Tiffany Hwang (pv.1)

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No sabía porque estaba inmóvil, en estos últimos años ya no sabía como expresarme bien, sentía que cada vez era más difícil hacerlo, no quería demostrar debilidad, debía ser fuerte por mi familia, después de todo era la cabeza de esta casa.

No me merezco a taeyeon, la e lastimado y lo volví a hacer después de que le pedí una oportunidad, jamás pensé que mi madre le pediría hablar, no se que exactamente le va a decir pero me siento por alguna razón nerviosa y no quiero pensar que mi madre querrá que me vaya con ella, es por eso que no le conté nada aún sobre ella, no por alguna otra razón, simplemente no quería que mi madre tratara de correrme con ella fuera del pueblo, se que se esta dejando, lo puedo notar y no me gusta, no quiero perderla.

Me pude mover por fin, me senté en la cama y luego miré hacia la puerta, solo podía escuchar unos susurros, supongo que aún hablaban, quería saber que decían pero no debía, iba a hablar con mi madre pronto y la enfrentaría sobre el tema.

-cariño me acompañas al cuarto- por alguna razón había perdido la noción del tiempo y de un momento a otro vi a mi madre en el pasillo fuera de mi puerta.

-y taeyeon?- miré a mi madre expectante, si no venía con ella era obvio que se había ido, pero necesitaba confirmarlo.

-ella se marcho- solté un suspiro suave y me levanté de la cama.

-entiendo- no puedo verme débil ante mi madre.

Me acerqué a ella y le tomé del brazo en silencio, caminé a su paso junto a ella, llegamos a su cuarto y le ayudé a recostarse, pensaba dejarla e irme a mi cuarto para lamentarme en mi Soledad pero me tomó de la muñeca deteniendome.

-cariño, ella es buena muchacha, no la dejes ir- apreté la mandíbula, sabía muy bien a donde iba todo.

-madre, no piense que no se a que quiere llegar con todo esto, no me correrá con taeyeon- ella me soltó la muñeca y solo me miró.

-que te hace pensar que quiero algo así?- antes ella era radiante, le encantaba cocinar, se movía y caminaba por todas partes, cuando me fui y el cáncer vino todo se derrumbó, para mi y sobre todo para ella, ahora mismo se veía cansada, era peor que la primera vez, podía notar que se había rendido y no estaba dispuesta a aceptarlo.

-la conozco, se muy bien cual es su pensamiento ahora mismo, pero no va a pasar, si tengo que dejar ir a taeyeon para quedarme lo haré- se que será duro, me gusta taeyeon como nadie me había gustado jamás, es grandiosa, pero no es de mi mundo, ella esta mucho más arriba y esta familia es mi carga.

-no lo hagas, no sigas perdiendo más por mi, en algún momento me iré para siempre- la miré con tristeza, como podía decir algo así, podía salvarse, tenía muchas más posibilidades de hacerlo, pero prefería no hacerlo por mi y por seohyun, pero no veía lo mucho que íbamos a perder nosotras dos.

-pero no ahora, eso será en muchos años más, no voy a dejar que se rinda, ya tengo mucho ahorrado, podemos hacer la operación y no importa si esta ves debo tomar algún crédito, no importa si me lleva toda la vida pagar, voy a hacer que viva muchos años más- tenía unas inmensas ganas de llorar, mi corazón se sentía apretado, no quería perder a taeyeon ni a mamá pero si debía elegir obviamente estaba claro.

Me alejé unos pasos y me giré para salir del cuarto.

-cariño- me mordí el labio al escuchar como me llamaba-Tiffany- solté un suspiro, me sentía ahogada -Tiffany hwang ven aquí- seguí avanzando y vi aparecer a seohyun algo sorprendida.

En la Pobreza Y En La Riqueza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora