El Reto De Amarte • Caché [Terminada]

13. Mi Persona Favorita

Terminé de bañarme y procedí a secar mi cabello, me dirigí a la habitación y Poché no estaba ahí, me asomé por el pasillo que daba hacia la sala y ahí estaba, concentrada en su laptop con los audífonos puestos editando las fotos. Aún con la toalla alrededor del cuerpo caminé hacia el sillón donde estaba Poché, que para mí suerte me daba la espalda.

Al llegar toque sus hombros haciendo que se sobresaltara un poco, hizo su cabeza hacia atrás y deje un corto beso en sus labios; quite sus audífonos y comencé a dar un pequeño masaje en sus hombros.

- Estás muy tensa, deberías relajarte -dije muy cerca de su oído.

Caminé hasta quedar frente a ella y quite la laptop de sus piernas para así poder sentarme yo; me coloqué a ahorcadas pasando mis manos por su cuello, mientras que las suyas se posicionaban en mi cintura atrayéndome más a su cuerpo.

Comencé a dejar besos y algunas moridas por su cuello, de su boca salían pequeños jadeos. Sus manos jugaban con el borde de la toalla que cubría hasta la mitad de mis muslos.

Detuve los besos para mirarla, sus ojos aceitunados estaban dilatos. Mis manos se fueron hacia el borde de su blusa y comencé a levantarla hasta quitarla por completo.

Me separe un poco de ella, para así comenzar a bajar la cremallera de su pantalón, me bajo de su regazo para poder quitarse por completo el pantalón. Al hacerlo, ahora ella quedó a ahorcadas sobre mi y busco con necesidad mis labios. Sus manos viajaron de mi cuello hasta la toalla para quitar está de un jalón y quedar expuesta ante ella.

-Eso estorbaba- dijo con voz ronca.

- Esto también- logré articular entre jadeos y mis manos fueron hacia el broche de su sostén, quitándolo, dejándola expuesta por la parte de arriba. Sus labios fueron hacia mi cuello mientras mis manos jugaban con sus pezones ya erectos.

Bajo de mi regazo para arrodillarse frente a mi y dirigir sus labios hacia mis muslos, muy cerca de mi centro.
En ese momento me sentía pérdida en el deseo y en la excitación. Volví a la realidad cuando sentí sus labios sobre mi centro. La tomé por los hombros y la empujeé haciendo que quedara sentada sobre la alfombra de la sala. Me miró confusa, sonreí de lado.

- Esta vez yo tendré el control, tú sólo disfruta - dije mientras bajaba su pantalón junto a sus bragas.

Me coloque sobre ella y comencé un camino de besos lentos y húmedos por su cuello hasta llegar al valle de sus pechos, donde besé y jugué con ellos; seguí bajando hasta su monte de venus, donde ahí mi lengua se unió y los movimientos fueron lentos. Llegué a su centro, notando la gran humedad que en este había, con dos dedos comencé a masajear su clítoris, mientras pequeños jadeos salían de su boca.

- Te necesito ya - ordenó y sin previo aviso introduje dos dedos fácilmente, primero embestidas lentas que de apoco aumentaban.

Movía mis dedos en un vaivén con frenesí, mi mirada no se aparta ni por un segundo de la suya, amaba sus gestos, la forma en la que curvea su boca en una perfecta "o" con cada embestida, la forma en que con sus ojos llenos de deseo y amor me examinaban sobre su cuerpo y los sonidos que de su boca salían. Poché era arte aún así ella dijera lo contrario.

- Calle... No pares... ¡Más! - dijo con la respiración agitada y con su voz ronca, la cual la hacia lucir aún más sexy.

Mis movimientos continuaron y cada vez eran más rápidos, haciendo que Poché enterrara sus uñas en mi espalda causando un dolor placentero. Cerró sus ojos y mordía su labio inferior para silenciar cualquier sonido.

- Quiero escucharte - ordené.

Acto seguido, Poché abrió los ojos y soltó su labio, con cada embestida pedía y gemía más fuerte, hasta que comenzó a estremecerse anunciando que estaba a punto de llegar al clímax. Saqué mis dedos y lleve mi boca hacia su centro para terminar con Poché.