Capítulo 20

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Capítulo 20.

Ni si quiera tengo tiempo de reaccionar, o de apartar mis ojos de los suyos inyectados en sangre, porque otra sombra se alza en la cocina: y ahora es aquella con los profundos ojos azules brillando tal y como los ví la primera vez que lo conocí.


Pruebo el gusto de mi sangre cuando aprieto mi mejilla interior de mi boca con los dientes para ahogar otro grito.


Le vuelvo a dar la mano a Derek, esperando que él haga algo, que él me saque de esto.


En vez de eso prefiere gritarme

.

- ¡Anne, trata de abrir la maldita puerta!


¿Pero qué posibilidad tengo cuando Katherine, Alex y Kristen se encuentran en una misma habitación y yo solo estoy tratando de escapar con un chico que conocí hacer horas?


Aún así me arrastro por el suelo gateando hasta la puerta e ignoro los temblores de mis piernas y brazos. Me acerco junto con Derek y pateamos la puerta, la golpeamos con los puños, la empujamos con nuestros cuerpos. Pero no sirve de nada, porque la puerta sigue ahí.


Reconozco aquella voz familiar cuando ella pronuncia mi nombre. - Tú y tu amigo no lograran salir, Anne. La he bloqueado. -Dice Katherine con la voz entrecortada.


Aprieto mis ojos con fuerza ¿Por qué ella y Alex siguen ahí? ¿Por qué no vienen y nos atacan? ¿Qué es lo que ellos quieren de mí?


Pero lo escucho, A Katherine se le escapa un gemido de dolor, como si le hubiesen golpeado en el estómago y hubiesen sacado todo el aire de sus pulmones.


Y entonces no puedo evitar girar mi cabeza y mirarla y lo que veo me sorprende aun más:  Katherine está apoyada contra la pared lateral de la cocina con el brazo de Alex en su garganta quitándole el aliento. Ella forcejea contra Alex, pero él la tiene acorralada mientras lucha por asfixiarla.


Y, hay otra cosa, la daga de Katherine se le ha caído. Y está a cinco pasos de mí.

No sé cuantos segundos paso mirándolos, pero la mirada de Katherine conecta con la mía y en ese momento, no sé como, levanta su pierna un poco y patea a Alex en la rodilla.


Este suelta un grito de dolor y afloja su agarre contra Katherine. No la suelta del todo, pero es lo suficiente para que Katherine pueda apartarlo y dirigirse hacía mí y Derek.


Yo me apresuro rápidamente y recojo la daga caída en el suelo y me paro. Y, en cuestión de un mili-segundo  Katherine está parada frente a mí.


No tengo ni idea de como apuñalar a alguien, pero sostengo la daga frente a mí, manteniendo el espacio entre nosotras.


Katherine me escruta de pies a cabeza y ríe. Yo la miro a los ojos, incapaz de apartar la mirada, aunque sé que Alex y Derek están gritándome algo no tengo idea de qué.


-Esa daga. -Habla Katherine por fin. - Es mía, gracioso que intentes apuñalarme con ella.

Tormenta (Editando)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora