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Black se sorprendió, intentó quitarlo de encima pero no podía, el beso se sentía muy bien, parecía que estaba curando su corazón roto, todas las penas que pasó por flug, estaban quedando en el olvido. Correspondió después de unos segundos, escuchando un gemido por parte de Flug. Por si eso no fuera mucho, las emociones y sensaciones se hicieron demasiadas cuando sintió a Flug sentarse sobre él.

El beso desde un incio no era inocente, lo sentía desesperado, con ganas de todo.

Se separaron un poco, sus respiraciones agitadas resonaban por toda la habitación, Flug tomó las grandes manos de black para llevarlas a su cintura.

-F-flug no, ¿Por qué haces esto?.- pregunta mirándolo, preocupado.

-Quiero comprobar si es verdad.- Respondió muy cerca de su oído.- Veamos qué tan fiel me eres.

Black no pudo sentirse más confundido, su nerviosismo aumentó al ver a flug quitándose su propia camisa. Pasó saliva al verle su blanca piel, sus pezones rozados, su cuello, hombros... Tantos lugares en donde dejar mordidas y marcas lo hicieron excitarse, se sentia sucio, no sabía que estaba pasando.

Entonces recordó de lo que hablaban.

-T-te soy más fiel y leal que un perro, ya te lo he demost...- no terminó de hablar, un beso corto se posó en sus labios.

-Hasta ahora.- puso sus brazos al rededor del cuello de black y sonrió juguetón. Black no hizo nada más que fruncir sus cejas.

El rubio miró los labios del contrario y despues a sus ojos.

-¿Aún te gusto?.- pregunta flug con sus ojos brillosos.

Black solo atinó asentir repetidas veces haciendo que Flug soltara una pequeña risita juguetona.

El pobre corazón de nuestro muchacho mayor estaba como loco, sintiéndose más enamorado del menor, podía escuchar su propio corazón a mil en sus oidos.

-Eres muy lindo, black.- Sonrió, demostrándole al mayor despues de mucho tiempo su verdadera sonrisa. Empieza a desabotonar su camisa.

Black tomó las muñecas de Flug con sus manos, sorprendido.

-¿D-de verdad piensas eso?.- preguntó con toda la esperanza del mundo.

-Sí, demasiado lindo.- Sonrió mientras sus mejillas tomaban un color rojizo. Se acercó a la oreja del contrario.- Hazme tuyo.

«"Solo me perteneces a mí"»

Se arrepintió de decirlo.


Para Black eso fué suficiente. Lo miró sonrojado, el rubio se encontraba en todos sus sentidos.

«"Aunque yo..."»

Entonces...

.

.


Su respiración estaba acelerada, abría su boca para tomar más aire pero ese aire volvía a salir en gemidos ruidosos.
Las cuatro paredes de la habitación eran únicas testigos de aquel encuentro.

Friends. [Paperhat]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora