🥀Capítulo 19

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Estaba allí, sentada en el comedor de la mansión, comiendo.
La comida la hacía mi tía. Mi madre y mi padre solo se encerraban con el resto de mortífagos en un cuarto para hablar de sus cosas, dejándonos a Draco,  Narcissa y a mi solos.
-Cariño, ¿estás bien?- me pregunta Narcissa. Asiento sin levantar la vista del plato. -Todo irá bien, ¿sí? Solo procura hacer lo que tu padre te pide.- asiento.
Terminamos de comer en silencio.
Me vuelvo a mi cuarto, sin saber que hacer ahora.
-Draco- digo llamando a la puerta de su habitación. Él está en su escritorio, escribiendo algo.
-¿si?- me dice, amablemente.
-¿vamos al patio?- pregunto. Asiente sonriendo tristemente.
Salimos de la mansión.
-¿recuerdas aquel día en que enterramos una cápsula con unas notas?-cme dice.
-lo había olvidado- digo sonriendo levemente. -¿aún sabes dónde está?- le pregunto, levantando la vista del suelo. Asiente.
-Sí. Recuerdo exactamente el lugar Jade. ¿La desenterramos?- propone. -¿no lo íbamos a hacer cuando tú cumpliera 18?- pregunto. Se encoge de hombros. -creo que para ese entonces no estaremos aquí.- dice haciendo una mueca. -vale, vamos pues.- digo.
Pasamos a casa a por una pala. Queríamos hacerlo al estilo tradicional, sin magia.
Cuando la enterramos también lo hicimos así. Fue muy divertido la verdad.

FLASHBACK

-aquí mismo, ¿no?- pregunté yo. No tendría más de seis años. Draco asiente. -sí, aquí será un buen sitio. Usaremos ese árbol de referencia. Y esa fuente.- dice mirando alrededor. -bien, me pido empezar a cabar- dije alegremente, quitándole la pala de la mano. Se ríe.
Comencé a cavar en la arena. Estaba bastante dura y era difícil. Cuando conseguí clavar la pala, se quedó atascada. No podía moverla. -jolín- me quejo. Empiezo a tirar, pero no se mueve. Draco se reía. Pero yo seguí haciendo fuerza, y para mi desgracia, resbalé para atrás y me di un golpe en la cabeza.
Me dolía bastante, pero no era para tanto. O eso pensé.
Draco siguió cavando, mientras yo juguetea con la caja de metal. -draco, no me encuentro bien- advertí. El chico me miró. Me examinó la cabeza, y descubrió una gran herida abierta. No me había dado cuenta de que estaba sangrando. -¡corre! Hay que ir a por mi madre- me dijo ayudándome a levantarme para entrar en la casa.
Narcissa me curó. Siempre fue ella la que hizo el papel de madre. Siempre.
Después volvimos a donde habíamos comenzado el hoyo, y enterramos la caja con nuestros escritos. Allí habíamos decidido escribir preguntas para nuestros yo del futuro.

Fin del flashback


𝑫𝒆𝒔𝒕𝒊𝒏𝐨☘︎ | 𝐿𝑎 𝐻𝑖𝑗𝑎 𝐷𝑒 𝑇𝑜𝑚 𝑅𝑖𝑑𝑑𝑙𝑒Donde viven las historias. Descúbrelo ahora