5 Autoprotección.

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Jane probó con bella al fin de cuentas... Edward estaba aún recuperandose del dolor y yo solo quería ir a casa.

Ahorita mismo estaba arrepintiendo me de no quedarme en forks y esperar a mi futuro esposo, pero que puedo decir, fue un total impulso y además el terror de cuando Alice me dijo que Edward pensaba en suicidarse me invadió y eso fue de ayuda, ahora solo estaba la adrenalina.

—Jane...— susurró Aro con duda, la rubia tenía un expresión de furia plasmada en su rostro — ¡Maravilloso! Ninguno funciona contra ella, es un escudo. — bella frunció el ceño—

"Ay porfavor, quiero irme, estar tanto tiempo de pie me está matando"— pensé mientras miraba mis pies adoloridos y después subí la vista, salté en mi lugar ya que tenía a Aro frente a mí.

— Veamos si eres aún más interesante...— extendió su mano y yo fruncí el ceño — ¿me darías tu mano? — en el tono en que lo dijo... No fue una petición, sonó más como una orden.

Asentí y le dí mi mano sin dudar sentí un escalofrío pasar por mi espina dorsal cuando su temperatura fría tocó mi piel.

—Muy... Peculiar. — dijo mirándome con una mirada profunda.— La tua Cantante de dos seres inmortales...— escuché un gemido de Sorpresa— Es interesante, Elizabeth. — hice una mueca y me encogí de hombros— Quisiera probar algo... Alec. — murmuró y Edward se puso histerico.

—No, ni loco. — murmuró.

— Edward ya basta, solo estás provocandolos. — le dije con voz firme y su expresión cambió a una más relajada.— Si haga lo que tenga que hacer menos  lo que provoque nuestras muertes, necesito volver junto con mi madre porque sin mí se muere...— Murmuré en tono preocupado.—

—Aun más interesante, estás en la boca de lobos y tú solo piensas en tu madre...— sonreí a labios cerrados.

—Dejese de palabrería y actúe de una maldita vez. — dije irritada.  estaba ya al tope, harta quería irme de aquí ya.

Ví en su rostro aparecer un sonrisa maliciosa y de Edward salió un gruñido de lo más profundo de su ser.

—Alec. — el nombrado dió un paso adelante y de él salió una espesa neblina de color negro, parecía atemorizante pero solo causaba más mi curiosidad.

La espesa neblina me rodeó lentamente, parpadeé y dije:
— ¿No puedes cambiarla de color?— sugerí.

Unos segundos después sentí como la espesa neblina me atacaba pero no dolió si eso se esperaba no, está cambió de color​ a uno más vivo y reluciente.

— Esto si es bonito. — exclamé mirando la neblina que ahora de color lila junto con rosado, como si fuesen auroras.

—Alec. — oí un murmullo.

Y en un parpadeo la neblina se detuvo, miré con el ceño fruncido a donde se fue la neblina, sentí un tacto frío repentino en mi mano, Aro estaba tomándola.

—Es... Un escudo físico.— me miró y yo fruncí el ceño — Ninguno de nosotros puede lastimarte, ¿pensaste que lo resistió por su propia voluntad? — abrí mis ojos Sorprendida. Lo primero que vino a mi mente fue Jasper.  — No, fuiste tú y es fascinante, Auto protección. — soltó mi mano.

— Eres un humana super dotada, llegué a pensar que no eres completamente humana. — mi expresión en ese momento fue de shock — Tienes un gran poder en tí, maravilloso.— ví sus ojos centellar y eso para mí fue una advertencia.—

—Claro que soy humana, ¿Acaso está ciego? — traté de cambiar el rumbo de sus pensamientos—

—Sin duda. — sonrió a labios cerrados.— Si tan solo tuviera la intención de convertirte... — miró a Edward y después a mí — Apesar de ser la verdadera él no lo quiere entender... —negó lentamente — son un caso especial.  — pasé saliva.

╔══•ᴅɪᴀᴍᴏɴᴅs•═╗                               ╚══•✯²ᴘᴀʀᴛ✔✧•╝Donde viven las historias. Descúbrelo ahora