DANIEL Y LEA Terminada

capitulo 14

-¿Qué pasa corazón? ¿Por qué lloras de esa manera?-le digo mientras acaricio sus suaves mejillas para quitarle las lágrimas, veo la duda en sus ojos- ¿Es por nuestros padres? ¿por qué nos quedaremos solo?

Ella niega con la cabeza y un alivio se formó dentro de mí.

-¿Tiene que ver con Jhom verdad?, has cambiado desde que llego antes, ¿Te ha hecho algo?, si es así me lo dirás, por favor.

Ella se tensa cuando se lo menciono, se queda callada unos segundos luego....

-Daniel, no quiero hablar de ello- Me dice con tristeza en sus ojos.

-Ok, no insistiré, ya que estás más tranquila me iré.

Estaba enfadado porque no me quería contar que le pasaba, al verla así me di cuenta  de que no solo siento por ella deseo, y ganas desenfrenadas de tener sexo con ella, sino que la quiero, me duele verla así, me he enamorado de ella, aunque para la gente sea incorrecto por nuestros padres estar como pareja nos vean como hermanastros, incluido ellos, pero no lo somos no puedo verla de esa manera. Cuando ya estoy de pie a lado de su cama y doy unos pasos para irme, siento que me agarra de la mano me giro y la miro.

-por favor, no te vayas, quédate conmigo hasta que me quede dormida.

Me acuesto a su lado y ella pone su cabeza sobre mi pecho, puedo sentir su respiración, y ella podía sentir los latidos de mi corazón, ella me tiene una mano en el pecho y yo la tengo en su cintura desnuda y con la otra le acaricio la cabeza, espalda y pelo, no iba a poder dormir teniéndola a ella en mis brazos. Noto como levanta su cabeza para mirarme, yo la bajo y la miro, muestras miradas se compenetran, en una mirada profunda podre leernos la mente e igual que yo la de ella, también puedo ver que ella siente lo mismo, sube su mano de mi pecho y acaricia mi mejilla, juega con mi barba, con su dedo pulgar acaricia mis labios, uff  esto es una tortura, ella me mira a los ojos y la boca igual que yo a ella, ya no puedo más le subo la cara agarrándole suavemente del mentón y la acerco, le doy un beso, primero rozando los labios, pero a los pocos segundos  los dos abrimos un poco la boca para dejar paso a nuestras lenguas que empezaron su propio baile, nuestras manos viajaban acariciándonos, yo le acariciaba su espalda desnuda, ella subió encima de mí mientras nos besábamos, nos separamos por falta de aire, ella se sentó derecha encima de mí, sentí su sexo encima de mi pene, que ya estaba duro y palpitante, me mira y me sonríe, cruza los brazos delante e su pecho y se quita la camiseta, dejándome ver su maravilloso y perfecto pecho, que eran un poco grandes para su pequeño cuerpo, agarro la parte baja de mi camiseta y empezó a subírmela mientras dejaba besos pequeños, primero en mi abdomen, abdominales, pecho, entre besos también pasaba su deliciosa lengua, me estaba matando de deseo, con mi ayuda terminamos de quitar la camiseta, se agachó y volvimos a besarnos en los labios con pasión, lujuria y deseo, yo tenía una mano acariciando su espalda y la otra la subí a su pecho empecé a acariciarlo con un suave masaje y apretar su pezón ya endurecido y ella gemía en el beso, al igual que yo, se movía en círculos encima de mi pene, ya no podía más me iba a correr si seguía si y no quería eso a sique la gire y me puse encima de ella.

-Hoy será un poco rápido, ya que con tu tortura no creo aguantar mucho sin correrme, llevo mucho tiempo deseando esto- le digo al oído en un susurro.

Le dije mientras besaba su cuello y masajeaba sus pechos, ella me acariciaba la espalda y el pecho, sentí que se arqueaba cuando le hable y una sonrisa salió de mis labios, fui bajando los besos hasta su pecho, empecé a besarlo, chuparlo y morder el pezón despacio mientras ella volvía a arquear la espalda, quite un poco mis piernas para con mis manos quitarle las bragas y el pantalón y yo el mío, mientras cambiaba de pecho, cuando estábamos ya los dos desnudos me metí entre sus piernas, yo seguía con su pecho en mi boca y con una mano acaricia el otro, con la mano libre fui acariciando su abdomen y sus piernas, eran perfectas, suaves, acaricie desde su rodilla y por su músculo interior, hasta llegar a su sexo, tenía podo bello, el justo, sé que está depilada, toque con mi dedo su clítoris y ella gemía cada vez más fuerte, metí uno de mis dedos, mientras acariciaba el clítoris, empece a moverlo de dentro a fuera, note que casi se venía y e introduje otro dedo, le di más movimientos  esta casi apunto, cuando le metí el tercero con tres movimientos se vino rápido al orgasmo, que no cesaba, ya que yo no dejaba de penetrarla con mis dedos, tenía que acostumbrarla, sé que el tamaño de mi pene no es común, es largo y grueso, y a muchas mujeres les he hecho daño por eso, espero que a ella no, saque mis dedos y empecé a meter mi pene, deje su pecho y la empece a besar en los labios, la fui penetrando poco a poco hasta que llegue al final, estaba tan cerrada, note como una mueca en ella.

-¿Estás bien te lastimé?- le dije con la voz entrecortada.

-No Daniel, no es eso- me dijo casi en un susurro.

-Entonces que es, estás tan apretada que pensé que te lastimara.

-Es que vas muy lento.

Le sonreí, esta mujer acabará conmigo seguro, empecé a penetrarla un poco rápido, ella cruzó sus piernas en mi espalda y la apretaba para que fuera más profundo y rápido, me levante sobre mis rodillas sin dejar de penetrarla, la agarre de las caderas, le levante un poco y empecé a penetrarla salvajemente entre mis manos y sus movimientos teníamos un ritmo frenético y perfecto, cada vez que mi pene chocaba con su sexo gemíamos y casi gritábamos de placer, ella no para de decir mi nombre y me volvía loco no duramos mucho tiempo en corrernos, los dos a la vez, me tumbe un poco encima de ella sin hacerle daño, aun con mi pene dentro, cuando recupere un poco salí de dentro de ella y me acosté a su lado, la cogí y la abracé ella puso su cabeza en mi pecho, estuvimos unos minutos en silencio acariciándonos ,cuando giro su cabeza para mirarme, nos seguíamos acariciando. 

-Daniel.

-Ummm

-¿Qué pasará ahora?