Capítulo Siete

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Nota de la Autora: no es gráfico en lo absoluto. Para cualquiera que esté confundido, Remus es más dócil y tranquilo de lo que hemos llegado a conocer sobre las cosas del mundo de los alfas porque su omega es virgen. Es como una regla no escrita que no tomas la virginidad de un omega durante un "heat" (celo de los omegas) o un "rut" (celo de los alfas), además de que las emociones de Harry salen como aromas. Entonces Remus, siendo su alfa, puede decir que Harry no está listo para tener sexo por eso tiene más autocontrol, sin embargo, el siguiente "rut" no va a ser así, ya que Harry va a estar "apareado" (mated) para ese entonces. Todo lo que pasa en este capítulo es consensual, sin embargo, hay partes de forcejeo, pero es muy muy muy breve. Como sólo unas frases. Quería que esto mostrara un lado de Harry que no habíamos visto antes mientras lidia con estar con una pareja casada. ¡Espero que disfruten esto tanto como yo disfruté escribiéndolo! Tengo muchos borradores de historias y esta realmente me ha alentado a tal vez publicar más cuando esté lista.


Harry se acurrucó en el sofá frunciendo el ceño ante el fuego que parpadeaba en la chimenea. En los últimos días, Harry se había estado excitando cada vez que Remus estaba cerca de él y no sabía por qué. Sabía que parte se debía a que él era su alfa, y su olor estaba por todos lados. Pero esto era una excitación constante y lo estaba volviendo loco. Sabía que ahora mismo Sirius y Remus lo estaban haciendo como conejos en su habitación desde que eran las dos de la mañana. Harry no podía dormir, no mientras su alfa dejaba salir feromonas que lo llamaban. De repente, los ojos de Harry se agrandaron y se tensó antes de levantarse del sofá y correr hacia la puerta del dormitorio de sus parejas. La golpeó llamando a Sirius.

—Mierda... Remus para —Harry oyó a Sirius decir después de un gruñido—. Ya sé, pero debe ser algo urgente así que quítate... Remus, en serio quítate. Remus... —Harry sacó su varita, estalló la cerradura de la puerta y corrió adentro sin prestarles mucha atención. Corrió hacia ellos y haciendo lo que su Papá le dijo agarró el nudo de Remus, haciendo una pequeña mueca a la textura pegajosa, y lo jaló afuera de Sirius.

—¡Ay! ¡Joder Harry, qué diablos! —Gritó Sirius desde la cama, rodando de lado.

—Explicaré luego, solo quédate ahí —Remus gruñó y estaba peleando con Harry, pero Harry tenía un fuerte agarre en su nudo, así que no había mucho que pudiera hacer o a dónde pudiera ir. Después, Remus se giró a él y lo clavó contra la pared—. No... Remus... Remus no. Estás entrando en celo*, no puedes estar con Sirius. Lo lastimarás —dijo Harry luchando contra las manos del hombre lobo que lo estaban agarrando—. Sirius, necesito que traigas a James. Ahora —Sirius salió rápidamente de la recámara después de ponerse unos pantalones.

—Mío. Mi omega. Dulce omega. Déjame hacerme cargo de ti —murmuró Remus mientras lo olía, su mano agarró su polla dura. Harry lo apartó rápidamente y recibió un gruñido de su alfa.

—Alfa. Alfa mírame. Respira... —Sirius y James se apresuraron a entrar en la habitación con Lily no muy lejos, pero Harry levantó una mano—. Ahí tienes. Relájate bien... Estoy aquí. ¿Puedes oler mis feromonas? —Su alfa asintió débilmente aunque todavía estaba tratando terriblemente de agarrar su excitación.

—Mi dulce omega. Déjame tocarte —su alfa gimoteó desesperadamente.

—No. Tienes que... sí, okey, ese es mi pene. Gracias por agarrarlo. Pero no necesito una mano. Suéltalo. Manos para ti mismo. ¿Tienes que escucharme sí? ¿Me quieres feliz, no?

—Por supuesto. Te quiero feliz y desnudo.

—Sí, me di cuenta de eso solo. Alfa, necesito que me huelas, necesitas oler mis feromonas y aroma. ¿Puedes hacer eso? —Remus casi se zambulló en su cuello y respiró profundamente, luego se tensó antes de dejar escapar un profundo gruñido que Harry sabía que era de placer—. ¿Ves? Soy virgen, lo que significa que no puedes tocarme ¿okey*?

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