El principio de una decisión

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La mayor parte de la gente cree que el éxito lo es todo, pero están equivocados, hay un momento en que uno llega a cumplir su meta y cuando eso pasa si no tienes a alguien a tu lado con quien compartir tu éxito te preguntas de que sirve?. Lo logré todo en mi carrera, tengo una empresa de la que soy presidenta con tan solo 32 años, pero un vacío en mi interior me dice que algo me falta.

-taeyeon, tae, estás bien?- al oír esa voz dejé de mirar por el ventanal de mi oficina y me giré para darle frente a la persona que me llamaba.

-solo estaba distraída Yuri, necesitas algo?- mi mejor amiga y vicepresidenta de mi empresa esta de pie frente a mi escritorio.

-debemos revisar los balances del mes, te estuve hablando por un rato pero al parecer no me escuchabas- ella es bonita, morena, alta y de buen cuerpo, a veces me pregunto porque aún no se han enamorado de ella o al revés?.

-yuri te has enamorado alguna vez?- miré con intriga a mi amiga mientras me acercaba más a ella, me vio con sorpresa y luego su rostro cambió a uno más pensativo.

-Realmente algo te pasa- yuri es mi amiga desde el colegio, tenemos la misma edad, seguimos hasta la misma universidad pero ella se especializó en contabilidad, en cambio yo en administración.

-puedes responderme?- me apoyé en el escritorio mientras ella tomaba un respiro para contestar.

-mmmmm creo que si, bueno me gustaba alguien, lo recuerdas? En el colegio- la miré con duda pero si lo recordaba, aunque nunca se vio importante.

-si, ahora lo recuerdo, pero no sientes esa necesidad de tener a alguien ahora mismo?- la miré atenta, yuri era más seria en ese aspecto, aunque tenía a sus mujeres como le decía yo, era sin un compromiso, solo era habituales cuando ella quería.

-no me hace falta tal cosa, puedo estar con la chica que quiera en el momento que quiera, eso no es un problema y tampoco lo sería para ti si tan solo te dieras la oportunidad- me giré para mirar por el ventanal, tenía razón, un montón de chicas se acercaban a mi cada que salíamos, yuri igual me presentaba a algunas, pero eso no era muy lo mío, le tenía un mayor respeto a ese tipo de cosas.

-bueno ya sabes que mis padres eran súper conservadores y aunque e estado con un par de chicas por solo una noche no e sentido nada en absoluto- mis padres me habían dado una educación muy recta y ellos querían que me casara y todo eso, ahora que ya no estaban eso había cambiado pero lo que me inculcaron seguía estando ahí.

-no debes sentir nada, es solo un acoston- me cruce de brazos resoplando, al parecer yuri no podría entenderme.

-lo , pero siento un vacío yuri y creo saber el porqué. Extraño tener a mis padres, para bien o para mal, no tengo una familia y jamás me e enamorado- me giré para mirar a mi amiga, se veía seria pero con duda también.

-estas deprimida? Te va a bajar la menstruación o que?- a veces pensaba que yuri era un hombre, se comporta como un semental.

-idiota, es enserio, tu solo vas por ahí teniendo acostones, pero yo buscó algo más- la miré con seriedad y ella resopló.

-no pienses que no te entiendo, solo que no pienso en el amor, solo vivo mi día a día- y yo también lo hacía hasta que logre todo lo que quería, a veces uno de joven se pone una meta y cuando la logra ya se ve con las manos vacías, es lo que me pasa ahora mismo, la rutina de trabajar y ya.

En la Pobreza Y En La Riqueza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora