Bow se había sentido tan confiado...
Todas las princesas juntas eran muy poderosas. Bueno, no estaban todas, faltaban dos de los reinos más poderosos, pero eran la mayoría. Habían reducido tan rápido la resistencia hordiana, que incluso llegó a pensar que atacar la Zona del Terror no sería tan alocado.
En la reunión después de la batalla, la general Juliet, habló de fortificar Taymor a la espera de un ataque y recién a partir de ahí, lanzarse por objetivos más ambiciosos. Todo mundo estuvo de acuerdo, pero en ningún momento esperaron que el ataque hordiano llegara tan rápido.
Tal vez eso se le cruzó por la mente cuando por error disparó la flecha red, que tenía preparada para Catra, contra Glimmer. En retrospectiva no había sido una mala idea, porque Glimmer estaba cayendo del árbol y no parecía dispuesta a teletransportarse antes de quebrarse un brazo. Evitar la lesión de Glimmer le valió otra risa condescendiente de Catra.
—Pensaba que tenías una puntería infalible, supongo que hay una primera vez para todo. —Se burló Catra balanceando los pies en la rama donde había quedado apresada Glimmer—. Por cierto, Brillitos, pensaba que podías teletransportarte. Aunque claro, también pensaba que Adora nunca volvería con los hordianos, ¿cómo cambian las cosas, verdad?
El tono burlón de Catra se vio teñido de cierta amargura cuando mencionó el regreso de She-Ra a la Horda, pero el cerebro de Bow no lo pudo percibir, pues se había inundado de una tristeza puntiaguda. Él también pensaba que Adora nunca volvería con los hordianos.
Sacudió la cabeza y se concentró en lo que sí podía controlar. Glimmer se removía con la cara arrugada de odio en la red, con la mirada fija en Catra. La vibración del suelo había crecido mucho, probablemente ya se escuchaba en el campamento. Pero Bow se preocuparía por eso más tarde, al único lugar que su cerebro apuntaba era hacia su amiga.
—Aléjate de ella.
—¿O qué? ¿Vas a dispararme? —replicó Catra con una mueca burlona.
Bow se tensó como la cuerda de su arco; ella tenía razón. La vibración se convirtió en un pequeño temblor que dificultaría la precisión de Bow. Por el rabillo del ojo distinguió como un árbol se movía violentamente. Venía algo, algo grande y... hordiano. La clase de "algo" que menos agradaba a Bow.
Miró a Glimmer pero la chica no le devolvió la mirada. ¿Por qué no se teletransportaba? Tenían que salir de aquí ya. Se volvió momentáneamente consciente de la punta de su flecha. Era una de las que tenía preparadas para el combate contra Catra, capaz de apresarla en una masa verde e imposibilitarle el movimiento. Pero no podría dispararla con Glimmer tan cerca.
Otro árbol se movió en su campo de visión periférico y definitivamente estaba escuchando gritos. Casi estaban encima de ellos.
—No hay más flechas por hoy entonces. —Resumió Catra con genuino desdén—. Les diré lo que haremos entonces, tú soltarás el arco y ambos vendrán conmigo. ¿Ya tienen experiencia siendo rehenes? Ah sí, ahora recuerdo: el Baile de las Princesas.
—Eres una desgraciada y sucia basura hord... —empezó Glimmer.
—¿Con esa boca le hablas a tu madre? —Catra chasqueó la lengua mientras agarraba a Glimmer de los cachetes y se los apretaba—. Seguro estará muy disgustada.
Glimmer intentó morderla, pero la capitana hordiana fue más rápida, saltó y se posó con agilidad sobre el suelo, aún demasiado cerca de la princesa para ser un blanco factible. Extendió sus garras y de un solo zarpazo, Glimmer y su red cayeron pesadamente al suelo. Al final, Bow no había aminorado el golpe. Catra se tomó su tiempo para sujetar la red y arrastrarla unos pasos. Luego, posó sus ojos bicolores en Bow.
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Defensoras de Luna Brillante: She-Ra Universo Alternativo
Fanfiction¿Qué hubiera pasado si Shadow Weaver hubiera logrado borrar los recuerdos recientes de Adora? Este suceso, que casi ocurre en el capítulo 9 de la temporada 1, podría haber desencadenado verdaderas catástrofes. ¿Qué va a hacer la rebelión sin su...