maestro de cocina. →ls.

18.

mira aquella puerta una vez más, dudoso entre tocar o quedarse afuera y mandar un mensaje mintiendo acerca de un dolor de cabeza intenso.

pero harry styles no era un cobarde, él afrontaba los problemas con la frente en alto y justo ahora tenía que sacar toda su valentía y ver a su alumno a la cara.

toca un par de veces y espera.

instantes después un pequeño castaño, lleno de pintura por toda su ropa abre y lo observa caminar hacia la sala de estar con su celular en la mano.

— "si... lo sé mateo, tú no tienes que preocuparte por nada, lo tengo casi resuelto..."— el castaño se toca el puente de su nariz como si estuviera frustrado y suelta un suspiro.— "lo tendré listo en estos días, tengo la idea pero no sé como plasmarla... si, de acuerdo. ¡nos vemos!

y cuelga.

— "¿todo bien?"

el más bajo niega.— "problemas en el trabajo, tengo pendiente un cuadro y mi mánager me está presionando para que lo termine."

y todo eso no habría pasado si tan sólo se hubiera puesto al corriente con su trabajo.

pero, ¿cómo pintar a su antojo si aquel rizado frente a él no dejaba de encargar tarea?

últimamente su cabeza no daba entrada a la inspiración, por tenerla llena de la basura que escupía el rizado.

frunce su ceño escuchando sus pensamientos, ahora todo estaba más claro.
sus neuronas y el mismo louis habían llegado a un acuerdo.

todo era culpa de harry.

estúpido henry.
grita su subconsciente, burlándose por el cambio de nombre.

— "cuando me falta la inspiración de algo suelo salir a caminar. mirar a mi alrededor, las personas, el cielo, resulta muy buena terapia."

l parpadea un par de veces escuchando con atención las palabras ajenas.

— "entonces tengo que salir justo ahora."— bromea mientras se aleja de su maestro y busca su cuaderno sintiendo de nuevo tenso el ambiente, como si le hubieran arrojado un balde de agua fría devolviéndolo rápidamente a la realidad, había que hablar de ello, ¿verdad?

— "vi los videos que me mandaste".— dice louis para tratar de romper aquel silencio.— "y estuve practicando..."— gira su cabeza para mirar a su maestro y se encuentra con su mirada, traga un poco de saliva.— "estoy seguro que puedo cortar casi igual."—

louis no iba a mentirse, era interesante la manera en que explicaban y que mejor que aprender a usar el cuchillo como todo un experto.

— "¡me alegra demasiado!"— harry sonríe y se sienta en una silla alta.— "¿podrías enseñarme?"

l asiente y camina hacia el cajón de los cubiertos y saca un cuchillo. busca en su refrigerador una cebolla y comienza.

su maestro se acerca a su lado y un brillo llena sus ojos, pues ver que sus clases daban frutos lo ponía feliz.— "lo estás haciendo excelente, louis".

— "gracias"— un pequeño sonrojo colorea sus mejillas y suelta la cebolla.

— "tus movimientos son lentos, pero eso es normal, con un poco más de práctica, seguro y lo dominas".— h toma el cuchillo y corta un poco aquella verdura, dejando al castaño boquiabierto.— "¿ves? en unos días podrás hacer esto. pero recuerda, con constancia y práctica."

ambos se quedaron callados.

bien, allá vamos.

— "uhm... ¿louis?"

— "¿si?"

— "yo... lamento si te incomodó lo que hice ayer."— carraspea un poco volviendo a su lugar.— "prometo que no volverá a repetirse, lo menos que quiero es que creas que me estoy aprovechando de mi posición."

— "¡no! no te preocupes... también fue un poco mi culpa."— mentiría louis si dijera que no quería que se repitiera.— "me dejé llevar y una cosa llegó a la otra y bueno..."

no había que narrar lo demás, pues ambos sabían perfectamente que había ocurrido.

— "entonces... ¿estamos bien?

— "estamos bien."

— "me alegra saberlo, estaba un poco paranoico acerca del tema, pensé que no querrías volver a verme, lo cual habría sido malo, pues pagaste el curso completo."

louis ríe un poco y mueve su mano con desdén.
— "descuida, no soy de esos. ahora que todo quedó bien, entre los dos, dime maestro, ¿qué me vas a enseñar hoy?"

— "métodos de cocción."— dice dejando sus hojas a un lado, simples anotaciones y ayuda visual por si algo olvidaba.

— "una palabra"— deja la pluma color verde a un lado y levanta uno de sus dedos.— "aburrido".

h suspira, aquel maldito gnomo no iba a cambiar.— "sólo anota, tomlinson".

y la clase se fue como agua que lleva el río.

cuando terminó y ambos estaban guardando sus cosas el rizado notó que el más pequeño no le quitaba los ojos de encima.— "¿se te perdió algo?"

— "tienes un moco".

y la cara del rizado se tornó roja como tomate, su más horrible miedo se estaba haciendo realidad, ¿por qué dios, qué hice mal? ¿fue acaso ese chicle que me robé cuando tenía cuatro? piensa dramáticamente.

cuando se dio la vuelta para tratar de buscarlo, su ceño se frunció al escuchar a louis reír.

— "¡es broma, profesor! no tienes nada, sólo estaba pensando."

— "idiota."— murmura.

el alumno habría dicho algo de no ser por la preocupación del cuadro en cuestión, sus ojos no se habían apartado del varonil perfil del más alto.

podría servir, escucha a su subconsciente hablar, carraspea un poco tratando de llamar la atención del otro.— "oye, ¿ya te vas?"

— "si."

una pregunta estúpida con una respuesta obvia.— "¿por qué?"

— porque la clase ya terminó, louis... ¿te sientes bien? estás más idiota de lo normal.— el rizado toca la frente del contrario con una sonrisa burlona.

— "estoy bien".— suelta un manotazo y suspira.

— "¿necesitas algo de mi"?— pregunta y el chico asiente.— ¿qué pasa?

los ojos de louis brillaron por un momento.— "dime harry, ¿alguna vez te han pintado?"

el rizado lo mira unos instantes y niega luego de unos segundos.— "no, ¿por qué?"

— "¿te gustaría?"

y hubo silencio después de eso, su cabeza hizo clic cuando recordó la anterior llamada.

¿enserio estaba pidiendo eso?

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hola personitas lindas.
espero que les haya gustado el capítulo.

¡estoy emocionada!
me había quedado sin ideas de como seguir pero estuvo pensando Y BUM.
mi imaginación volvió y ya tengo ideas para varios capítulos.

¿cómo la pasaron en año nuevo? espero muy bien, ¿santa claus y los reyes magos les trajeron regalitos?

foto: massimo bottura.
encabeza e impulsa muchos proyectos altruistas: su fundación, Food For Soul, promueve el reaprovechamiento de la comida, la integración comunitaria y la seguridad alimenticia para miles de personas en situación vulnerable.

eso es todo, nos vemos en el siguiente capítulo.

xoxo.