Sobre cómo no caer en el amor #PGP2024

➵ Capítulo 16. Sobre cómo los sueños pueden confundir.

La luz que entra por mi ventana me avisa que ya es de mañana. Resulta qj que no pude pegar mis párpados ni por un segundo en la noche, me costaba ponerme cómoda en mi cama y, cada vez que estaba cerca de conciliar el sueño, otra vez esa imagen se reproducía en mi cabeza.

Ahí estábamos de nuevo. Con la brisa de la noche, el calor de nuestros cuerpos, él rozando mi piel y su aliento chocando con el mío. Todo lo que sentí en ese momento revivía y me hacía sentir en las nubes.

Definitivamente, esa simple imagen me ponía mal... Pero en serio, mal.

-Ah, ¿qué demonios me está pasando? -murmullo para mí misma.

Me pongo de pie y cierro las cortinas, dejando la habitación en oscuridad nuevamente. Hoy no tengo ganas de nada. No tengo ganas de vivir. Me limito a respirar, hundirme en la vergüenza y quemar mis neuronas para buscar una explicación razonable a todo esto que me está pasando... A todo esto que he estado sintiendo y a todo esto que me ha estado atormentando.

¿Por qué Nathan lo complica todo siempre? ¿Por qué no simplemente puede dejar de aparecerse en mi vida y dejarme en paz, irse de vacaciones o simplemente irse del planeta? ¿Acaso no ve que está destruyendo todo por lo que he trabajado? Todas las veces en que fui odiosa con chicos que sólo querían ser lindos conmigo, las veces en que hablé mal de las parejas enamoradas y de lo estúpidas que se veían sabiendo que en algún momento iban a terminar... ¿Todo eso para qué, ah? Si volví al mismo estado de hace años. ¿Por qué por más que intento alejarlo siempre termino más cerca de él?

Soy totalmente consciente de que no puedo enamorarme de Nathan. No quiero. No puedo. No... Ah, me voy a matar.

¿Siquiera me gusta?

O sea, sí, es lindo. Pero dentro de los parámetros de lindura, no es como si fuera un Chris Evans o algo por el estilo. Es decir, sí, tiene ojos bonitos. Un millón de personas tienen ojos bonitos, así que no es nada del otro mundo. También tiene sonrisa bonita, sobretodo por ese pequeño hoyuelo que se le forma en la mejilla, pero los hoyuelos son una malformación del músculo, así que equis con eso. Tiene cabello bonito, además. Me provoca hundir mi mano y despeinarlo un poquito; hasta tiene nariz bonita y... Está bien, ya, ok, todo él es bonito. Entiendo.

Creo que puede gustarme mu... ¡No!

Ese pensamiento se me acaba de escapar. No me gusta. No me gusta. No me gusta. Becca, no te gusta.

Me revuelvo entre las sábanas buscando una posición que me ayude a conciliar un poco el sueño.

Sólo necesito dormir un ratito. Sí, eso es lo que me falta.

Me convenzo de que mi cabeza está cansada y saturada, es por ello que se llena de pensamientos estúpidos que no quiero tener.

¿Es normal dudar, no? Digo, no soy de piedra por más que quiera serlo. Tengo sentimientos, eso es obvio. Así como también es obvio que estos sentimientos pueden confundirse, equivocarse y hacerme pensar cosas que no son.

Sip, es eso. Estoy super segura. Puedo calmar mi conciencia.

Con la mente en calma, puedo ir a la oficina y explicarle eso.

"Nathan, no malinterpretemos la situación. Yo no te gusto y tú no me gustas. Lo que pasó entre nosotros solo fue un pequeño desliz, pero queda en el pasado. Podemos seguir siendo buenos compañeros de oficina"

Listo. Directo y claro... Justo lo que necesito en estos últimos días.

Con esa idea en mente, soy capaz de ponerme de pie, vestirme y arreglarme como de costumbre.