Just don't let me disappear

Capítulo 35: Together, happiness will always be with us

Wei Wuxian abrió los ojos poco a poco porque la claridad de la habitación era demasiado intensa. Tuvo que parpadear varias veces para que sus ojos se acostumbraran y lo primero que notó fue que en la cabecera de su cama estaban las figuras de dos personas besándose. Se levantó de golpe, pero unas manos lo obligaron a volverse a acostar. —Ten calma, A-Xian. Todo está bien, estás en casa.

Wei Wuxian no entendía qué pasaba. —¿Shijie? ¿Q-qué es esto?

—¡A-Xian, me has tenido tan preocupada! Has estado inconsciente por tres días desde que Jiang Cheng te trajo a casa.

Volvió a intentar levantarse, esta vez con la ayuda de Jiang Yanli y observó todo a su alrededor. —¿Dónde está Lan Zhan? ¿Y Jiang Cheng?

—El joven maestro Lan regresó a Gusu en cuanto los sacaron de la cueva. Jiang Cheng debe estar con nuestro padre, pero no creo que tarde en venir a verte. Ha estado aquí todas las tardes.

Wei Wuxian sintió que su corazón se aceleraba. ¿Qué estaba pasando? Sintió una molestia en la parte trasera de su cuello y llevó su mano hacia allí, pero sintió dolor a pesar de que lo había tocado por encima de un vendaje.

—Tranquilo. Es una herida muy reciente, es normal que te duela todavía. A-Xian, ¿quién te mordió?

Antes de que pudiera llegar a contestarle, alguien interrumpió en la habitación. Eran Jiang Fengmian y Jiang Cheng que iba siguiendo a su padre. Cuando notaron que estaba despierto, ambos sonrieron. —Qué bueno que ya estás consciente. A-Li, dale un poco de comida porque tiene que estar fuerte para recibir una visita.

—Sí, padre —dijo y luego ambos dejaron la habitación.

Wei Wuxian estaba cada minuto más confundido, pero ahora lo habían dejado a solas con Jiang Cheng que lo miraba fijamente. Tenía tantas preguntas en mente, pero solo atinó a pronunciar una. —¿Qué visita?

—Lan Wangji ha venido en compañía de Lan Qiren y otros miembros de la Secta Lan.

—¿Lan Zhan? ¿Qué han venido a hacer?

Jiang Cheng entrecerró los ojos y se acercó más a la cama. —¿Cómo que qué han venido a hacer? Wei Wuxian, habla honestamente. ¿Fue Lan Wangji quien te marcó?

Su corazón latía a todo lo que daba. Jiang Cheng sabía de su marca, seguro la había visto al sacarlo de la cueva o lo habían visto mientras lo curaban. Apenas atinó a asentir y sonrió ligeramente. Jiang Cheng entornó los ojos y se dejó caer en la orilla de la cama. —Lan Wangji ha venido a hacerse responsable.

Jiang Yanlí llegó en ese momento con un tazón de sopa y se lo acercó a Wei Wuxian que lo recibió gustoso y entusiasmado porque al terminar de comer podría ver a Lan Wangji. Jiang Yanli sonrió al verlo tan animado y miró a su hermano mientras suspiraba. —No puedo creer que nuestro querido A-Xian vaya a dejarnos pronto.

Jiang Cheng se cruzó de brazos y resopló. —No será muy pronto. El Receso de las Nubes está en reconstrucción y Lan Wangji también está recuperándose de sus heridas. Padre ha insistido en que se queden aquí hasta que todo esté arreglado allá.

Wei Wuxian tenía la boca llena en ese momento y no podía contestar, pero la emoción era visible en sus ojos. Jiang Yanlí le limpió la comisura de la boca y le quitó el tazón que ya estaba vacío de las manos. —Le diré a padre que estás listo para recibir al joven maestro Lan.

Jiang Cheng se puso de pie y resopló. Miró un momento a Wei Wuxian y salió también de la habitación sin añadir nada más.

Wei Wuxian acomodó un poco su cama y trató de ponerse presentable antes de que Lan Wangji llegara. Pudo escuchar sus pasos acercarse, junto a los de alguien más. Jiang Yanli había escoltado al joven hasta la habitación de su hermano y se retiró en cuanto los dos se saludaron. Lan Wangji permaneció un momento de pie ante Wei Wuxian, pero luego se puso de rodillas y se inclinó a modo de disculpa. —Estoy avergonzado por haber sucumbido a mis instintos y haberte puesto en esta situación.