Namjoon empezó a estresarse, todo se estaba saliendo de sus manos.
¿Un secreto? El único secreto aquí es que aquella cena que él mismo había pagado era importante para él, importante para Jungkook e importante para esos dos.
Jin y Yoongi se habían vuelto más que cercanos en aquella salida, ya saben, paseo y charlas en los que eran partícipes los tres. Eso le parecía bastante bien, pues Namjoon se había ido a un lado a hablar con Jeon por teléfono.
-¿Puedes dejar de ser tan histérico? -Jungkook lo frenó, pues Namjoon no dejaba de maldecir- primero, vas a llegar y a asegurarte de que Yoongi no sospeche nada; segundo, cuando esté toda la gente que invitaste, me llamas y entramos como si nada; tercero, sacas la maldita caja y metes el maldito anillo, en el maldito dedo deforme de tu querido novio.
-¡Mierda! -se quejó- eso último no me importa mucho, ¿sabes mocoso?-suspiró- hago esto por dos razones, por él y por Jin. Quiero tenerlo en mi vida por siempre pero también quiero que mi amigo esté bien con Jimin.
-Lo vamos a lograr -soltó- ¡te hablo luego!
El castaño guardó su teléfono y sonrió como un tonto mientras volvía a la mesa.
-Lo siento.. -se disculpó con la familia Kim y tomó asiento.
-Entonces.. -empezó la mamá de Taehyung- ¿eres el afortunado?
-Así parece.. -Sonrió y tomó la mano del peli rojo- soy muy afortunado ahora que está conmigo.
-Lo eres -rió- Tae es un hombre sabio, determinado, sabe hacer sus cosas bien cuando se lo propone, y es amoroso aunque pretenda esconderlo aveces -sonrió- Oh, míralo, es un bebé.
-Mamá.. -se quejó en un susurro mientras la miraba avergonzado- suficiente.
-Está bien, está bien -sonrió igual que Taehyung, cudradamente- sólo trato de presumir y recordar que eres un buen muchacho. En todo caso, Jungkook -lo miró- quiero que sepas que tienen todo mi apoyo.
La señora volteó a mirar a su esposo.
-Kim.. ¿Puedes decir algo? -preguntó.
-¿Sincero? -la señora abrió sus ojos, dandole una advertencia- no quería que las cosas fueran así, pero nuestro hijo es tan inteligente y desafiante, eso me gusta y estoy dispuesto a aceptar todo lo que se proponga. Tienes mi apoyo igualmente -sonrió y miró su reloj- ¿podemos acabar con esto? Tengo una reunión a las 5.
-Entonces, supongo que todo está hecho -sonrió- los dejó.. si quieren algo, díganle a la señora Lee que consiga algo para ustedes.
Los chicos asintieron, Jimin estaba a un lado en silencio.. recordando el día de los golpes, admirando la valentía de Taehyung y la compresión de sus padres. Sentía envidia, quizás.
Pero aquél no era un tema que pensara a menudo, no había sabido de sus padres desde ese día y a decir verdad, no estaba interesado. Pensar en ese día lo ponía triste porque recordó todo aquello que hizo Yoongi para hacerlo sentir bien.. lo extrañaba un montón.
Vio a Jungkook y a Taehyung juntar sus labios con pasión, como el mayor de ellos tomaba su cintura y se sonreían mutuamente.
Sin duda, extrañaba muchísimo a Min.
-¿Por qué no vives aquí, Tae? -preguntó tratando de no seguir pensando en su peli negro, sabía que si continuaba se sentiría peor.
-Solía estar muy sólo en esta casa.. decidí que era lo mío y que para hacerlo completo debía tener mi propio espacio -encogió sus hombros- me fui hace tres años y aunque parece mentira, mi relación con mis padres mejoró de esa forma -rió-parece que salir de casa es la única forma en la que puedes ser escuchado y entendido.
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Can I eat ur ass? -YM
Fanfiction-¿Mochi? -sonrió- ¿acaso eres el tipo frío que usa ese tipo de sobrenombres? -Soy el tipo frío que está perdido por un chico tierno y cálido, y con un cuerpo de infarto. ¶ O donde Jimin comenzó a utilizar lencería con la ventana abierta y la atenta...