Capitulo 27

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Desde el día de ayer el peliplateado se ha comportado de forma extraño, durante toda la noche no logro conciliar el sueño y todo se debía a Yuuri, estaba demasiado confundido por su comportamiento y por ello en la mañana decidió salir temprano a ejercitarse, quería distraerse lo mas posible y tener tiempo a solas. Cuando salió de la casa logro ver al pelinegro en el sillón del living, y aunque tuviese una manta sobre el se veía que tenia frio pues estaba temblando pero simplemente decidió dejarlo así.

Antes de salir a correr se tomo un batido de frutos rojos o si no despues le dolería el estomago por no tener energía antes de ir a hacer ejercicio, corrió lo mas rápido que podía, no quería pensar en nada, ni en Yuuri ni en las cosas que le provocaba. Se detuvo un momento porque la respiración le faltaba, tomo un poco de agua para refrescarse y su mirada se dirigió a la playa, ayer la lluvia fue bastante fuerte ya que aun habían unas nubes oscuras pero poco a poco se alejaban, fue una lluvia bastante repentina.

El sol recién estaba saliendo y eso hacia que su reflejo se viera hermoso sobre el agua cristalina, desde que habia empezado su carrera de modelaje quiso vivir en algún lugar donde tuviera privacidad y donde vivía rara vez habia paparazis, habia una gran seguridad desde que un montón de fotógrafos lo siguieron hasta su casa, aquello realmente habia sido un completo escandalo. Últimamente la gente ya no hablaba cosas malas sobre el y su autonepiofilia ,era bastante bueno ya que despues de este experimento podria volver a dar entrevistas y eso mejoraría aun mas su carrera como modelo, mas empresas le llamarían para hacer pasarelas a algún país o aparecer en revistas, lo que mas apreciaba en todo esto era el apoyo de sus fans, siempre le defendían de algo que decían sobre el en redes sociales o revistas que solo mencionan escándalos. 

La semana pasada habia publicado esa foto de Yuuri y Mackachin abrazados sobre la cama, las personas se lo tomaron de buena manera y no empezaron ha sacar conclusiones sobre con quien estaba el peliplateado o si ya estaba en alguna relacion. Y aunque quisiera estar con Yuuri, el debía valerse y pensar en si mismo, sentía que todo el asunto de ir al psicólogo fue algo causado por la inseguridad y agregándole que se hablaban malas cosas sobre el.

Salió de sus pensamientos y decidió volver a casa, trato de demorar pues no quería ver al pelinegro, el mismo sabia que estaba bastante frio y cortante con Yuuri pero no sabia como hablarle nuevamente o como comportarse, ¿debería besarlo y abrazarlo cuando llegara?, no era lo mas correcto viendo la situación en la que estaban desde ayer. Ni siquiera pudo decirle al pelinegro lo delicioso que estuvo la comida por ser tan terco, pensó un poco mas sobre que le diría a Yuuri, no podía simplemente ignorarlo aquello seria comportarse como alguien inmaduro.

El pelinegro estaba en las mismas condiciones que Viktor, quería preguntarle porque se comporto así ayer pero no quería entrometerse tanto con el peliplateado, pensaba que tal vez el ojiazul tenia algún problema personal o que se sentía mal. Durante la noche no pudo dormir bien ya que se habia acostumbrado a dormir con Viktor a su lado, eso que apenas ha pasado una semana desde que comenzó el experimento,  el peliplateado causaba sentimientos muy fuertes en el, y que ahora este le fuese cortante le hacia sentirse triste e incluso dolido.

Se levanto del sillón un poco adormilado y su cuerpo se sentía un poco adolorido, pero de igual manera siguió caminando hacia el baño para poder ducharse, luego de eso se lavo los dientes y fue a la cocina. Preparó huevos cocidos y lo hecho en una pan integral. Después preparo un poco de café para poder mantenerse despierto durante toda la mañana, hoy no estaba de ánimos. 

Vio por el gran ventanal que estaba justo al lado de la puerta como el peliplateado se acercaba trotando a la casa, se extraño porque pensaba que este aun seguía durmiendo con Mackachin, pero el can salió corriendo de la habitación del peliplateado en busca de el, trato de no prestarle atención y actuar de manera natural, Viktor entro a la casa cansado y saludando a su mascota, mientras se agachaba y le acariciaba la cabeza.

-Buenos días Yuuri- hablo el peliplateado de manera neutra, busco un paquete de comida para Mackachin y luego de aquello paso directamente hacia el baño sin pegarle ni una mirada hacia la dirección del pelinegro, este también le saludo pero este sonó al menos mas amable que el otro, Viktor fue al baño y desde afuera de la habitación se escuchaba como abría la llave de la ducha. 

El japonés termino de desayunar y lavo todo lo que ensucio, se dio cuenta de lo incomodo que estaban las cosas entre el y el peliplateado, así que pensó que lo mejor seria tomarse un descanso por hoy sobre el experimento, busco una mochila que trajo y hecho las cosas necesarias para salir, busco un papel y lapicera, y escribió algo para que Viktor lo leyera despues, decidió dejarlo sobre el mesón de la cocina, se despidió de Mackachin con una caricia en su cabeza y llamo a un taxi, el centro de la ciudad se encontraba bastante alejada como para irse caminando.

Durante el camino pensó en alguna otra razón para que el peliplateado se  pusiese así con el, pero su cabeza no encontraba algo. Caminó por bastante rato en las calles concurridas y repletas de personas que iban hacia su trabajo y otras que iban solo para distraerse, paso todo el día pensando en como volver a ser como antes su relacion con el peliplateado.

Mientras en la casa el peliplateado salía del baño en busca del pelinegro, pero solo vio a su mascota acostada en su cama, fue a su habitación y a la cocina, alcanzo a ver un papel color azul sobre el mesón y se acerco para leerla.

 "Me iré durante el día para que puedas pasar un rato solo y que hagas tus cosas, desde ayer que te comportas extraño y sigo sin lograr entender el porque, esperó que alguno de estos días quieras hablar conmigo sobre lo que te sucede  por eso te dejo un tiempo para que puedas hacer las cosas que te gustan o que pases mas tiempo contigo mismo, adiós Viktor"

Una presión se instalo en su pecho al leer lo que le habia dejado el pelinegro, no pensó que este se sentiría así, tal vez lo beso porque todo lo que hacia se interpretaba como si le gustase Yuuri y era así, no porque quería jugar con el, el japonés lo beso porque sentía lo mismo. Llamó rápidamente a Sara para que cuidara por el día a Mackachin, se despidio de el y salió en su auto en busca del pelinegro.

Babysitter de un NikiforovDonde viven las historias. Descúbrelo ahora