¿Cuándo volveré a verte? (TobiIzu)(HashiMada)

I. Sentimientos

El Senju abría la puerta de cristal y chocó los hombros con alguien más, pero al ser esa persona más baja de estatura no logro ver su cara, lo único que vio fue que tenía el cabello negro, entonces no le tomó importancia.
El lugar era lujoso y muy limpio, a decir verdad, Tobirama se sentó en una mesa con una sola silla.
Se acercó una mujer de 20 años en adelante, el albino encargo ichigo un postre ya que no tenía mucha hambre.
La muchacha fue a darle el pedido al chef, mientras tanto el ojirojo observaba el lugar y definitivamente nunca lo había visto.

De repente su celular empezó a sonar y atendió la llamada.

—Tobirama-sama, solo para avisarle que el día de mañana a las 14:00 horas tiene una cita con una pareja de esposos que requieren de su apoyo.

—Muy bien, enterado.

La llamada término y el albino se sintió satisfecho por tener clientes nuevos, pasaron unos cuantos minutos y su postre había sido entregado. En el plato se podía ver el empeño que le pusieron en la elaboración del ichigo, había también palillos para consumirlo. Los tomó con su mano y comenzó a comer, el sabor era impresionante, la combinación de la frutilla con los demás ingredientes era muy buena.

Para ser la primera vez que come ahí la verdad si lo sorprendió. Terminó de comerlo, pagó y se fue. Caminó hacia el edificio donde trabaja para saber si había alguna novedad, la secretaria le dijo que nada nuevo había llegado, entonces Tobirama decidió ir a casa.

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"Estoy seguro de que era el, yo lo sé. Además, esos rasgos en la cara eso es lo que confirma todo. "

Izuna estaba en un debate con el mismo, de lo que ocurrió en la tarde cuando salió de su trabajo. Chocó con un hombre, pero no cualquier hombre, él era albino y por lo tanto el azabache estaba seguro de que era la persona que ve seguido en el metro.

Por alguna razón Izuna se obsesionó con esa persona, aunque ya no quería pensar más en eso, ya desde hace una hora que tenía que estar dormido pero el tema del albino le provoca varias emociones.

El canto de los grillos relajo al Uchiha y el sueño se apoderó del menor quedando profundamente dormido.
Al día siguiente Izuna despertó sonrojado y después recordó el sueño que había tenido.

-Flash Back. -

El Uchiha salió del restaurante y de repente choca con alguien haciendo que el menor cayera al suelo y soltara un quejido de dolor, el hombre amablemente le tendió la mano para que pudiera levantarse. E Izuna la aceptó al ver de quien se trataba, su cara se puso completamente roja y sus manos empezaron a sudar de los nervios.

Era el hombre albino y que gracias a este el azabache empezó a experimentar nuevas emociones totalmente desconocidas.
—Lo siento, ¿estás bien? — el más alto le preguntó viendo como el rostro del contrario era un tomate.
—Sí, sí, estoy bien no te preocupes— incluso llegó a tartamudear de la vergüenza que sentía y no soportaba aquello y decidió despedirse, y se fue...

-Fin flash back. -

Izuna comenzó a moverse como lombriz en su cama mientras tapaba su cabeza con una almohada, el sueño que tuvo fue el mejor que ha tenido en su vida. Tenía demasiado animo que sentía que en cualquier momento explotaría.

Pero hoy asistirá a su trabajo y no tiene tiempo para estar pensando todo el día en su enamoramiento de adolescente con hormonas alteradas.
Se bañó y se puso ropa limpia, bajo a desayunar y estaba su madre recién terminando de preparar el almuerzo.

—Buenos días Izuna— dijo la señora Uchiha con una sonrisa.
—Buenos días madre, ¿dónde están Madara y mi padre?
—Tenían que entrar a trabajar más temprano de lo habitual, aunque se me hace extraño que tu hermano entrara más temprano.
—Ya veo... Probablemente nii-san tiene cosas que hacer.
—Si— la mujer le colocó un plato con unas tostadas de miel y un vaso de leche.
—Gracias, provecho— el menor sonrió tomando el bocadillo y empezando a comer.

Cuando termino de desayunar se despidió de su madre y se fue a comenzar su día.

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En otra parte de la ciudad dos personas se encontraban hablando tranquilamente.

—Yo tengo tres hermanos menores
—Yo solo tengo uno, y, ¿cómo se llaman tus hermanos?
—Tobirama, Itama y Kawarama ¿y el tuyo?
—Izuna.
—Espero algún día conocerlo— el moreno le mostraba una sonrisa
—Yo igual— el pelinegro también le sonrió pero sus labios no podían formar una gran sonrisa como la del castaño.

Siguieron caminando hasta que Madara llegó a su destino.

—Aquí es donde me despido de ti Madara
—Si, tal vez otro día repitamos esto— se sonrojo un poco por lo que dijo.
—Cuando quieras—Hashirama sonrió.
—Está bien, hasta luego
—Adiós

El Senju se fue dejando un vacío en el corazón del Uchiha sin saber por qué se sentía así, solo eran amigos, llevaban pocos días de conocerse, pero ellos sienten que ya se habían conocido desde hace mucho tiempo.

Madara entró a la cafetería y su amiga pelirroja observó todo lo ocurrido y se acercó al azabache.
—¿Y ya son novios? — la chica sonrió pícara.
—No, apenas nos conocemos.
—Veo en tu mirada, que sientes un profundo vacío en tu corazón —Mito hablaba sería colocando su dedo índice en la ubicación del corazón de Madara.

El Uchiha se sorprendió de que su amiga se diera cuenta de lo que estaba pasando con sus sentimientos.

—¡Yo no siento nada por él, es imposible! —le reclamó con algo de enojó queriendo ocultar la verdad.
A la pelirroja le dio risa el comportamiento del menor.

—¡¿Qué es lo gracioso?! — ahora un notable rubor adornó las mejillas de Madara.
—Tu muy bien sabes que lo que dije es verdad — la Uzumaki le contestó retirándose de ahí dejando que a su compañero no se le hiciera tarde, porque todavía ni traía puesto su uniforme.

"Odio cuando tiene la razón" Se dijo a sí mismo para después continuar con lo suyo.

Aprovecho este espacio para preguntarles: ¿Qué les esta pareciendo la historia?

Me gustaría mucho que la pudieran contestar con toda sinceridad :)