso mismo, ¿Y cómo te salió?- Pregunta sin esperar respuesta por parte de el chico.- Eso es lo tuyo cuando te subes al escenario, el show.- Apunta la gallega.- Ya tendrás oportunidad de tocar con la guitarra y que te vean en otra ocasión, pero montar un pedazo de espectáculo...-
-Para irme por la puerta grande. No está mal.- Sopesa Hugo la opción.
-Tú no te vas a ir por ninguna puerta que no sea por la de esta habitación para ir a Cesc.- Señala ella.
-Eva...-
-Ya. Tú no quieres hacerte ilusiones. No te las hagas, me parece bien. Pero déjame que yo sí me las haga.- Pide ella.
