CAPITULO 14

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Mirando a lo lejos parece que el río y el horizonte fuesen uno. No faltaba mucho para que acabará la tarde. El gris plomizo de las nubes se fundia con el marrón claro del agua

Todo estaba en calma

Ni el agua se movía en la orilla, donde el río se hace barro

Algunos años atras, cuando las aguas no estaban tan contaminadas, a esta hora las familias se demoraban en irse luego del pic nic del domingo

Es increíble como todo cambia

La última vez era tan distinto. El río, los árboles, las piedras

Me senté en una piedra a un par de metros del río. Desde ahí con la vista en el río parece que no hubiera nada más en el mundo, solo la extensión marrón interminable y yo

Hay muchos que piensan que nuestro destino ya está escrito, que ninguna de nuestras acciones es fruto del azar, que nada de lo que hagamos puede modificar nada

Me cuesta creerlo

Me cuesta creer que toda esta confusión es solo producto del destino

Me gustaría que todo volviera a estar en orden, tranquillo como hoy esta el río

No sentirme tironeado por obligaciónes y deberes que no se si son correctos

Pero ¿que es lo correcto? Indudablemente obedecer a mis padres. Ellos hacen lo mejor por mi

Aunque también habrán hecho lo mejor por Ezequiel y ahora no están conformes con él

Ezequiel

¿Por que sentirme obligado a verlo? Siempre fue una referencia lejana, nunca estuvo presente en mi vida, al menos en los últimos años

El viento se levanta con fuerza. El río, antes quieto, ahora se agita y me moja los pies

Vuelan hojas y ramas. Tengo que irme antes que llueva si no quiero empaparme

Tal así sea mi destino. Calmas y tormentas

Los ojos del perro siberianoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora