I love you ~ɴᴏᴍɪɴ~

Jisung

Una vez dentro de la casa se quito los zapatos y se puso sus pantuflas.

-Incluso te viene a dejar a tu casa...pff y dices que no te gusta- hablo Jisung desde el sillon. En el cual comia palomitas mientras veia la tele.

-No molestes Zhong Ji Sung- le puso un toque sarcástico a su comentario, dicho esto, se metió a su cuarto disponiéndose a bañarse.

Dejo su mochila en la cama, saco el delantal de esta y lo puso en la lavadora. Tomo una pijama de sus cajones y se metió a bañarse.

-¿Qué me hisiste?- susurro para si mismo. Cada vez que pensaba en Jeno, sentia escalofríos y cosquillitas es su estómago.

Solo olvidó un poco el tema de su estómago y termino de bañarse.

Al salir colgó su delantal y esta vez lavó un poco sus tenis, ya que estos tenia tierra del parque.

La verdad es no tenía sueño, aun que fuese casi media noche, no lo tenía.

Para matar un poco el tiempo, hasta que le diera sueño. Decidió ver un poco la tele.

Toda vía estaba Jisung en la sala.

-¿Qué vez?- se sento a un lado tomando un poco de palomitas.

-Una tonta película de amor-

-¿Por qué?- a Jae le dió curiosidad el por qué veia esa película, a Sung nunca le gustaron las tramas con romance.

-No lo sé, no encontré nada para ver- se levantó del sillon para ver si aún quedaba helado en el refrigerador. Así que se llevó el poco helado que quedaba.

-¿Te lo acabaste?- señalo el bote. Jae asintió sin dejar de ver la tele.

Estuvieron un rato viendo la película, hasta que escucho unos sollosos y fuerte respiración a su lado. Su hermano menor estaba llorando.

-Aww Jisungie, ¿Por que estas llorando?- lo abrazaba mientras este escondía su rostro en su pecho.

-No lo sé, ¿por que estoy llorando?- esa cuestión le dió un poco de risa a Jae.

-¿Por que yo lo tengo que saber?-

Así se pasaron un rato en silencio, Nana abrazando a su hermano mientras este trataba dr calmarse.

-Hyung....

-Dime pollito- acariciaba su cabello.

-¿Es malo que te guste alguien?-

-Claro que no-

- Y si esa persona confía en ti como amigo-

-Sigue sin ser malo-

-Pero yo no quiero- esta vez lloro más.

Nana solo le sonrió con cariño.

-Tu no vas a escojer de quien gustas o no, no tiene nada de malo que sea mujer, hombre, amigo, enemigo o incluso un vagabundo- esto último lo tomo con un poco de humor.

-Me gusta Chenle- lo miró a los ojos con algo de angustia, preocupación pero a la vez con amor, muchos sentimientos.

-Ya lo sabía, tu me lo dijiste-

-Pero esta vez es diferente, no es como otras veces que simulo estar coqueteando con alguien, o que el me gusta, esto no lo sé, es nuevo- ahora solo estaba abrazando de su hermano y el recargado sobre su pecho - soy un asco cuando verdaderamente me gusta alguien y es muy diferente a otras veces en las que alguien se me hace atractivo-

-Mi bebé sigue siendo un niño- esto llegó a modo de ternura- aigoo sigues siendo mi bebé- esta vez lo abrazó más.

-Hyung, no quiero-

-¿Por qué?-

-Lele nunca se va a fijar en mi, por dios, es un multimillonario, bailarín y el mejor cantante y pianista que he conocido, tiene una sonrisa hermosa y adorable, la piel lechosa que tiene, junto a su adorable voz, a todos tiene a sus pies, yo solo bailó y eso es todo, no tengo dinero, no tengo buena voz, mucho menos encantos para agradarle a las personas-

-No tiene nada que ver eso, aunque no lo creas, puedes gustarle a Chenle, solo trata de coquetearle-

-¿Como?-

-Vamos, el gran Na Ji Sung le esta pidiendo consejos de coquetear a un soltero vírgen-

-Es solo que no sé que hacer, es que, de verdad me gusta, nadie me ha gustado en la vida, menos he tenido una pareja-

-Solo tratalo como le gusta a el, debes conocerlo, salir a pasear, un helado, invitalo a ver películas, solo tratalo como te gusta tratarlo, hazle saber que te tiene loco-

-¿Parque de diversiones? A el le gustan mucho, solo que a mi no-

-Claro, de hecho, intenta subirte a algunos con el, pero creo que no te dejan estar en los de bebés- rio Na, sabe que a Jisung no le gusta la adrenalina, de chico tenian que ir (junto con Jaehyun), todo el día a la sección de niños, por que a su hermanito no le gustaba la adrenalina.

-Okey, tratare-

Siguieron viendo la película otro rato.

-¿Puedo traerlo a la casa?-

-Solo si tu recojes el desastre-