No presidenta, quiero estar en este momento contigo sin importan si me sancionan o no– dijo algo avergonzada Kioko.
Amaya sonrió amablemente– Esta bien kioko– “Es tan linda esta chica"– se ruborizó un poco, pero Kioko no lo noto– vamos a buscar a tus compañeros.
Si presidenta– dijo Kioko.
Presidenta, la necesitamos en el área de los PSN, los chicos de contavidad están peleando con los chicos de administración– dijo Mariel, miro a Kioko– estas ocupada.
Dile al secretario que se encargó de eso por favor, tengo un asunto, los novatos del PNN están por esta zona que esa prohibida a estas horas– dijo seria Amaya.
Su presidenta le aviso– dijo Mariel y salio corriendo, alejándose en segundos de ambas.
Eres una mujer ocupada presidenta– dijo Kioko celosa.
Pues si, estoy haciendo que las cosas cambien– dijo Amaya, sintió uno a mundanos en el despegue hablado, apareció allí–Está es la zona prohibida no pueden estar aquí– dijo la presidenta molesta– parece de inmediato.
No sabíamos, el presidente nos dejo– dijo inclinándose ambos.
¿ Donde están sus compañeros?, están todos en problemas– dijo Amaya autoritaria– sé...que ustedes no tiene la culpa, pero la regla es la regla.
Si tu lo dices, la presidenta invicta elegida por los PSN, pero ustedes desobedecen las reglas– dijo molesto el presidente.
No lo hacemos–dijo Amaya.
Hay por favor, ustedes son los que tiene privileguios aquí, solo porque son súper dotados que ven lo que nosotros no vemos, es estúpido eso–dijo el presidente.
Amaya dio un suspiro–crees que no quiero cambiar esto, es verdad es injusto esto, pero hay cosas que es mejor no saber presidente...crees que ustedes son los único que sufren en este maldito sistema–dijo molesta Amaya, Kioko le toco el hombro para calmarla por inercia–Ambos bandos sufrimos, pero no podemos hacer nada por ahora...internamente estoy tratando de cambiar eso...pero sé que sola no podre–dijo Amaya, se dio la media vuelta–No le diré al director, solo por esta vez, vuelvan todos a sus habitaciones incluido los de PSN, mucha diversión por hoy–comenzó a caminar pensativa.
Kioko la miro preocupada a Amaya que estaba algo triste y decaída. Al ver que todos se fueron camino a su lado–Kioko vete a tu cuarto–dijo seria al caminar.
Presidenta...¿ Te encuentras bien?...perdón por el caos que te cause—dijo preocupada Kioko.
Tranquila estoy bien–dijo Amaya con una leve sonrisa–ven te acompaño a tu habitación—camino tranquilamente.
Presidenta...¿ Cómo sabes que estaba en el arbusto?—preguntó confundida Kioko.
Bueno...no somos normales, diría que somos dotados a nuestra manera...pero no puedo decirte Kioko...–dijo amable y luego susurro–No por ahora...hasta que seas una de nosotros querida.
Kioko miro a Amaya, le llamo la atención que se curo rápido y la quedo mirando–¿ Qué me miras?–preguntó Amaya al sentir su mirada–Sé que soy guapa, pero no me desgastas mirándome tanto–bromeo.
Kioko se sonrojo levemente al mirar sus ojos penetrantes e intensos que podía ver su propia alma—Lo siento...—dijo Kioko nerviosa.
“Que linda se ve así”—pensó Amaya al mirar hacia adelante, sintió algo raro—“algo va mal"–Kioko, te dejo...se me olvidó algo—se dio la media vuelta–Descansa—comenzó alejadarse de ella.
Kioko quedó confundida—¿Qué le sucedió?.
Amaya camino al olfatear algo raro—Huele a vampiro–susurro, pero no dio con el paradero de este ser sobrenatural.
Kioko estaba llegando a su habitación cuando sintió que alguien la observaba.
Amaya sintió algo raro y vió un vampiro asechando, corrió y ataco al vampiro–“ Alejate"–ordeno con los ojos oscuros.
Vampiro la miro–Presidenta...que inoportuna...justo que ella sera mi comida.
Amaya se transformo y comenzó a atacarlo, haciendo que la cinta del presidente fuera cubierto por pelo–« recuerda que los mundanos de aquí no se pueden comer»–dijo poniéndose en guardia, esperando que Kioko entrase.
Kioko escuchaba gruñidos, pero no veía nada–Que raro—dijo confundida y entro a su habitación.
Amaya volvió a la normalidad–¡ Vete!–ordeno con un rugido.
Tengo hambre–dijo desesperado el vampiro novato.
Amaya dio un suspiro–Bien...sigueme–camino hacia de nuevo hacia la cocina, seguida del vampiro novato–Niño tienes que aprender que los mundanos no son comida, porque tu después trabajaras para ayudarlos en lo que necesiten...quizás después te enamores de uno...este sistema que tenemos, nos hace aprender todo del mundano y nos orienta para mezclarnos mucho mejor en nuestra vida adulta.
Sí...algo entiendo presidenta...tu eres alguien especial ¿ No?–dijo al caminar les falta 3metros para estar en la cocina.
Las personas sobrenaturales caminan mas rápidos por eso llegaron luego a la zona del comedor–No lo soy, solo hago mi trabajo...al final me eligió la mayoría de los estudiantes, aunque igual aveces no sé que decir o cómo actuar.
Es difícil ser presidente–dijo concluyendo el vampiro.
Sí lo es, pero a la vez es lindo, porque puedes hacer la diferencia aunque cueste–dijo al llegar al límite de la cocina, saco la llave del bolsillo–solo los representantes del consejo lo tenemos–sonrió y abrió la puerta, caminaron hacia atrás, había una maquina con una contraseña—«653001»—tecleo en la maquina. Se abrió.
Impresionante—dijo sorprendido.
Amaya, abrió una mini puerta—Entra...Ahí—dijo tranquilamente.
El vampiro entro y vio a animales atados muertos y se acerco a uno, que era mas bien un torso de vacuno y le comenzó a chupar la sangre con sus dientes—“el sabor es pasable, pero no es tan rico como sangre humana"—pensó.
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Una loba al asecho.
RomanceAmaya es una chica universitaria de segundo año de enfermería...ella tiene un secreto igual que todos sus compañeros de salón...su universidad se llama " Luna negra" este instituto no es normal, tiene secretos oscuros, ¡ Me acompañan a descubrirlo...