Pelea entre Alfas.

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Amaya negó con la cabeza—No puedo permitir esto—dijo seria, camino hacia el alfa de mal genio—Aquí no podemos pelear, vamos afuera, total aquí es zona de PSN.

Quieres morir beta—dijo saliendo del lugar.

Mariel la detuvo—No lo hagas...no lo hagas por obligación, ya que me marcaste—susurro.

Dio  un suspiro Amaya—Mariel no lo hago por obligación o por liderar una manada, lo hago porque creo en el cambio y además eres mi amiga a pesar que no lo veas así, el jura que soy un beta, solo porque no tengo los ojos rojos...

Vamos presidenta...acaso te doy miedo—dijo el alfa.

No, acabemos con esto luego—dijo Amaya al camino hacia él y salieron al patio.

Mariel se desespero y fue a buscar a Arwen, sabia que la única en hacerla entrar en razón es ella.

Si te logro derrotar, seras marcada por mi y solo me Servirás a mi beta, sé que hay otros alfa en la sala, solo que no sean presentado aun...son unos gallinas por no aceptar el poder que significa ser un alfa.

Amaya sonrió malvadamente—Quien sabe, pero si yo gano...dejaras de obligar a los betas en ser tu sirvientes, ya tienes 5, no abuses de tu poder—dijo seria— y algunos de ellos los obligaste lo puedo sentir.

Los lobos comenzaron hacer un círculo por la pelea, ellos se sorprendieron al ver que un beta y un alfa iban a pelear.

No me vengas con eso beta...te crees superior porque eres la presidenta, no me hagas reír—dijo el lobo.

Amaya sonrió y espero que atacara—cuando quieras alfa.

Mariel encontró a Arwen recorriendo el lugar de los PNN a su lado estaba Caratheir serio—¡ Vicepresidenta!—grito Mariel agitada.

Mariel ¿Qué sucede?—preguntó seria Arwen.

Vicepresidenta, voy a seguir recorriendo el lugar si hay algún anormalidad por aquí—dijo Caratheir serio.

Bien, pero recuerda no herir a los mundanos con tu presencia...si no seras castigado—dijo Arwen.

Si lo sé—dijo el demonio y se alejo.

Arwi, necesito tu ayuda Amaya peleará con un alfa y estará en peligro—dijo preocupada.

¿Por qué va a pelear?—preguntó Arwen intrigada y relajada.

Por mi culpa—dijo triste Mariel— un lobo estaba molestándome y no se cómo, pero la marca me comenzó a doler y al rato después estaba Amaya seria discutiendo con el alfa.

Ella estará bien, si la marca reacciono, es debido a tu miedo y soledad, Ami sabía que tu no eres muy estable, pero también sabía los riesgos de marcarte...su padre es el mayor miedo de Amaya y también su demonio, por eso nos marco...se preocupa por nosotras, ya que ella es la única que sabe realmente como es el director...no puedo contarte más, si quieres saber de ella solo preguntaselo, te lo dirá, además ella siempre estará para ti, ella no te marco para que seas su sirvienta, todo lo contrario.

Mariel se quedo pensativa— ¿ Enserio , crees qué me lo dirá?—preguntó intrigada.

Ella lo único que quiere es el bien y si ella dependiera  mataría a su propio padre para eliminar a los demonios...pero entre alfas no pueden matarse, solo pueden herirse  y puede que le quiten a su manada, pero eso depende de cuan fuerte es el alfa—dijo Arwen.

¿,Cómo sabes todo esto?—preguntó sorprendida Mariel.

Porque Amaya me lo contó, su padre desde chica la entreno para sea fuerte, le enseño todo lo necesario para saber todo de los alfas y betas—dijo Arwen.

Amaya estaba un poco lastimada y agitada por la rapidez y el ataque de su contrincante, ella golpeaba al alfa, él no lo hacia sentir nada, Amaya peleaba bien, el lobo estaba sorprendido que un beta peleará como un verdadero boxeador, pero no era lo suficientemente fuerte—Eso es lo que tienes beta—dijo riéndose el alfa al verle agitada, él no tenia tanto moretones como Amaya.

Amaya no quería recurrir a su lado alfa porque sabía que el sed de poder y los demonios en su interior la controlaría, sabe el riesgo del Alfa y no quería perder nada de ella. Pensar y pensar, pelear y pelear  tuvo que liberar su lado alfa—No me he rendido—dijo Amaya con los ojos rojos intensos—no me dejas otra opción alfa. 

¡¿ Qué eres un alfa?!—gritó sorprendido el lobo.

Sí, no me gusta parte—dijo Amaya golpeándolo al intensificar sus golpes.

Arwen y Mariel cayeron de rodillas al sentir que la marca palpita,se intensificó el dolor de ambas—No puede ser...Amaya esta usando su lado alfa—dijo Arwen jadeante—los que están vinculados con el alfa en pelea, absorben nuestra energía, ya que de por si sólo pueden ganar a pesar que sean mas fuerte que un beta, su poder es ilimitado y no duran mucho en una pelea por eso  necesitan muchos sirvientes para mantenerse a salvo y fuerte...Amaya odia esto y por eso nunca libera su poder de alfa—dijo cansada— esta tortura no terminara hasta que Amaya derrote a su enemigo—dijo con voz temblorosa.

Mariel estaba asustida— Amaya...por favor termina esto rápido que me da miedo— susurro.

Amaya sintió la angustia de Mariel—pronto terminaré—susurro, levanto la cabeza, comenzó a correr y a golpear al alfa, dejándolo muy lastimado.

Los sirvientes de el comenzaron a gritar por el dolor del alfa, ya  que quería ganar el poder de Amaya.

“,Si sigo así, matare a Arwen y Mariel"—pensó preocupa Amaya—Bien...me rindo—dijo Amaya seria, volviendo a su normalidad.

El alfa se río— eres débil, pero eso te gane.

Amaya se puso la venda— Me retiro...—dijo agotada.

Presidenta...desde mañana quiero que me sirvas—dijo el alfa.

Bien, pero sera en la noche...tengo obligaciones—dijo Amaya.

Sí—dijo el alfa feliz—me gustaría marcarte, pero entre alfas no se puede.

Amaya lo miro con odio—No me interesa, ya perdí y me debo ir—dijo seria.

Una loba al asecho.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora