Recuerdos de un alma atribulada (IV)

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--- Sábado por la tarde 6:45 PM ---

28 de septiembre

Kara pasó los dedos por el dobladillo de su vestido marfil, revoloteando entre las costuras que apenas se notaban a simple vista. No podría estar más feliz con el diseño, pero mientras el reloj continuaba la cuenta atrás, sintió una ansiedad que se elevó dentro de ella.

"¿Seguramente no nerviosismo?" una voz de tenor se elevó detrás de ella cuando escuchó la puerta del camerino abrirse y cerrarse.

Ella miró hacia arriba para ver a un hombre alto con un traje de sastre delgado, poniéndose un par de zapatos de cuero fino que estaban pulidos a la perfección. Su agudo sentido de la ropa se correlacionó con su capacidad para servir a los demás como uno de los mejores estilistas personales de la industria.

Giorgio Márquez fue un regalo del cielo si no hubiera visto uno. Vino con un gran respeto por parte de la Sra. Grant y eso por sí solo fue lo suficientemente impresionante. Kara estaba inicialmente preocupada por su asignación, pero no podría estar más agradecida de que Giorgio la ayudara en cada paso del camino.

"Hola Giorgio", saludó al hombre mientras tomaba asiento frente a ella. "¿No es normal estar nervioso?"

"De ningún modo." Él respondió. “Este va a ser un momento decisivo en tu vida. Estar nervioso es solo una parte ".

Kara asintió. No la alivió tanto como le hubiera gustado, pero tomaría cualquier consejo en este momento. Volvió a jugar con los bordes de su vestido.

"¿Algo mal?"

"¿Crees que esto es demasiado?" Ella respondió señalando el encaje transparente que cubría su abdomen.

El hombre la miró claramente durante unos segundos antes de ladrar en voz alta de risa. “Si hubiera pensado que ese vestido no te quedaba bien, no lo habría sugerido en primer lugar. Te ves increíble." Su abrumadora confianza en sus habilidades se transfirió rápidamente a ella.

Entonces hubo un golpe rápido en la puerta, una señal de que todo estaba listo.

"¿Estás listo?"

Ella se quedó temporalmente sin palabras y solo asintió mientras se levantaba de su asiento.

“Oh, nada de eso. ¿Estás listo? Vamos, dame una gran sonrisa ”, instó el estilista con su naturaleza enérgica rozando lo contagioso.

Y ella lo hizo.

"Perfecto. Derribemos a todos de sus asientos, ¿de acuerdo?

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Con la novia finalmente lista, todo lo que se necesitaba era que los miembros de la procesión esperaran a que comenzara la música.

Kara salió del camerino y vio a los miembros de la línea de procesión ansiosos por ir, aquellos de los cuales estallaron en una ráfaga de conversación suave y algunos incluso brindaron cumplidos cordiales al ver a la novia con su vestido por primera vez. Vio a Lena y Sam a un lado, saludándolos rápidamente con la promesa de buscarlos después de la ceremonia.

Se dirigió hacia la parte de atrás donde encontró a J'onn esperándola.

"Te ves hermosa Kara", comentó el hombre mientras su mirada se posaba en ella.

"Usted se ve muy elegante", respondió ella. El hombre vestido se estremeció avergonzado por el elogio. "Gracias de nuevo por hacer esto", Kara extendió sus manos hacia el pasillo indicando que quería decir que él aceptaba acompañarla por el pasillo.

Todo está (no) bienDonde viven las historias. Descúbrelo ahora