Cuando todo te sale mal y no entiendes el porqué. ¿Cuando te das cuenta que no sólo estás mal, sino que también maldecido por todos los cielos o ser por haber? Bueno, así me encuentro en estos momentos, mientras soy empotrado con fuerza contra la pared de mi habitación. Y siendo para colmo amenazado con aquellos colmillos y ojos rojos sangre... -Me perteneces, Stiles. -¿Aunque seamos enemigos? -pregunto sin creerlo aún. -¡Enemigos! con eso afirmó mis palabras. -Quién lo diría... Enemigos con derechos. -río irónico, pero soy remediado inmediatamente al sentir sus labios y cuerpo sobre el mío. -Eres mi mayor enemigo... -Y tu el mio, Derek...