"Responsabilidad"

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No podía creer lo que sus grandes ojos cafés veían, él se estaba llendo, dejándola sola con aquella responsabilidad que se suponía ambos tenían que compartir, pero al parecer a él poco le había importado, y si sí lo hacía simplemente no sabía el porqué se alejaba sin más.

Estaba enojada, más que eso, estaba furiosa, como nunca lo había estado, sin poder evitarlo dirigió su mirada al pequeño bulto en sus brazos y después al chico que le daba la espalda de nuevo, sin saber que ver realmente.

—¡Neji!— le gritó a lo lejos.

El chico solo se detuvo sin voltear a mirarla, dándole a entender que al menos la estaba escuchando.

—¡No puedes dejarme así!— volvió a gritarle mientras la desesperación comenzaba a consumirla— ¡Esta no es solo mi responsabilidad!, ¡Es de ambos!, ¡Por favor Neji!, ¡No puedo hacerlo sola!— grito nuevamente mientras el bulto en sus manos comenzaba a lloriquear y algunas personas comenzaban a mirarlos para después murmurar—. Te necesito.— expresó con cansancio.

El Hyuga miró sobre sus hombros, sintiendo como la culpa lo comenzaba a invadir tras ver su semblante decaído y con una mezcla entre enojo y desesperación, todo mientras sostenía la pequeña sábana color rosa entre sus delicadas manos femeninas.

Se veía tan linda como cuando la conoció, ni siquiera ese gesto de aflicción opacaba su belleza pero si que lo hacía sentir culpable, pero se había prometido protegerla y hacerla feliz que era una decisión que no podía rechazar, aún cuando tendría que dejarla sola con aquella responsabilidad que compartían sabía que era lo mejor, además de que estaba seguro que haría un gran trabajo con o sin su ayuda, no por nada era la mujer más fuerte que conocía.

—Te dije que no podía hacerlo Tenten, lo intenté pero me fue imposible.— objetó él lo suficientemente fuerte para que la castaña lo escuchara.

—Lo sé Hyuga, pero solo quiero una maldita razón, solo quiero intentar entender porqué me dejas sola en esto cuando sabes lo mucho que te necesito...que te necesitamos.— dijo la chica mientras trataba de arrullar al bulto entre sus brazos y callar así su llanto.

—Mi familia...

—Por supuesto, debí suponerlo, tu familia de nuevo...— escupió la castaña con molestia— por favor Neji, si tan solo les explicarás, estoy segura que...

—No Tenten, ya te dije que esto es importante.— interrumpió él sintiendo como su límite comenzaba a llegar, no quería decir algo de lo que después pudiera arrepentirse y tampoco hacerla enojar más, ya tenía suficiente con las miradas molestas que le estaba dirigiendo en ese momento.

—¿Mucho más importante que yo?...¿qué nosotras?— cuestionó Tenten con tristeza.

Él la observó con más culpabilidad todavía, ¿mucho más importante que ella?, por supuesto que no, lo único que se podía llegar a anteponerse ante ella era ella misma, pero como le explicaba que lo hacía por ella, por tratar de hacerla feliz.

—Lo siento Tenten...— dijo el castaño emprendiendo el regreso a su casa con el semblante algo decaído por haber dejado en esa situación a la única chica que realmente amaba, todo mientras ella le seguía gritando a lo lejos.

(...)

Por más que se cuestionaba las posibles razones por la cual se había atrevido a irse no lograba encontrar una con la fuerza suficiente, anteriormente ya había tenido diferencias con su familia pero siempre había decidido estar con ella, aún cuando ellos se molestaban, ¿qué era diferente ahora?, no estaba segura pero sabía que debía tratarse de algo importante, aún así, eso definitivamente la había decepcionado.

"Un mes para disfrutar"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora