Príncipe Vampiro

𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 13

Veronica

—No vayas tan rápido — Digo mientras estaba en la silla de ruedas que Drake estaba empujando por el pasillo del hospital.

—Tranquila, mesera no te voy a matar.

—Pues si parece eso.

—Que dramática eres.

—Y tú eres un loco tras la silla de ruedas.

Él soltó una pequeña risa tras escucharme al parecer le causaba gracia que yo estuviera preocupada por que Drake no me estrellara contra la pared del hospital.

Él me llevo hasta la puerta principal del hospital ya que su auto se encontraba justo en la entrada.

Drake abrió la puerta del asiento del copiloto, reclinó el asiento, se acercó a mí, me cargo entre sus brazos y con mucho cuidado me subió a su auto.

Cerró la puerta, rodeo el auto, subió, lo enciende y después arranca.

—Esa noche en la iglesia negra, cuando tú hermano me secuestró llegaste con una chica.

—A si, ella era mí hermana menor Sophie.

—Ella me curo esa noche ya que también me había fracturado la espalda, ¿Crees que le puedas decir que me pueda curar de nuevo?

—No creo, no nos convendría que Sophie te cure como esa noche.

—¿Por que?

—Por que sospecharían que algo raro paso, piénsalo un poco te dijeron que tardarías tres semanas en recuperarte y de la nada te ven en la calle normal, ¿Que pensarían tus tíos?

—Ahora que lo dices tienes razón.

—Será mejor que pases los días de recuperación tranquila Veronica.

—Bien.

Él siguió conduciendo por unos minutos hasta que finalmente llegamos a mí casa.

Él estaciono el auto afuera de la casa de mis tíos, bajo del auto, lo rodeo, abrió mí puerta, me cargo nuevamente entre sus brazos y camino hacia la puerta de la casa.

Él abrió la puerta cómo pudo, entro a la casa, se acercó a las escaleras, las subió hasta llegar a la puerta de mí habitación, entramos y me recostó cuidadosamente sobre la cama.

—Llegamos — Dice él.

—Muchas gracias, por haberme traído a casa — Lo veo y sonrió.

—No me des las gracias, mesera.

—Bueno supongo que tú tendrás cosas que hacer, tendrás mucho trabajo como príncipe heredero de los vampiros.

—Si, tengo mucho que hacer, el príncipe heredero nunca descansa pero...— Se acerca a la silla que estaba frente a mí pequeño escritorio, la toma y se sienta —.Eso ahora no me importa.

—¿Que?, ¿Por que?

—Por que no te puedes quedar sola — Me mira —.Me quedaré contigo hasta que tus tíos regresen así que seré oficialmente tú niñera.

—No es necesario de verdad, te puedes ir yo estaré bien.

—Ya dije que me voy a quedar, así que no me moveré de aquí.

Al ver que no tenía intensión alguna de irse no dije nada más.

¿Por que hace esto?

—Bueno ya que vas a estar aquí responde una pregunta.