el origen de los guardianes II: quien soy en realidad?

Parte 3

Conejo.

- ¡ni crean que se saldran con la suya! - dije saltando mientras hacía desaparecer a humanoides negros que parecían hechos de humo.

Norte apareció por uno de sus portales y comenzó a atacar con sus espadas.

- ¡hasta que al fin te das cuenta de que no estoy! - grito mientras atravieso a uno como si mis boomerangs fueran cuchillos.

- ¡no fuiste el único con problemas! - me respondió mientras se acercaba a mí y apuñalaba a una de esas cosas que se encontraba detrás de mí. Vi a una destruyendo mis flores de huevos de pascua y le lancé un huevo explosivo.

- ¡¿a qué te refieres con eso?! -

- ¡Eris atacó al taller! - dijo aun peleando. - ¡y sospecho que Hada también tiene problemas! -

salté sobre uno de los huevos gigantes de piedra y ataqué a las figuras que volaban - ¡¿y qué intentó con eso?! -

- no lo sé, pero mi panza me dice que algo malo! -

- ¡hasta cuando tú y tu panza! - me quejé.

Hada

- ¡ya basta! - decía a las haditas las cuales no dejaban de discutir y pelear por cosas sin sentido.

Sus chillidos eran tantos que ya me estaba mareando. - ¡señoritas, compórtense! - grité tras intentar separarlas pero nada daba resultado.

de repente vi arena dorada por todos lados divididas en tentáculos que llegaba a cada una de ellas y las hacía dormir. Yo rápidamente comencé a sostenerlas para dejarlas en algún sitio. Volé tan rápido que me estaba mareando.

por suerte vi a meme que me ayudó.

- gracias! - me lancé sobre él muy contenta de que me ayudara y di vueltas con él mientras lo abrazaba, lo solté y creo figuras en su cabeza girando para darme a entender que lo mareé. - lo siento. - miré a todas las haditas dormidas. Esto era un desastre! Debía recoger muchos dientes. - no sé que sucedió. Estaba a punto de irme a la reunión y de la nada empezaron a gritarse y luego comenzaron a pelear sin un motivo contundente. Si no hubieras llegado, no sé qué hubiéramos hecho. -

Con figuras de arena me dio a entender que debíamos ir al taller.

- ¿y qué esperamos? ¡andando! - salí disparada mientras meme trataba de seguirme el paso.

Jack

Me quejaba del dolor, pero por suerte cada vez era menos.

- ¿Cómo estas? - me preguntó gisel que trataba de sujetarse de mí sin lastimarme, ya que la llevaba abrazada.

- tan bien como se puede después de una apuñalada. - le aseguré. La miré y veía el dolor en su rostro. - ¿y que hay de tí? -

- lo mismo digo. - trató de sonreírme, pero igual sabía lo adolorida que estaba.

Sentí que algo fue disparado justo en mi espalda. - Arr.. - me quejé mientras comenzábamos a caer. Solté a gisel por el impacto en mi espalda. Eso fue doloroso, al punto que sentía  cómo perdía la conciencia.

Gisel

empezamos a descender, yo caía más abajo que jack. Mis uñas se tornaron grises, no quería admitirlo, pero estaba preocupada.

invoqué mis poderes y antes de poder tocar el piso una especie de red colorida apareció debajo de nosotros sosteniéndonos. Luego de caer en ella, jack cayó sobre mí, por el dolor que eso causó me desconcentré y caímos al piso.