don't tell mom 🗝️-minlix

Cuarenta y dos

Por la mañana, completamente sobrio y con una ligera resaca, Minho quiso golpearse en la cabeza por lo descuidados que habían sido. No sólo la noche anterior, sino por todo. Habían sido tan descuidados en casa, en el dormitorio, en el autobús, en los clubes...

Minho observó a Yongbok durmiendo profundamente sobre la cama, y sacudió la cabeza. Su propia madre sabía, y ahora quizá también Chan. Ellos, obviamente, estaban perdiendo el control de la situación. Quería sentirse peor, culpable o avergonzado, pero una gran parte de él no podía sentirse mal por lo mucho que amaba a su hermano.

¿Era tan malo que no quisiera ocultarlo siempre?

-Sí lo es-se susurro a sí mismo. Suspiró y dejó que su mano acariciara suavemente a Yongbok, antes de ponerse de pie.

Decidió bajar para desayunar temprano. No tenía hambre, pero sabía que Chan estaría allí.

Después de que estuvo bañado y vestido, Minho dejó un beso sobre el vientre de Yongbok y marchó hacia el área de desayuno. Tiró nerviosamente de su gorro mientras descendía en el ascensor. ¿Qué iba a decir?

Sentía miedo de tal vez confesarlo todo únicamente por decírselo a alguien. No confiaba en que Chan estuviera de su lado, pero tanto esconderse y escabullirse realmente era un peso sobre él.

-Buenos días, hyung-saludó caminando por el área de desayuno. Chan estaba sentado en una de las mesas con un periódico y un plato de waffles.

-Oh, hola-respondió Chan. Dejó su móvil y le señaló las sillas continuas.-Sírvete. Desayuno continental gratis.

Minho rio ligeramente.-Claro.

-Te despertaste temprano-Chan se inclinó hacia delante.-¿Algo te molestaba?

-No-Minho desvió la mirada, fingiendo echar un vistazo al desayuno.-¿Por qué?

Chan tomó un largo sorbo de su jugo.-No lo sé, Minho.

Ahí estaba, ese tono. Minho estuvo inmediatamente seguro de que Chan sabía algo. Trató de no hacerle caso a sus nervios, relajar sus hombros y parecer despreocupado.

-Estas camas del hotel son horribles.

-La mía estaba muy bien, pero yo tenía toda la cama para mí solo, así que...-dijo Chan, volviendo a leer algo en su móvil.

Minho mordió su labio. ¿Qué significaba eso? Decidió ignorarlo y eligió su desayuno, a pesar de que se sentía como si fuera a vomitar.

-Entonces-dijo Chan con el móvil frente a su rostro.-¿Cómo está Yongbok esta mañana?

Minho dejó caer el panecillo que sostenía.-¿Cómo voy a saberlo?

No, eso no sonó para nada a la defensiva.

-Ustedes dos comparten habitación-dijo Chan, suavemente.-Igual que Changbin y yo, e igual que Jeongin y Hyunjin, y así, ¿no?

Minho asintió y dijo.-Sí, pero él estaba dormido cuando me fui. Um. Anoche estaba realmente ebrio, ¿sabes?

-Los dos lo estaban-dijo Chan.-Ustedes no aguantan nada-rio levemente entre dientes y eso tranquilizó a Minho.

-Uh, sí. Apenas recuerdo algo-mintió.-No hice nada vergonzoso, ¿verdad?

Chan rio de nuevo.-Ah, sólo lo habitual.

Minho miró su desayuno, su estómago se revolvía de manera desagradable.-Tan mal ¿eh?

-Nada que no hubiera visto antes-Chan miro su móvil y resopló.-Sin embargo, Changbin sigue inconsciente. Ni siquiera podrá decirte si anoche salimos. ¿Lo viste? Completamente dormido sobre uno de los sofás.

Minho logró soltar una débil risa.

-De todas formas, Changbin se comportó-dijo Chan.

El terrible malestar en el estómago de Minho empeoró. Se inclinó hacia atrás, desistiendo completamente de comer algo. Chan aún tenía su cabeza enterrada en la prensa, y Minho quiso, desesperadamente, verle la cara. Chan había agarrado un periódico que actuaba como una pared y era frustrante.

-Pero ya sabes-continuó Chan, mirando por sobre las páginas.-Tal vez deberíamos ser más cuidadosos sobre cuanto bebemos. Algunas cosas que yo podría considerar normales, otros podrían considerarlas distinto.

Minho lo miró cuidadosamente, sin apartar la mirada.-¿Algo cómo qué?

El periódico subió, nuevamente, y Chan dijo.-Ya sabes.

-¿Lo sé?

Chan rio, cosa que estaba haciendo bastante esa mañana.-Eso espero. De todas formas, ¿es por eso que bajaste tan temprano?

-Uh, yo...

-Porque sólo nosotros debemos saber-afirmó Chan.

-¿Nosotros?

-No eres estúpido, Minho. Deja de actuar como uno. No creo que jugar al tonto ayude a alguien-dijo Chan, en un tono tenuemente agudo.-Sólo... no bebas mucho, ¿bien? No siempre estaremos alrededor para...

-De acuerdo-interrumpió rápidamente Minho, poniéndose en pie y apartando lejos su desayuno.-Puedes quedarte con el resto de esto, voy a... Sí.

-Nos vemos más tarde-dijo Chan, cortante.

Minho caminó lo más rápido que pudo intentando parecer casual. Caminó hasta que llegó a su habitación y en cuanto entró, Yongbok le atacó.

-Minmin-dijo Yongbok bostezando, cerrando sus brazos en su cuello.-¿A dónde fuiste? Es muy temprano.

-Bajé a desayunar con Chan-contestó bajando gentilmente los brazos de su hermano.

Yongbok le miró un poco consternado.-Oh, ¿sí? ¿Cómo fue eso?

Minho se sentó en la cama y frotó su frente bajo su gorra. No podía mirar a Yongbok. Incluso en la intimidad de su propia habitación se sentía observado.

Dejó salir un pequeño suspiro y encendió la televisión.

-Salió bien.