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Jackson se negaba a soltar su mano mientras que sus ojitos estaban llenos de lágrimas.

- Do, Madkie

Deja caer su mochilita azul al suelo y abraza con fuerza a su pequeño amigo aferrándose a su ropa haciendo puños sobre la tela sintiendo a Jackson esconder el rostro en su cuello.

- Microbio.. Tenemos que entrar

- Mero.. Teno mero

- Pero ahora eres un niño grande! Como yo!

- Do quedo

Se aparta de su amigo y le quita el gorrito, se lo guarda en el bolsillo para luego peinar los suaves cabellos castaños del menor y besa su pequeña nariz.

- Porque no quieres?

- Dodo

- Coco se quedo con mi Omma y Bob esta con ella

Después de que su Appa fue por ellos a la casa de los abuelos Choi pelearon durante todo el camino hasta su hogar porque su Appa no quería saber nada sobre tener a Coco (nombre que él y Jackson eligieron con ayuda del abuelo Choi).

Cuando llegaron a su hogar corrió a los brazos de su Omma y lloro haciendo un berrinche hasta que termino enfermando, su Omma llevo a su Appa al cuarto y a la mañana siguiente entre quejas su padre acepto mantener a Coco siempre y cuando los Kim ayudaran con el bicho.

Su Omma hacia magia porque él nunca lograba que su Appa le dijera que si cuando ya le había dicho que no.

- Todo estará bien, microbio, Pinky promise

Tomando la mano de Jackson lo lleva hasta su salita y lo vigila hasta que entra.

Se queda un momento junto a la puerta hasta que ve un mocoso nuevo llegar y lo jala por la ropa poniendo su mejor expresión ruda.

- Tu, cosa deforme.. Vez al niño de cachetitos? Es mio y si tu o otro mocoso lo hace llorar voy a hacer guiso con sus órganos

Aprieta su puñito sobre la ropa del otro niño sacudiéndolo un poco hasta hacerlo llorar, lo suelta dejándolo caer al piso mientras su boca hace un puchero y sus ojitos se llenan de lagrimas cuando ve a la maestra acercarse.

- Que sucedió, Markie?

- Lo choque, Señorita Han, fue un accidente

- Oh, pobrecito mi niño

Mantiene su puchero incluso cuando la señorita Han deja un beso en el lugar falsamente golpeado y se aleja hacia su salita con una sonrisa satisfecha de si mismo.

Ni sus papas ni Jackson entendían que su esposito era demasiado bueno como para defenderse solo y para él era divertido golpear a otros mocosos.

+

- Mire, Señor Im, es la tercer pelea en la que Mark participa

Podía ver a su hijo por la ventana de la oficina de la directora y apenas lograba concentrarse en lo que ella decía puesto que todo él estaba mas preocupado por su cachorro. Su naricita estaba llena de sangre y no podía respirar bien pero sabia que si hijo estaba mas preocupado por lo serio que se veía él.

- Porque fue esta vez?

- No lo se, señor, él no quiso hablar y los otros niños le tienen miedo así que no hablaran tampoco

Frota una mano en su rostro sabiendo que probablemente, Mark, se había pelado con otro niño por el pequeño hijo de sus vecinos.

Cuando su hijo tomaba esas actitudes realmente crea que en cualquier momento se presentaría como un alfa y uno bastante fuerte a decir verdad pero su madre le dijo que Mark simplemente era un Omega con actitud e instintos de alfa. Comenzaba a creer que ella tenia razón.

- No podemos expulsarlo porque es un niño pequeño y si dejamos a un lado las peleas, no hay nada de que quejarse del pequeño Mark.. Es educado, bastante inteligente para la edad que tiene y es sumamente tranquilo hasta que algo activa sus instintos

Se aparta el cabello del rostro respirando profundamente y se gira hacia la directora tomando la mochila de su pequeño.

- Hablare con él para que esto no vuelva a suceder

- Nos veremos pronto, señor

- Hasta luego

Haciendo una pequeña reverencia sale de la oficina tomando en brazos a su pequeño cachorro frotando su mano en la espalda de su hijo de camino a la salida.

Sube a su auto dejando a Mark en su lugar y sacando las toallitas húmedas que Jae siempre dejaba por ahí comienza a limpiar el rostro de su pequeño con mas tranquilidad de la que sentía.

- Markie.. No voy a regañarte pero debes contarme que sucedió

- Appa

- Te lo prometo, no voy a enojarme

Toma la mano de su pequeño y le sonríe dándole animo mientras termina de limpiar su carita.

- Una de las niñas dijo que soy raro por tener dos papas y no una mama y un papa como los niños normales

Respira profundamente atrayendo a su cachorro contra su pecho dejando un suave beso en su cabello.

- No eres raro, cariño, ellos son los raros por no entender las diferentes formas de amor en el mundo..

Esa fue la primera vez que el corazón de su pequeño se rompió de verdad y debió suponer que no seria la única, especialmente por la forma en la que era con Jackson y que tan raro todos iban a mirarlos en un futuro.  

Historias de un microbio y una lombrizDonde viven las historias. Descúbrelo ahora