Capítulo 4: Una muerte no anunciada

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Después de estar varias horas en el lugar, a Fluke parecía extrañarle que nadie le dijera nada, especialmente los tres sujetos que estaban a cierta distancia de él, algo que mas que incomodarlo empezaba a molestarlo, particularmente se preguntaba si esas miradas, esos susurros entre ellos se debía a que era un intruso o porque era un SIGMA, si era lo segundo les haría tragarse sus palabras. 

-¿Ya terminaron de hablar a mis espaldas o tengo yo que preguntar por Bosston Suphadach?- mirando molesto a los tres hombres frente a él.

-Deberías tener cuidado maldito... somos mas que tú y somos más altos- escuchando la risa de Fluke.

-¡Kao!- decía Ohm molesto.

-¿Y eso qué?- dejando a Pruk en la carreola y cruzándose de brazos- ¿Qué te hace pensar que no puedo golpearte y tirarte al piso de un solo golpe... o tal vez dos?

-Inténtalo- decía Kao.



Fluke miraba detenidamente a Ohm como si estuviera pidiéndole permiso para golpearlo, no cabía duda que aunque los tres eran hombres muy atractivos su pensamiento retrógrado los hacía parecer cavernícolas.

-Déjame adivinar... alguien les metió en la cabeza de que somos unos malditos apestosos, crueles y despiadados SIGMAS y por lo tanto no merecemos nada ni nadie... ni siquiera nuestra pareja predestinada ¿no es cierto?

-Fluke- viendo la mano del joven frente a su cara para callarlo.

-No me interesan sus opiniones, mis hermanos y yo hemos crecido toda la vida escuchando esas palabras una y otra vez... hicieron nuestra piel dura como el acero... si tu primo desea pelear, adelante, yo no me opongo- diciendo con una mirada altiva y desafiante- Pero te aseguro que el que va a caer no seré yo.

-No es necesario...- a punto de tocar el brazo de Fluke, viendo como este rápidamente lo alejaba.

-Bien- suspirando- Lo que menos quiero es perder el tiempo... sólo quiero ver a Bosston Suphadach, para así poder regresar a Bangkok.

-¿Tan pronto?

-No vine de vacaciones... sino para un asunto personal y esto de estarle dando largas se me hace muy sospechoso... o me dicen en este instante que sucede con Bosston Suphadach o me largo de aquí

-Fluke...- oliendo un amargo aroma a flores de cerezo.

-¡Ahora, Ohm!- oliendo el aroma a cítricos del hombre.



Escucharlo decir su nombre en ese tono tan autoritario no hizo mas que hacerle sentir escalofríos que recorrió toda su espalda, hacia mucho que alguien le había hablado de esa manera y ese fue el cruel de su padre, por lo que inmediatamente toma a Fluke del brazo y lo lleva a un lugar apartado.

-¿Piensas golperarme alfa?- soltándose de su agarre que empezaba a quemarlo- Te recuerdo que al ser un SIGMA no respondo a tu voz de mando ni soy un sumiso, así que no vuelvas a tocarme.

-Sólo una persona me ha gritado en toda mi vida y ahora está dos metros bajo tierra.

-¿Es una amenaza o una advertencia?- cruzándose de brazos- No te tengo miedo Ohm Thitiwat.


Mientras lo veía alejarse, Ohm seguía oliendo ese aroma de flores de cerezo y aun era amargo, no sabiendo como reaccionar simplemente vuelve a tomar a Fluke ahora de la cintura para acercarlo a su cuerpo y aprisionar sus labios que en ese momento le sabían a gloria y dulce ambrosía, todo su cuerpo empezaba a temblar de deseo por ese pequeño, rebelde y atractivo SIGMA que estaba luchando en sus brazos; en algún punto del beso no correspondido, Ohm sentía el deseo de poseerlo y no dejarlo ir, algo dentro de él lo quería reclamar como suyo, sintiendo como el pequeño dejaba de pelear, optó por liberarlo de sus brazos, sólo para ser sorprendido por un golpe en la cara que lo dejó tirado en el piso.

Conflicto de amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora