15. Fiesta de verdades incómodas

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Wrong. Capítulo sad.

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Capítulo Quince
"Fiesta de verdades incómodas"

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Después del susto debido al retraso de la novia, los recién casados y el resto de los invitados se dispusieron a celebrar aquella ceremonia de manera jocosa.

La música resonaba y algún que otro invitado ya se estaba animando a bailar.

Después de todo el drama y trabajo que había costado lograr tener todo en perfecta sincronía al fin había rendido sus frutos y su adorado primo se notaba tan feliz. Desde donde se encontraba podía verlo conversar con algunos conocidos y amigos de la familia.

Ahora podía permitirse relajarse un rato y disfrutar un poco de todo lo que le rodeaba. Buscó con la mirada a Silver y éste y el pequeño Orión jugaban animosamente con algunos de sus sobrinos.

¿Debía acercarse? Nope, definitivamente no estaba tan loca como para arriesgarse a ensuciar su vestido con cualquier fluido o sustancia que alguno de los infantes segregara.

Silver se las podía arreglar por el mismo.

Caminó hasta la barra de bebidas y pidió una copa de vino; el mesero le entregó el burbujeante líquido y se alejo unos cuantos pasos buscando algo o alguien con quien conversar.

Sus abuelos reían y bailaban al son de una de esas canciones acordes a las festividades y algunos de sus primos reían y conversaban en distintos puntos del jardín.

A lo lejos pudo ver a Tails hablar animadamente con sus tíos. Rió internamente al imaginar al chiquillo en las mismas condiciones de Silver.

−Oye Pinky−El golpe en su hombro le hizo derramar parte de su bebida debido a la fuerza−¿Porqué no estás bailando?−Preguntó la recién casada acercándose hasta ella, sosteniéndose el vestido para mayor movilidad.

La observó fulminante y contuvo las ganas de abofetearla ahí mismo; ahora era parte de la familia y lo último que quería era drama en un momento como ese.

−Yo no bailo−Respondió con simpleza dejando la copa sobre una de las mesas.

−Si claro−le restó total importancia−Hay alguien que quiere hablar contigo−giró sobre sus talones y tras de ella la figura de un joven alto y fornido se hizo presente.

−Cuanto tiempo, Rossy−Saludo animoso acercándose unos cuantos pasos a ella.

Lo observó sorprendida y sonrió segundos después con genuina alegría.

−¡MIGHTY!−Chilló emocionada lanzándose directamente a los brazos del recién llegado, el cual correspondió el gesto−¡Pero qué alto estás!−se soltó del abrazo y lo observó de arriba abajo, mientras él le devolvía el gesto.

−La pubertad−Respondió, bromista−Y parece que a ti también te afecto−Añadió pícaramente mientras tomaban asiento en una mesa libre−Cuando me dijeron que habría boda en la familia Rose, la verdad pensé que serías tu quién se casaría−Comentó casual.

Sus mejillas carmín denotaron su vergüenza; él no estaba para saberlo −y ella mucho menos iba a contárselo− que aquello era tan triste que el chiste se contaba solo.

−Eh, sí... mi vida está demasiado ajetreada para el amor−Trató de restarle importancia a todo el asunto. Lo último que deseaba era que alguien más notase que era una solterona.

𝑊ℎ𝑜 𝑤𝑖𝑙𝑙 𝑖𝑡 𝑏𝑒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora