Una loba al asecho.

Estos son mis demonios.

Kioko por instinto supo que era Amaya—Hola Ami—dijo al abrir la puerta.

Tengo noticias hermosa—dijo fingiendo felicidad para que Kioko estuviera bien—por ahora vivirás conmigo hasta que te despejen tu pieza—dijo ansiosa.

Suena bien...—dijo Kioko algo triste—es nostálgico dejar todo lo que conozco, mis padre no pueden saber lo que soy y mantener mi promesa de ocultar a mis antiguas amistades del PNN lo que pasó en realidad...aveces me siento sola sin rumbo—dijo triste al sentarse en la cama.

Amaya camino hacia su lado y se sentó junto a Kioko—puedes contar conmigo para lo que sea—sonrió al tomarle la mano y le tomo la mano—yo te ayudare en tu entrenamiento de lo básico, ya que...—dijo Amaya y fue interrumpida por un golpe incesante.

Kioko se levanto y abrió la puerta—Hola novata...esta la presidenta aquí—dijo Mariel molesta.

Mary...¿ Qué sucede?—preguntó al caminar preocupada.

Mariel le pegó una cachetada—Como se te ocurre someterse así con tu padre y dejar la presidencia—grito molesta Mariel.

Kioko quedo plasmada sin entender lo que pasaba—Mary hablemos afuera—sugirió Amaya al salir.

Ami...me puedes explicar lo que pasa—dijo sorprendida y confundida Kioko.

Cuentale...que no sera tu polola—dijo desafiante Mariel molesta— a ver si después de esto te quiere—dijo cerrando la puerta con llave.

Amaya dio un suspiro—Mi padre es el director, es un sádico desde pequeña me torturaba, él mato a mi madre...aveces ese demonio esta en mi interior y sale, es lo que lucho con todos los días tengo un medio hermano que se llama Yerald...hoy cuando fui a la oficina de mi padre, aclaro nadie sabe que el es mi padre acepto mis seguidoras que las marque porque soy un alfa...Arwen es un ángel por lo general se marcan los betas lobos, pero la marque por su seguridad, Mariel es un beta demonio también lo hice por su seguridad, ya que Karl sabe que mi punto débil que son mis amigas, las marque para nadie puede meterse con ellas quiero decir los alfas, mi hermano es un alfa malvado...mañana dejaré de ser la presidenta, ya que mi padre me hizo elegir y obvio te eligí a ti, desde que te conocí supe de tu cambio y sabia que este día llegaría, mediante que te conocí me gustaste, Arwen sabía de esto...tengo que enseñarte lo básico y si no lo logras te quitaran tus poderes, a mi también...pero mi demonio quiere quitarle los poderes a Mariel y Arwen, así que le ofrecí mi cuerpo para que lo torture—dijo y se saco la polera—estas son mis marcas de mis demonios—dijo mostrando su espalda con heridas sanadas y moretones—según él soy la única resiste su tortura...lo hice para protegerlas Mariel, no quería que sufrieran un castigo por mi culpa y mi decisión.

¡ Callate!—grito Kioko molesta y casi llena de llanto—¿ Por que te expones así?, no eres una súper heroína...

Amaya miro a Koiko—no lo soy...pero quiero un cambio en este sistema de mierda—dijo Amaya—si me odias por ser este demonio, bien...pero debo orientarte en ser una beta o te quitan tus poderes—dijo al ponerse la polera—debo irme—se detuvo—no te marque así que si quieres puedes ir con cualquier alfa, no te obligare a estar conmigo si no lo quieres—cerro la puerta.

Mariel miro a Kioko que se puso a llorar—Novata...no creo que debas dejar a Ami así, si sientes algo fuerte por ella, la presidenta suele ser terca, pero es la mejor persona que he conocido—dijo consolándola.

Ven—dijo Mariel tomándole la mano, salieron en silencio en busca de Amaya—" silencio novata, no muevas ni un musculo si no quieres que Ami se entere que la estamos vigilando"—dijo telepaticamente, al llegar al llegar desolado que esta detrás del edificio abandonado cerca del sótano de las torturas.

Mariel y Kioko miraron detenidamente sin contraer o soltar algún músculo de su cuerpo.

Amaya comenzó a rugir—diablos...este demonio no me deja tranquila—dijo Amaya con los ojos morados—menos mal que no estuve mas tiempo con ellas o las lastimaría—susurro al ver su garra crecer—necesito algo a que pegarle—dijo con su voz firme y deseosa de maltrato—espero que Arwen no lo note—susurro preocupada, se saco la polera y comenzó a lastimarse a ella misma haciendo que su piel recibiera golpes.

En la mente de Amaya estaba su padre mirándola—Alejate demonio—grito molesta al rugir.

Kioko estaba a punto de ayudarla, pero Mariel le negó—" no puedes novata...es una lucha entre ella y su demonios, Ami jamas quiere que nos involucramos con ella en este estado"—dijo Mariel

Malditos mis demonios—dijo Amaya desesperada al lastimarse—Kioko...mi ángel—susurro al volver a la normalidad—lo siendo mi ángel, no quise lastimarte—comenzó a sollozar—mis demonios siempre estarán allí, pero me encargare de que ellos no se acerquen a ti, aceptare tu decisión si no me eliges a mi por mis demonios que siempre estarán—la sangre corría en su brazo lastimado—odio sentir tranquilidad y placer al lastimarme, es lo que me deja cuerda y lejos de mis demonios que no quieren mantenerse encerrados...quieren atormentar a todos, pero no permitiré que ellos sean libre—se levanto y comenzó a liberar su lado alfa—estos demonios no me ganaran.

Hija—dijo Karl al salir del sótano—Vamos a entrenar—miro sus heridas limpias y sonrió satisfactoriamente—te lastimas...eso es placentero ¿No?—dijo con la mirada perdida .

No lo sé si sea placer o no, pero mejor vamos al entrenar con mi hermano—dijo seria Amaya al alejase con el brazo curandose.

Ya te estas curando debe ser las habilidades del se el alfa y que hayas marcado a un ángel—dijo Karl—me pregunto si puedo jugar con ella o con la beta del nivel 2.

Kioko se asusto—Ellas no tienen nada que ver aquí, este asunto es entre tu yo—rigió desafiante Amaya—vamos a la practica.