DANIEL Y LEA Terminada

capitulo 9

Se separa un poco y veo a Daniel y a Robert junto con cuatro personas más, ellos me saludan con la cabeza y yo les respondo de la misma manera.

-Hola, señorita Melisa.

-Hola, Jhom pero llámame Melisa solo.

-Está bien- Jhom contesta con una sonrisa.

-Bueno chicos me voy a mi mesa, pasarlo bien, nos vemos en la noche Lea.

-Ok mama, tú también pásalo bien.

Mi madre se dio la vuelta y se fue para su mesa, la miré y me di cuenta de que tenía a Daniel de frente, está guapísimo con esa camisa blanca ajustada con cuatro botones desabrochados y viéndosele el pecho, lleva también un pantalón vaquero azul claro ajustado, lo vi cuando fue al baño.

-Tierra llamando a Lea- La voz de Jhom me saca de mis pensamientos.

-Perdona Jhom ¿Qué decías?

-Veo que estás muy entretenida mirando a Daniel.

-¿Cómo?, No, no estaba mirando a Daniel.-Uff no sé que me pasa cuando lo tengo delante

-¿Bueno está bien, si tú lo dices? Te creeré-La voz de Jhom es un poco burlona y con un toque de enfado.

Me centré en mi cena con Jhom, pero de vez en cuando miraba a Daniel y también sentía sus miradas, Jhom estaba muy gracioso esta noche y demasiado cariñoso, yo me separaba disimuladamente y miraba con disimulo a Daniel que lo veía apretar la mandíbula, estaba más pendiente de nosotros que de la reunión que él tenía. Después de tomar el postre nos levantamos para irnos.

-Mamá, nos vamos.

-Ok cariño, nos vemos más tarde.

-Chao chicos- Nos dijo Robert, Daniel saludo con la cabeza.

-Hasta luego- Dijimos Jhom y yo al mismo tiempo. 

Nos montamos en el coche.

-Lea me puedes acompañar a mi casa un momento, me he olvidado unos papeles muy importantes, y tengo que mandarlos a la universidad, si no me quedare para el año que viene.

-Me parece bien.

Al rato llegamos a un edificio alto de apartamentos, aparcamos delante del edificio y subimos, entramos en el ascensor y entramos en el piso 20 y número 20 de puerta, el piso no era muy grande, dos habitaciones, un baño, salón y cocina todo junto, estaba din decorado.

-Siéntate, el sofá no te va a morder.

Me senté un poco incomoda, Jhom se marchó un momento, bi como entraba en una habitación, al rato salió fue a la cocina y trajo unas copas con vino.

-Jhom creo que es mejor que nos marchemos.

-En un rato Lea, primero vamos a tomar esta copa de vino.

Sin darme cuenta y sin poder reaccionar Jhom se me echo encima y empezó a besarme, cuando abrí la boca para protestar él me metió la lengua hasta la garganta, sus manos me tocaban por todo el cuerpo, el pecho, las piernas, me subió el vestido a la cintura, yo forcejeaba para sacármelo de encima, pero no era capaz, se separó un poco para desabrocharse sus pantalones y yo aproveche para separarme un poco.

-Jhom, no quiero- dije gritando.

-Oh, Lea lo estás deseando tanto como yo.

Intente sacármelo y pegarle, pero él me agarro las manos mientras me besaba el cuello, y yo le gritaba que parara, cuando intentaba quitarme las bragas para penetrarme  sonó el timbre. Jhom se separó un poco, pero al momento siguió con lo que estaba, volviéndome a besar por el cuello, volvieron a timbrar y se escuchó una voz.

-Jhom, abre sé que estas, escucho ruidos.

Se escucha la voz de Daniel detrás de la puerta.

-Voy, un momento-Chilló Jhom- espero que cuando abra esa puerta no cuentes lo que está pasando ahora mismo, o te haré la vida un infierno, y sabes que Daniel me creerá a mí y no a ti, vale perra- me dijo Jhom tapándome la boca- yo asentí- ahora ve al baño y arréglate.

Me levante corriendo y fui al baño, mientras escuchaba como Jhom abría la puerta y entraba Daniel, mis lágrimas caían sin poder pararlas, moje la cara, menos mal que uso maquillaje especial a prueba de agua y de rozaduras, ya que soy muy torpe y sin darme cuenta me froto los ojos, tengo darle las gracias a Ani, me seque con una toalla la cara, pinte los labios y salí, cuando vi la cara de Daniel me quede en blanco igual que él.

-Ah, Lea ¿Ya has terminado?

-Eh, si, bueno tengo que irme, que me acaba de llamar mi madre para que vaya para casa.

-¿Quieres que te lleve?- salta Jhom

-No, no hace falta, llamaré a un taxi, tú atiende a tu invitado.

-Ok, como quieras, te llamo mañana.

-ok.

Salí de allí lo más rápido que pude.

DANIEL

-¿Qué paso aquí? 

-Nada Daniel, solo la traje, porque tenía que mandar unos papeles a la universidad, ¿Pero tú a que has venido?

-A nada especial, venía a hablar un poco, ya que llevamos dos semanas sin vernos, pero parece que vine en mal momento.

-Para nada, no ha pasado nada, pero ahora tengo que terminar de mandar los papeles, si no te importa nos vemos mañana.-me suelta Jhom realmente irritado.

-Si, no te preocupes me marcharé.

Baje en el ascensor, salí y en la entrada vi a Lea, estaba triste y parecía impactada como si estuviera en trance.

-¿Lea? ¿Estás bien?

-Si, Daniel tranquilo- asintió con la cabeza para ver si así la creía.

-¿No hay taxis?

-Aún no he llamado, acabo de bajar.

-Bueno, eso es verdad, entonces te llevo a casa.

-No hay porque, pero gracias.

-Vamos Lea, si tu madre se entera de que te deje ir en taxi pudiendo llevarte yo, me mataría.

-Tienes razón.

-Pues entonces vamos.

Salimos del edificio y nos mostramos en mi coche, hoy había traído el Toyota Supra de dos plazas, es el que uso normalmente, y el que también utilizo para ligar, aunque hoy no iba por ese último.

-Vivo en Collins Avence n 13.

-Lo sé- me miro sorprendida-Ani me lo dijo, no sabía el número exacto, pero sí que sois vecinas.

Ella me sonrió, esta preciosa, tenía los ojos brillantes y un poco rojos parecía que había llorado y eso me enfurecía.

-¿Lea? ¿Estás bien? Sé que tu madre no te llamo para que fueras a casa porque está con mi padre en la mía-Ella me miro sorprendida.

-Estoy bien, Si sé que mi madre está con tu padre me mando un mensaje cuando iba a casa de Jhom-se quedó callada unos segundos- pero no paso nada.

-Ok, como quieras-No estoy nada convencido, sé que pasó algo, pero no la voy a presionar, entiendo que no confíe en mí, pero espero que Jhom no sé haya pasado con ella porque le rompería la cara.

Todo el camino hasta su casa fuimos en silencio, no era incómodo, de vez en cuando nos mirábamos y nos sonreíamos. Llegamos rápido.

-Llegamos- dije en voz alta, nos moramos y sonreímos, ella asintió- si necesitas algo llámame ¿De acuerdo?

-Está bien, no te preocupes- me dio un beso en la mejilla y salió del coche.

Me quede mirando para ella hasta que entro dentro de la casa, arranque cuando lo izo y pensé todo el camino en ella hasta que llegue a la mía, en ese beso, fue dulce y me encanto, no sé que me pasa con esa chica, pero me gusta estar con ella.