Felizmente ¿embarazado?

La gran noticia 10

Es miércoles por la tarde.

Hoy temprano en la mañana terminé mi turno en el hospital. Y fui a descansar un rato para reponer mis fuerzas.

Había llamado a mis padres para quedar y almorzar con ellos. Así que en este momento estoy llegando a la casa de mis padres.

Ellos viven en Bangkok así que en cuestión de una hora en transporte público llego desde mi apartamento hasta su casa.
Inicialmente vendría con Sammy y Mild, pero nuestros horarios de descanzo nada más no concuerdan.

- ¡Hijo! Que alegría verte.
Mi madre salió a mi encuentro y me dio un gran abrazo.

Abrazo al cual yo correspondi.

Abrazar a mi madre siempre me hace sentir seguro.

-Gulf  acaso no estas un poquito más... - mi madre hizo una pausa dirigiéndo su vista de arriba hacia a bajo y con mucho cuidado dijo:-  ¿rellenito? - Sonreí levemente en vergüenza, al ser tan delgado mi estómago ya comenzaba a dar indicios de crecimiento, pero no era lo suficiente grande como para ser notado. Sin embargo el poder de las madres es temible.

- Mujer, no acapare a nuestro hijo para usted sola.

Mi padre apartó a mi madre y él también me dio un abrazo. Mis padres siempre han sido muy cariñosos y comprensivos conmigo y espero que con la noticia que les daré hoy, sepan entenderme y respetar mi decisión.

Luego de saludarnos, nos dirigimos al comedor. Mi madre había hecho uno de mis platillos favoritos.

Pad Thai de camarón*...

Con solo el olor del camarón que acaparó mis fosas nasales, fue suficiente como para revolver mi estómago.

Mi intención era comer en paz y luego de un rato de haber terminado. Mostrarles la ecografía.

Pero el hecho de que ni siquiera puedo ver con buenos ojos mi platillo favorito cambia todo.

-¿Qué sucede hijo? ¿Por qué no comes?

Miré a mis padres mientras mordía el labio inferior de mi boca.

- Es que no puedo comer mariscos por el momento.

- ¿Cómo que no puedes comer?- mi padre cuestionó mi comentario anterior. Él sabe que amo este platillo al igual que mi madre.

Suspiro.

Al mal paso darle prisa.

- Padre, madre. Hoy vine no solo a visitarlos. Sino también a decirles algo muy importante que por teléfono no podía ser dicho.

- Hijo me estás asustando- madre tomó mi mano preocupada- ¿Qué sucede hijo?

- Bueno yo...- me tiemblan las manos-  Yo estoy... embarazado.

El silencio se hizo en el comedor.

Tanto mi madre, como mi padre me miraban expectantes. Tal vez pensaron que era una broma. Pero al ver mi gesto serio.
El rostro de mi padre se tornó en furia.

-¡Sabía que estabas mas panzón! - dijo madre como si se hubiera sacado la lotería mientras que mi padre.

- ¡¿Quedaste embarazado de ese hijo de perra de tu exnovio?!-

Mis padres siempre odiaron a mi ex novio. Y no es como si él hubiese tratado de ganárselos. Pero durante 4 años él había sido mi única relación así que es obvio que ellos pensarían que los bebés que espero son de él.
No es imposible ya que habían pasado casi cuatro meses desde que habíamos terminado, pero apenas tengo 9 semanas así que él no podía ser. Sabía que no era él sino Mew.