El amor de una familia 14

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Luego de la visita de Mew, Mild llegó y le contamos lo que había sucedido. Mild se mostraba algo molesto. Pero al día siguiente parecía ya no darle importancia.

Tanto él, como Sammy parecían que lo que Mew había hecho era algo de lo cual podías olvidar así, sin más.

Pero yo no puedo olvidarlo. Después de prometerle a Sammy que hablaría con Mew, me he puesto ansioso. Sammy no habla sin razón, así que algo debe de saber y por eso mismo también puede estar tranquila con el tema.

- ¿Es aquí? - llegamos a un lujoso condominio en el centro de Bangkok.  Aunque era de noche, la luces que brillaban desde el suelo mostraban cuan costo es vivir en el condominio.

- Si, es igual al de la foto- Sammy había pedido a Mild y a mi venir a este lugar para recoger unos documentos que había olvidado antes.

¿Qué haría Sammy en un lugar como este?

- Iré a hablar con el seguridad, quédate aquí. 

Mild habló con el de seguridad y me hizo señas para que lo siguiera.

Entramos al ascensor y Mild presionó un botón sin número y al lado de este había un pequeño panel para insertar un código de acceso .

- ¿Es el último piso? - cuestioné a Mild.

- Según el mensaje de Sammy debo de presionar el botón que no tiene número, parece que es un piso privado.

Ver tanto lujo me hace volver a cuestionarme, cómo es que Sammy pudo olvidar papeles importantes aquí.

Cuando llegamos al piso,  una voz suave de una mujer sonó desde una bocina  dentro del ascensor.

- ¿Si? 

- Somos los amigos de Sammy, estamos aquí para recoger los papeles que olvidó.
Indicó Mild, con un tono amable.

- ¡Oh, Por supuesto! Cuando Bajen del ascensor frente a ustedes habrá una puerta, abran la puerta y esperen en la sala.

El ascensor abrió sus puertas y Mild y yo nos dirigimos a través del pasillo hasta la gran puerta de madera.

- ¿Mild que esperas? abre la puerta- ordené a mi distraído amigo.

Mild en respuesta comenzó a mover los dedos de la mano izquierda. Eso solo lo hacía cuando se ponía nervioso.

- ¿Qué sucede Mild?

- Nada, entremos - Abrió la puerta y me hizo la señal para pasar.

-Que extrañamente caballeroso - pase y al entrar di unos cuantos pasos esperando a que Mild también lo hiciera, sin embargo él no entró junto conmigo. 

- Gulf déjame decirte que no estoy completamente de acuerdo, y que todo a sido idea de Sammy.

- ¿Que? - Mild cerró la puerta dejándome solo en la gran sala de este apartamento lujoso.

El silencio reinaba en el lugar. No había nadie alrededor.

Miré hacia todos los lados buscando a la mujer que había hablado antes pero ésta no estaba.

Solo la gran habitación que vieras por donde lo vieras se podía entender que la persona que vive aquí tiene una buena vida. Un ejemplo claro es que al lado derecho estaba una barra de granito, que parecía de estilo italiano. Con solo ver esa barra que conecta con la cocina es prueba suficiente para saber que este lugar no es barato. 

Al lado izquierdo habían dos puertas de vidrio. La puerta más pequeña tenía una cortina azul marino que evitaba que se viera hacia dentro y la puerta más grande de doble sentido daba hacia la terraza. O por lo menos eso creo ya que se puede ver una piscina a lo lejos y frente a mí se encuentran unas gradas, que me imagino llevan a las habitaciones de este lujoso lugar...

Felizmente ¿embarazado?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora