Todo de ti {Flamantha}

Vuela

Hola, normalmente escribo al final de cada cap, pero ahora tenía que avisaros por si no queríais leer esa parte, en este cap habrá escenas explicitas de sexo, os marcaré la parte con ********** por si queréis saltarla.
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Flavio

Samantha y Dara estaban en el salón viendo la princesa cisne. Mi cabeza seguía sin entender nada, seguía sin comprender como, en qué momento había pasado, como mi hija se había aferrado a Samantha. Como aún no a sido capaz de decirle que sabe quien es. Llevo toda la vida hablándole de ella. De la rubia que me enseñó a vivir, de la chica con los ojos azul cielo que me hizo volar. Le había enseñado fotos de Samantha, fotos de los dos. Le había contado que era el amor de mi vida. Ella sabía que sus padre no se querían de una forma sentimental. Y al igual que claudia tenía pareja yo también había estado con más chicas, pero siempre le hablé de la misma, siempre le hablé de ella, de la chica rubia que me encendía. Quizás fue lo que más me chocó cuando las vi juntas, saber que Dara sabía quien era, sabía que era la rubia que me volvió loco en su día, aquella rubia de los libros de mi habitación, la de la foto en la mesilla de noche. Aveces pienso que mi hija tiene veinte años en vez de cinco, su madurez me choca mucho, aunque yo a su edad era igual que ella.

Estaba sentando en el sofá con ellas perdido en mis pensamientos cuando note unas manos golpeándome la pierna.

-Papi, papi-decía la niña insistentemente.

-Perdona bebé estaba perdido en mis pensamientos, dime- le dije acariciando le la cara.

-Cántale a sam la canción que escribiste anoche, porfis porfis porfis- dijo porfis al menos veinte veces más. Yo la mataba. Mato a mi hija.

-No- le dije mirándola muy serio.

-Vamos flavio no seas seta, Dara dice que es la canción más bonita que has escrito- me dijo la rubia en un tono de burla que me hizo de todo menos gracia, la tía está más imbécil que nunca, y más guapa y atractiva también. Mierda flavio, saca esa idea de tu mente de una vez. Me levante del sofá y supongo que las dos pensaría que me iba para pasar de ellas, pero no. Me levante y cogí la guitarra, volví a mi posición y abrí la libreta poniéndola en mi rodilla.

Vuela

De verdad que has venido sólo a saludar
Pensarán que estoy loco al pedir que vuelvas

Levante la cabeza y la mire a los ojos, tenía que tener claro que esto iba por ella, que después de verla el corazón me había vuelto a latir, y aunque nuestro destino se había encargado de que no fuera mía, de que yo no fuera suyo, tenía que saber que la esperaría una vida más, o todas las que hiciera falta.

Hoy maldigo la plaza, la hora, la ciudad
El colchón y los minutos que te recuerdan
De ti, me quedan cinco vales por un beso
De esos que juraban viajes, de los cuales
Sólo dos, menos tres, más uno, haremos
Y si hoy no reconocemos
Yo doy las gracias, tú la espalda y, luego, adiós

Roma, maldita roma. Maldito abrazo. Maldita despedida. Maldita la locura.

París no será la ciudad del amor
Mientras vivas en Madrid
Ni las agujas darán media vuelta al reloj
Y en Londres, tal vez, no llueva
Y no te equivoques porque, en realidad
Es América quien quiere recorrerte a ti
Puede que te acuerdes de mí, allí
Así que, vuela alto, vuela alto, vuela alto hoy
Así que, vuela alto, vuela alto, vuela alto hoy

Siempre quise que brillara, que volara, lo hizo. Lo hizo cuando yo me fui. Voló. Brillo. Despegó. No se estrelló.

De verdad, no has imaginado ese lugar
Donde nada, ni nadie nos tenga cerca
París no será la cuidad del amor
Mientras vivas en Madrid
Ni las agujas darán media vuelta al reloj
Y en Londres, tal vez, no llueva
Y no te equivoques porque, en realidad
Es América quien quiere recorrerte a ti
Puede que te acuerdes de mí, allí
Así que, vuela alto, vuela alto, vuela alto hoy
Así que, vuela alto, vuela alto, vuela alto hoy