En la Pobreza Y En La Riqueza

Tiffany Hwang (pv.5)

Cuando llegué al estacionamiento seguí la línea hasta donde estaban los carros de taeyeon, no creo que lo haya dejado tan lejos, lo más probable es que este al lado de los suyos.

Me detuve apenas a unos pasos, había un carro rosa con una gran cinta, tomé la llave de mi bolsillo nerviosa y apreté el botón de en medio del llavero, cuando sonó y prendió las luces mi boca se abrió inmensa, no podía ser, como supo que quería uno de ese color y sobre todo siempre había soñado en tener un carro como el de la Barbie, era hermoso. Seguí caminando y cuando llegué al lado mis ojos se llenaron de lágrimas, no sabía que había hecho para merecer a taeyeon, ella era una gran persona.

-wuahuuu es más que genial en persona- escuché a seohyun casi gritar de la emoción y sonreí, quité la cinta con cuidado, abrí el maletero y la dejé ahí, no sabía que más hacer con ella.

-es muy bonito- miré a hyoyeon quien era un poco tímida, cuando la conocí me pareció una niña muy tierna, aveces hasta me hacía recordar a taeyeon.

Abrí la puerta del carro y me subí, esperé que las pequeñas hicieran lo mismo, antes de prenderlo comencé a mirar los botones y cada cosa que tenía.

-es este- vi como seohyun apretaba un botón y la parte de arriba del carro comenzaba a abrirse, era un descapotable pero no como el de taeyeon, el de ella era largo y elegante, este era como un mini descapotable.

-como es que lo sabías?- miré a mi hermana y ella comenzó a jugar con sus dedos.

-lo siento, taeyeon me pidió ayuda para comprarlo, le dije que siempre habías querido uno así y ella lo encontró para ti- solté un suspiro, lo habían planeado desde hace un tiempo entonces.

-esta bien seo, solo no quiero que taeyeon gaste tanto dinero en nosotras, así que no le ayudes cuando vuelva a pasar, dile que no podemos aceptarlo- ella solo me asintió y yo solté un suspiro, no quería que pensaran que nos estábamos aprovechando de ella.

-lo sé y se lo dije, pero ella no me hizo caso, así que no me quedo más que ayudarle- si claro, que conveniente.

-ponte el cinturón- esperé a que mi hermana estuviera asegurada antes de poner la llave y arrancar el carro, había mirado hacia atrás y hyoyeon estaba lista con su cinturón también.

Como se lo dije a taeyeon, el manejar no se olvida. Salí del estacionamiento con cuidado, era un carro muy liviano. Cuando tenía 21 años tuve que sacar una licencia de conducir para poder trabajar repartiendo pasteles, fue uno de tantos trabajos que tuve para poder ganarme la vida.

Conocía una heladería cerca en el centro, conduje al lugar con cuidado, había una rica brisa, seohyun puso un poco de música en el camino, al parecer estaba más feliz que yo.

Llegamos a la heladería y seohyun junto a hyoyeon pidieron un helado de chocolate, mientras que yo pedí uno de fresas. Ellas no quisieron volver enseguida, lo acepté porque no quería que me dejaran el carro todo manchado de chocolate.

-vamos a ese pequeño parque- miré donde señalaba seohyun y asentí.

-vamos ahí, le enviaré un mensaje a taeyeon para avisarle que no llegaremos enseguida- ellas corrieron y yo caminé con calma sin quitarle los ojos de encima.

Las tres nos sentamos en una banca y yo busqué el móvil para sacar una foto al helado y enviarle un mensaje junto a taeyeon.

*cariño comeremos el helado en un parque de junto a la heladería, tardaremos un poco en llegar* le envié el mensaje junto a la foto y comencé a comer mi helado.